Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

CUBA POR SIEMPRE CUBA
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 
 
  Herramientas
 
General: LA DESAPARICIÓN DE SANTIAGO MALDONADO EN ARGENTINA
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 19 en el tema 
De: Ruben1919  (Mensaje original) Enviado: 16/08/2017 07:47



Primer  Anterior  5 a 19 de 19  Siguiente   Último  
Respuesta  Mensaje 5 de 19 en el tema 
De: Ruben1919 Enviado: 13/09/2017 12:59
Lo que decía Patricia Bullrich días antes de la desaparición de Maldonado
Mano dura para "ordenar" el país
La ministra de Seguridad aseguró no tener problemas en pagar el costo del uso de la fuerza para poner en orden "un país que estaba dado vuelta". "No hay que pensar en las consecuencias", afirmó.

Veinte días antes de la represión a la comunidad mapuche Pu Lof de Cushamen, en Esquel, donde fue visto por última vez Santiago Maldonado y donde ahora desde el Ministerio de Seguridad reconocen que por lo menos dos efectivos hirieron a algún manifestante, la ministra Patricia Bullrich reconoció que estaba dispuesta a pagar las consecuencias por el uso de la fuerza de los efectivos bajo su orden con tal de "ordenar" el país.

“No hay que estar pensando en las consecuencias” y “Yo tengo que actuar”, fueron las respuestas de la ministra de Seguridad cuando le preguntaron si era consciente de la gravedad que implicaba que a algún uniformado “se le pase la mano” y mate “a alguien del otro lado”. Bullrich no vaciló en responder de esta manera a la pregunta que le hizo Alejandro Fantino, en su programa Animales Sueltos, el 13 de julio pasado.

La ministra afirmó también que estaba dispuesta a pagar el costo por la actuación de los gendarmes para “ordenar un país que estaba dado vuelta”. Sorprendido con la respuesta, hasta el propio conductor del programa le contestó que es “peligroso” que piense así.


Respuesta  Mensaje 6 de 19 en el tema 
De: Ruben1919 Enviado: 16/09/2017 11:07
Cristina Kirchner visitó al escritor Osvaldo Bayer y hablaron sobre la desaparición del joven
La misma inquietud por Maldonado
La ex presidenta visitó al escritor e historiador en su casa de Belgrano. Compartieron anécdotas y preocupaciones.
Cristina Kirchner escuchó anécdotas de Osvaldo Bayer sobre su exilio en Alemania.
Cristina Kirchner escuchó anécdotas de Osvaldo Bayer sobre su exilio en Alemania. 

La ex presidenta Cristina Kirchner visitó ayer a Osvaldo Bayer, histórico columnista de PáginaI12. “Hermoso encuentro con el escritor e historiador Osvaldo Bayer en su casa de Belgrano, bautizada por Osvaldo Soriano como El Tugurio”, escribió en Twitter la ex jefa de Estado y actual candidata a senadora por Unidad Ciudadana. “Osvaldo me compartió anécdotas sobre su exilio en Alemania y hablamos un buen rato sobre economía y la desaparición de Santiago Maldonado”, contó Cristina, que antes había difundido por Facebook una foto de ambos sonrientes en un ambiente repleto de plantas.

La visita de Fernández de Kirchner a Bayer se produce en el contexto de su campaña con vistas a las elecciones legislativas del 22 de octubre pero también de la creciente estigmatización y criminalización de la comunidad mapuche, impulsada desde las usinas de prensa del gobierno nacional. Como escritor y desde las contratapas de PáginaI12, en donde escribió desde su fundación en 1987, Bayer denunció las violaciones a los derechos humanos de los pueblos originarios y difundió sus reivindicaciones. En 1963 estuvo dos meses preso por impulsar un plebiscito para cambiarle el nombre a la localidad bonaerense de Federico Rauch y reemplazarlo por Arbolito, el ranquel que le cortó la cabeza al coronel prusiano para vengar a sus compañeros. En los últimos lustros reclamó sin suerte, junto a grupos indigenistas, el traslado del monumento a Julio Argentino Roca, ubicado en  pleno microcentro porteño, y su reemplazo por un monumento a la mujer originaria. En 2008 escribió el guión y el libro cinematográfico de Awka Liwen, film que relata la historia del exterminio de los pueblos originarios y el robo de sus tierras durante la “Campaña del desierto”, entre otros acontecimientos de atropellos impulsados desde el Estado.

La ex mandataria recordó anoche en las redes sociales que el escritor “es reconocido internacionalmente por su obra, en particular La Patagonia Rebelde, película premiada en reiteradas ocasiones que luego de su exhibición fue prohibida, lo que desencadenó el exilio de la mayoría del elenco y autores, incluido el propio Osvaldo Bayer”. El historiador escribió a principios de la década del ‘70 los cuatro tomos de Los vengadores de la Patagonia trágica, que fue la base del film La Patagonia rebelde, de Héctor Olivera, en el que tuvo una breve intervención como extra el fallecido ex presidente Néstor Kirchner.


Respuesta  Mensaje 7 de 19 en el tema 
De: Ruben1919 Enviado: 16/09/2017 11:08
Las declaraciones testimoniales revelaron que el operativo tenía por objetivo la persecución de los mapuches
Con la orden de “apresar manifestantes”
Los gendarmes que hablaron ayer ante el juez Otranto revelaron que recibieron esa instrucción de Pablo Escola, segundo al mando del Escuadrón 36 de Esquel. No fueron siete, sino al menos veinte los agentes que ingresaron a la comunidad el día que desapareció Maldonado.
Verónica Heredia, abogada de la familia Maldonado, al salir del juzgado federal de Esquel.
Verónica Heredia, abogada de la familia Maldonado, al salir del juzgado federal de Esquel. 
Imagen: Télam

Desde Esquel

Los gendarmes que ingresaron al Pu Lof en Resistencia el pasado primero de agosto lo hicieron a través de diferentes puntos, algunos por la tranquera, otros rompiendo alambrados, con una orden bien precisa: “Apresar manifestantes”. Quien dio esa instrucción directa fue Pablo Escola, segundo al mando del Escuadrón 36 de Esquel. A partir de las testimoniales concretadas ayer ante el juez federal de Esquel, Guido Otranto, quedó claro también que los efectivos que bajaron al río y realizaron un rastrillaje en esa zona fueron, al menos, 20 personas dispersadas en varios equipos, y no un simple grupo de 7 gendarmes como pretendió instalar el Gobierno nacional. Pero no sólo eso. También quedó expresada de manera tácita la persecución hacia los integrantes de la comunidad mapuche, en línea con la orden impartida por Escola.

El conductor de una de las Ford Ranger, Andrés Ahumada, narró que cuando llegó hasta la pendiente del río -frenó tres metros antes- pudo observar de su lado izquierdo un grupo de gendarmes, ya sobre el cauce y hacia su costado derecho, personas que se iban a caballo. Si bien no lo dijo de manera taxativa, para los abogados de las querellas quedó claro que Ahumada describió una “persecución”. Este chofer también declaró que portaba un arma reglamentaria -de uso obligatorio para los conductores-, calibre 9 milímetros, al igual que el conductor del Eurocargo, Lucio Bouch. El tercer conductor de una Ford Ranger que declaró ayer fue Martín Lozano, quien no llevaba armas de fuego.

Tanto las testimoniales de Ahumada, Bouch como la del gendarme Manuel Fernández, del Escuadrón 35 de El Bolsón, aportaron elementos claves para comprender la persecución que hubo hacia los integrantes de la comunidad, bajo las órdenes de Escola y la dispersión de grupos que existió durante el operativo. Según indicaron a PáginaI12 fuentes con acceso al expediente, lo que se realizó desde la ruta hacia el río fue un barrido con diferentes grupos de gendarmes que tenían la orden directa de “atrapar manifestantes”.

El jueves, el gendarme Daniel Alberto Orrego sostuvo que una vez sobre el río, los efectivos realizaron un rastrillaje. Esto hace suponer a las distintas querellas que los uniformados no realizaron tal rastrillaje para secuestrar “bienes materiales” como sostuvo ayer el abogado de la fuerza Gonzalo Dalzone ante una consulta de este diario, sino que lo que buscaban eran a los integrantes de la comunidad.

Según la declaración testimonial de Fernández, en uno de los grupos estaban Daniel Gómez, Juan Carlos Pelozzo, Julio Segovia, Ramón Vera y un enfermero de apellido Ramos. Pero más delante de este equipo estaban los efectivos Orlando Yucra, Echazú y el “escopetero” Darío Zoilán. Por las fotografías que surgiendo del expediente, Echazú también fue visto con una escopeta en sus manos, además de resultar herido en su cabeza. Ayer trascendió que Zoilán habría disparado su arma durante aquel operativo.

Por las distintas testimoniales tomadas hasta el momento, surge que tanto Echazú como Gómez estaban en contacto con los diferentes grupos que actuaron sobre el río. La localización de los diferentes efectivos será clave al momento de la reconstrucción de los hechos, ordenada por Otranto para el próximo miércoles. El testigo Matías Santana, integrante de la comunidad mapuche, observó a un grupo de tres gendarmes en el momento que golpeaban a Santiago Maldonado. Si bien por la distancia en que se encontraba será difícil la individualización de esos efectivos, la reconstrucción podría aportar información valiosa en función de la posición que ocupó cada grupo de Gendarmes sobre el río.

Al igual que las declaraciones ante Otranto efectuadas el jueves, quienes testimoniaron ayer dejaron en evidencia que quien efectuaba todas las ordenes era el comandante Escola. Según la declaración del chofer del Eurocargo, Lucio Bouch, el comandante del Escuadrón 36 estaba parado sobre la pendiente, observando los movimientos de los gendarmes que estaban sobre el río.

En las últimas dos jornadas -hoy será el turno de Echazú- otra de las preguntas insistentes fue si efectivamente alguien vio a Neri Robledo tirarle una piedra a los “manifestantes” como trascendió de las entrevistas realizadas por la propia Gendarmería. Hasta el momento no hubo un solo efectivo que haya visto a Robledo tirar ninguna piedra. De hecho, el Gendarme Orrego declaró ante el juez que en realidad la versión de la piedra fue “un invento de Robledo para mostrar hombría”.

Para la querella, resulta inverosímil esta versión (ver aparte). “En cualquier otra situación, donde no esté en juego una desaparición forzada, esta versión de la piedra no tendría sentido”, indicó a este diario una fuente con acceso directo al expediente.

También se les preguntó a todos los gendarmes que ingresaron a la Lof si observaron al Unimog dentro del territorio pero nadie dijo haber visto nada. Hasta el momento, ni el juez Otranto ni la fiscal Silvana Avila ordenaron peritaje alguno sobre las huellas que fueron fotografiadas por el defensor oficial Fernando Machado con la colaboración de un fotógrafo de la APDH. Esto es relevante ya que los integrantes de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos aseguran que dentro del territorio de la Pu Lof en Resistencia había cuatro vehículos y no tres.

@spremici


Respuesta  Mensaje 8 de 19 en el tema 
De: Ruben1919 Enviado: 16/09/2017 11:09
La Cámara Federal de Comodoro Rivadavia resolverá si aparta o no al juez
Otranto rechazó su recusación
El magistrado dijo que no tiene relevancia si el procedimiento de Gendarmería del 1º de agosto, tras el que desapareció Santiago Maldonado, estuvo comprendido en su orden judicial de desalojar la ruta o se realizó por una directiva de funcionarios políticos.
El juez Guido Otranto en un procedimiento realizado en la causa el 12 de agosto pasado.
El juez Guido Otranto en un procedimiento realizado en la causa el 12 de agosto pasado. 
Imagen: Gustavo Zaninelli

El juez federal de Esquel, Guido Otranto, rechazó la recusación planteada en su contra por la familia de Santiago Maldonado. Será la Cámara Federal de Comodoro Rivadavia la que resolverá si el magistrado debe apartarse o continuar al frente de la investigación sobre la desaparición forzada del joven.

“El querellante confunde el objeto procesal de esta investigación, que está pura y exclusivamente encaminada a establecer si Santiago Maldonado ha sido víctima del delito de desaparición forzada de personas”, señaló el juez en su resolución. Verónica Heredia, abogada de la familia Maldonado, había argumentado que Otranto no podía estar a cargo del expediente porque él mismo estaba involucrado, ya que fue quien ordenó despejar la ruta 40, marco en el cual se produjo el ingreso de Gendarmería a la Pu Lof en Resistencia, donde se vio por última vez al joven. La querella, además, reclamó investigar la responsabilidad que le cabría en el operativo a Pablo Noceti, jefe de gabinete del Ministerio de Seguridad, que conduce Patricia Bullrich. En su presentación, Heredia cita una nota periodística donde Otranto reconoce que estuvo reunido con Noceti para “evaluar la situación” pero, ante la consulta de si lo llamaría a declarar, el juez respondió que no pensaba hacerlo.

El magistrado negó que el razonamiento de la querella fuera acertado y que manifestó que su imparcialidad no estaba afectada. Aseguró que el hecho de autorizar el desalojo de la ruta 40 no tenía nada que ver con la causa que investiga la desaparición forzada de Maldonado. “No tiene la más mínima relevancia a fin de establecer si se cometió el delito que el procedimiento que realizó Gendarmería Nacional el 1° de agosto haya estado comprendido en la orden judicial que dicté el día anterior o si, por el contrario, fue realizado por orden de la superioridad de la fuerza en cumplimiento de directivas impartidas por el Ministerio de Seguridad de la Nación”, afirmó.

También defendió su trabajo al destacar la “innumerable cantidad de medidas de prueba” que ordenó y afirmó que esas decisiones “no hablan de una postura parcial sobre la existencia del hecho”.

La querella solicitó la unificación de los dos expedientes (desaparición forzada y el hábeas corpus) y que la investigación sea reasumida por el juez que, eventualmente, reemplace a Otranto. La Cámara de Apelaciones de Comodoro Rivadavia deberá decidir si se aparta o no al magistrado de Esquel.


Respuesta  Mensaje 9 de 19 en el tema 
De: Ruben1919 Enviado: 16/09/2017 11:11
Desde la ONU desmintieron al Gobierno
Una felicitación que nunca existió

“El Gobierno fue felicitado por la titular del Comité contra las Desapariciones Forzadas”. Con este título, la periodista Silvia Mercado publicó en Infobae, a última hora del jueves, una nota en la que afirmaba que el organismo, con sede en Ginebra, había reivindicado al gobierno argentino “por ‘su compromiso con la justicia y el tratamiento responsable’ en las causas que investigan la desaparición de Santiago Maldonado”.

La periodista citó a “un vocero” como su fuente y contó que “el subsecretario de Promoción de los Derechos Humanos, Brian Schapira, se acercó a las autoridades para reiterar el apoyo del Gobierno a las tareas del Comité y fue allí cuando Suela Janina (embajadora de Albania ante Bélgica), presidenta de la CED, le transmitió las felicitaciones”.


Respuesta  Mensaje 10 de 19 en el tema 
De: Ruben1919 Enviado: 20/09/2017 09:54
 | 6 | 
El presidente de Argentina, Mauricio Macri, en imagen del 12 de septiembre de 2017. Foto Afp

A medida que avanza la investigación sobre la desaparición del joven Santiago Maldonado en la provincia sureña de Chubut, más se compromete el gobierno del presidente argentino, Mauricio Macri, en contradicciones y una serie de operaciones de encubrimiento que se agravó en las últimas horas con la insólita declaración del juez a cargo de la causa, Guido Otranto.


Respuesta  Mensaje 11 de 19 en el tema 
De: Ruben1919 Enviado: 21/09/2017 13:36
Ailinco Pilquiman, testigo de la represión del 1 de agosto, relató cómo fue la persecución a Santiago Maldonado
“Los gendarmes bajaron a los tiros”
El testimonio reafirmó la hipótesis de las querellas que indica que la Gendarmería entró al predio para “apresar manifestantes”, sin flagrancia a la vista y que los uniformados estuvieron mucho más que cinco minutos –como alega el Gobierno– a la vera del río.
Un Unimog flanqueado por una hilera de gendarmes el 1 de agosto en el límite de la Pu Lof. Ailinco Pilquiman vio dos de esos camiones dentro.
Un Unimog flanqueado por una hilera de gendarmes el 1 de agosto en el límite de la Pu Lof. Ailinco Pilquiman vio dos de esos camiones dentro. 

Desde Esquel

La fiscal federal de Esquel Silvina Ávila recibió ayer la declaración testimonial de Ailinco Pilquiman, testigo central de la represión de la Gendarmería dentro de la Pu Lof en Resistencia Leleque que terminó con la desaparición forzada de Santiago Maldonado. El primero de agosto, ella estaba dentro de la Pu Lof, en la casilla de guardia, y presenció la secuencia que fue desde el hostigamiento previo de la Gendarmería que disparaba sus escopetas para provocar la reacción de la comunidad, el grito del comandante a cargo “¡avancen!”, el inicio de la persecución a Santiago Maldonado, Matías Santana y otro peñi (miembro de la comunidad), que todavía no brindó su testimonio ante la Justicia pero sí dio su versión de los hechos ante los abogados de la CIDH. También presenció el ingreso y salida de un Unimog. Su testimonio reafirmó la hipótesis de las querellas que indica que la Gendarmería entró al predio para “apresar manifestantes”, sin flagrancia a la vista y que los uniformados estuvieron mucho más que cinco minutos -como alega el Gobierno- a la veda del río. 

La testimonial de Ailinco fue adelanta el lunes por PáginaI12, identificada como testigo A. Su declaración estaba prevista para el martes de la semana pasada, pero el juez federal de Esquel, Guido Otranto, privilegió escuchar la voz de los Gendarmes, que fueron bien acompañado por el funcionario Gonzalo Cané, Secretario de Coordinación con los Poderes Judiciales. Tras la suspensión, Otranto la había reprogramado para el lunes pasado, pero ese día ocurrió el mega allanamiento dentro de la Pu Lof, también con el sello del Ministerio de Seguridad. Ante la dilación manifiesta por parte del juez, Ailinco Pilquiman declaró ante la fiscal, para que su testimonio quede registrado en la causa que investiga la desaparición forzada de Santiago Maldonado.  

Ella llegó al territorio el 31 de julio, cerca de las 19. Pasó la noche allí. Al día siguiente, diez minutos antes de las once, observó que llegaba un camión de gendarmería de color oscuro, una camioneta blanca y varios uniformados caminando. Se frenaron delante de la “guardia nueva” donde está ubicada la tranquera. “Los gendarmes bajaron a los tiros”, narró la testigo. 

Sus palabras fueron precisas. Pudo localizar en tiempo y forma a los uniformados que estaban fuera del territorio y sus primeros pasos en el inicio de la cacería. Sobre un costado de la casilla, Ailinco observó dos gendarmes que ya estaban dentro del territorio, como queriendo iniciar la persecución. La persona al mando (probablemente haya sido Pablo Escola) les pedía a los uniformados no avanzar. Del otro lado de la tranquera seguían disparando. Entre los uniformados y la comunidad había aproximadamente 30 metros. 

Algunos comuneros respondían con algún piedrazo pero todos estaban como “distendidos”, distribuidos por el perímetro de la casilla. En realidad, no creían que los uniformados fueran a ingresar al territorio, menos de la manera en que lo hicieron, narró Ailinco.

Pero de repente, la testigo escuchó la voz del gendarme de manera clara: “¡Avancen!”.  Ahí se inició la cacería. Los 30 metros que separaban a los peñis de los uniformados se volvieron centímetros. En ese momento, presenció cómo Santiago Maldonado corría para agarrar su mochila y celular y salir raudamente hacia el río, junto a Matías y el otro peñi que ya ofreció su testimonio ante los abogados de la CIDH pero no en la Justicia, tal cual fue contado en la edición de PáginaI12 del lunes pasado. En el allanamiento del pasado lunes, Santana, junto a otro compañero, estuvieron detenidos durante 12 horas, con sus manos precintadas. Gonzalo Cané y el juez Otranto se olvidaron de contar que los efecticos del Grupo Especial de Operaciones les formularon preguntas sobre la RAM, sus actividades personales y les tomaron las huellas digitales. Literalmente, estuvieron detenidos. Fue un claro mensaje intimidatorio, ante el aval de Cané y Otranto, para con el resto de la comunidad que podría declarar en las próximas horas. 

Ailinco Pilquiman relató ayer que la entrada de los gendarmes a la comunidad el 1 de agosto, entre disparos y gritos, generó la corrida de Santiago, Matías y el otro peñi. Los gendarmes los perseguían muy de cerca. Su visión llegaba hasta antes de que empiece a descender el terreno. Lo que sucedió en el río ya fue narrado por Santana, quien dijo que a Santiago Maldonado se lo llevó la Gendarmería. Pilquiman asegura que los gendarmes estuvieron más de media hora a la veda del río, y no cinco minutos como alegan los uniformados. Durante su testimonial, pudo apreciar la herida del subalférez Emmanuel Echazú (la fiscal le mostró fotos del operativo) y en ese momento escuchó las burlas de algunos gendarmes hacia la comunidad mapuche. Pero lo más relevante de su testimonio, que está en sintonía con otras declaraciones, fue su visualización de dos Unimog en el territorio. Hasta el momento, ningún gendarme afirmó haber ingresado con este vehículo dentro de la Lof. Sin embargo, sus huellas fueron registradas por Fernando Machado, Defensor Oficial, quien le solicitó a Otranto pericias sobre las mismas en al menos tres oportunidades. 

De los dos Unimog, uno se retiró del territorio a los pocos minutos de haber ingresado, según relató Ailinco. ¿Será ese el vehículo que vio el testigo Santana, donde subían a Santiago Maldonado? Quienes están trabajando con el expediente de la causa por desaparición forzada consideran relevante una imagen en la que puede apreciarse un Unimog flanqueado por una hilera de gendarmes en actitud de esconder algo, reproducida en la edición de hoy. 

Ailinco Pilquiman estuvo retenida en la casilla durante 7 horas. Cuando se fueron los gendarmes, todos se enteraron que “faltaba el Brujo”. Según su testimonial, otra mujer que no estaba en la Pu Lof recibió un mensaje de uno de los comuneros que pudo cruzar el río y dar aviso. “Se llevaron al Brujo”, fue la información. Andrea Millañanco fue quien recibió ese mensaje. Ayer también declaró ante la fiscal Avila. 

Ailinco contó ante la fiscal que, enterados de esa situación, iniciaron la búsqueda de Santiago por los Escuadrones de El Bolsón y Esquel. Nadie les decía nada. “No, nosotros no estuvimos a cargo del operativo”, les decían en El Bolsón y lo mismo ocurría cuando iban al Escuadrón de esta ciudad. En ese momento de su relato y de los hechos narrados, Ailinco sintió el peso de la ausencia de Santiago y el atropello hacia su comunidad.


Respuesta  Mensaje 12 de 19 en el tema 
De: Ruben1919 Enviado: 22/09/2017 22:55

Apartan por "parcialidad" al juez que investigaba la desaparición de Santiago Maldonado

Publicado: 22 sep 2017 17:49 GMT | Última actualización: 22 sep 2017 18:25 GMT
5129

Este viernes la Cámara Federal de Apelaciones de Comodoro Rivadavia (Argentina) separó al magistrado Guido Otranto y en su lugar designó al titular del Juzgado Federal N° 2 de la ciudad de Rawson, Gustavo Lleral.

Apartan por "parcialidad" al juez que investigaba la desaparición de Santiago Maldonado
Juan Mambromata / AFP
Síguenos en Facebook

El juez Guido Otranto, a cargo de la investigación de la desaparición de Santiago Maldonado el 1 de agosto tras una represión de la Gendarmería en la provincia argentina de Chubut, fue apartado de la causa. Ahora su lugar lo ocupará Gustavo Lleral quien conduce el Juzgado Federal N° 2 de Rawson.

La resolución fue tomada por la Cámara Federal de Apelaciones de Comodoro Rivadavia ante distintos pedidos de recusación efectuados por la familia de Maldonado y el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS).

El tribunal planteó "temor de parcialidad" de parte de Otranto quién en diversas declaraciones a los medios se mostró reticente a reconocer la posible responsabilidad de la Gendarmería. A pesar de que la causa que él mismo llevaba adelante hasta este viernes estaba caratulada como "desaparición forzada", el juez aseguró que lo más probable era que el joven se hubiera ahogado en el río.

Los audios de los gendarmes

Mientras la Cámara Federal evaluaba la separación de Otranto de la investigación, salieron a la luz distintos audios de miembros de Gendarmería que comprometen a un más a la fuerza. 

"Les dimos corchazos para que tengan", escribió un agente a uno de sus superiores el día que Santiago desapareció tal como informó el diario 'Perfil'. En Argentina la referencia a los "corchazos" remite a disparar balas. Otros audios -de un total de más de 70 teléfonos que están siendo revisados- hablan de gente "flotando" en el río que habrían sido "retirados" por los gendarmes.

Finalmente, quizás el más comprometedor es el audio de Whatsapp que le envió un agente a otro: "Ahí está hablando todavía. Aparentemente dijo que el que tenía a [Santiago] Maldonado en la camioneta era la sargento Sartirana". De comprobarse la veracidad de esta frase, los testimonios de testigos y los planteos de la familia de que el joven fue secuestrado por Gendarmería se terminaría de corroborar.


Respuesta  Mensaje 13 de 19 en el tema 
De: Ruben1919 Enviado: 26/09/2017 23:28

Santiago Maldonado y la ley 26.160: un debate sobre los pueblos indígenas argentinos

Publicado: 26 sep 2017 23:22 GMT
2

Este miércoles el Congreso Nacional de Argentina debatirá la prórroga de la ley 26.160 de relevamiento de tierras indígenas y prohibición de desalojos.

Santiago Maldonado y la ley 26.160: un debate sobre los pueblos indígenas argentinos
Imagen ilustrativa
Marcos Brindicci / Reuters
Síguenos en Facebook

Desde la desaparición de Santiago Maldonado en Argentina el pasado 1 de agosto, su caso cobró relevancia nacional y mundial. Sin embargo, existe un trasfondo que explica por qué ese día la Gendarmería reprimió a la comunidad mapuche del Pu Lof Cushamen en la provincia de Chubut.

Los indígenas se encontraban reclamando por la libertad del 'lonko' (jefe) Facundo Jones Huala y el reconocimiento de sus tierras en disputa con la multinacional Benetton. Justamente la ley argentina que regula la situación de los territorios de los pueblos originarios, la 26.160, está en el centro del debate.

Aprobada en el año 2006, establecía la tarea de, en un lapso de tres años, relevar (es decir, recopilar datos) todas las tierras de comunidades aborígenes del país con el objetivo de resolver disputas de este tipo. Sin embargo, al no cumplir con el tiempo estipulado, desde el Gobierno se fueron extendiendo sus plazos. 

En noviembre de este año vence su última prórroga y, si el Congreso Nacional no aprueba una nueva extensión, puede desencadenar una situación muy conflictiva. La legislación será discutida este miércoles por los diputados argentinos.

Más de la mitad en peligro

La ley 26.160 declara "la emergencia en materia de posesión y propiedad de las tierras que tradicionalmente ocupan las comunidades indígenas originarias del país y ordena suspender los desalojos hasta que se realicen los relevamientos", detalló en diálogo con RT la doctora en antropología Florencia Trentini. La especialista graduada en la Universidad de Buenos Aires (UBA) señaló que "por lo tanto esta ley reconoce la situación de precariedad y vulnerabilidad jurídica en la que se encuentran estos territorios".

En concreto los relevamientos estipulados por la legislación deben recopilar y sistematizar "información jurídico-catastral e histórico-antropológica de cada una de las comunidades".

Trentini historizó que la ley debió ser prorrogada "en 2009 y 2013" al no llegar a cumplir con los plazos, y hasta el momento se encuentran sin relevar "casi a la mitad de las comunidades registradas". En total hay más de 1.500 comunidades identificadas por el Programa Nacional de Relevamiento Territorial de Comunidades Indígenas (RETECI), que depende del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI).

De ese total, fueron tomados datos de 759, "cerca del 49% de las comunidades". No obstante "solo 459 cuentan con una resolución del INAI que considera a los relevamientos terminados".

La antropóloga detalló que "otras cientos tienen los relevamientos iniciados pero no terminados" y, por lo tanto, si no se prorroga la ley "más del 50 % de las comunidades inscriptas en el registro quedarían en una situación de vulnerabilidad jurídica, pudiendo ser desalojadas de sus territorios".

Una carpa por la ley

Frente a este escenario, desde el sábado 23 y hasta el miércoles, los pueblos originarios instalaron una carpa frente al Congreso Nacional. Más de 40 comunidades nucleadas en el Colectivo Tierra y Territorio exigen la prórroga de la ley 26.160.

Mediante un comunicado citado por el diario 'Página/12' exigieron "el cumplimiento efectivo de los Derechos de los Pueblos Originarios, consagrados en la Constitución Nacional, Leyes y Convenios Internacionales". A eso también sumaron el "cese de las persecuciones de integrantes de las comunidades, que son procesados, presos, muertos y desaparecidos en la defensa del territorio".

Finalmente se sumaron también al reclamo por la "aparición con vida del hermano Santiago Maldonado, desaparecido por Gendarmería al solidarizarse con la causa indígena".

Santiago Mayor


Respuesta  Mensaje 14 de 19 en el tema 
De: Ruben1919 Enviado: 22/10/2017 07:48
22 de octubre de 2017
El mapa dibujado por Matías Santana gana importancia tras la autopsia
Un testimonio que sigue siendo clave
El miembro de la comunidad Lof declaró el 5 de septiembre y dibujó un mapa con el lugar donde vieron por última vez a Maldonado, y la ubicación de los gendarmes que lo estaban persiguiendo a los tiros.
Por Sebastián Premici
Echazú, ensangrentado. “No fue nada, no sé”, dijo en el momento.Echazú, ensangrentado. “No fue nada, no sé”, dijo en el momento.Echazú, ensangrentado. “No fue nada, no sé”, dijo en el momento.Echazú, ensangrentado. “No fue nada, no sé”, dijo en el momento.Echazú, ensangrentado. “No fue nada, no sé”, dijo en el momento.
Echazú, ensangrentado. “No fue nada, no sé”, dijo en el momento. 

Desde Esquel

El testimonio de Matías Santana sigue siendo clave para comprender la cacería iniciada por la Gendarmería el primero de agosto, que terminó con la muerte (y desaparición forzada por 80 días) de Santiago Maldonado. Es central en tanto logró ubicar en un croquis elaborado durante su declaración, realizada el 5 de septiembre, el lugar exacto donde fue visto con vida por última vez Santiago. También la ubicación de los gendarmes, la descripción que hicieron otros peñis de cómo Santiago ingresó al río y regresó, y al hacerlo se encontró con los uniformados que disparaban sus balas antitumulto hacia el Río Chubut. La cacería sobre la orilla incluyó los disparos realizados por Darío Zoilán, tal como reconoció el escopetero en su testimonial (sin decir que eran hacia Maldonado), como así también las piedras que lanzaban los gendarmes, como fue el caso de Neri Robledo. Santana también narró el momento exacto en que la Gendarmería rompió el candado de la tranquera de la comunidad mapuche con una tenaza. Este cronista describió en estas mismas páginas un video encontrado en e


Respuesta  Mensaje 15 de 19 en el tema 
De: Ruben1919 Enviado: 22/10/2017 07:49
22 de octubre de 2017
El mapa dibujado por Matías Santana gana importancia tras la autopsia
Un testimonio que sigue siendo clave
El miembro de la comunidad Lof declaró el 5 de septiembre y dibujó un mapa con el lugar donde vieron por última vez a Maldonado, y la ubicación de los gendarmes que lo estaban persiguiendo a los tiros.
Por Sebastián Premici
Echazú, ensangrentado. “No fue nada, no sé”, dijo en el momento.Echazú, ensangrentado. “No fue nada, no sé”, dijo en el momento.Echazú, ensangrentado. “No fue nada, no sé”, dijo en el momento.Echazú, ensangrentado. “No fue nada, no sé”, dijo en el momento.Echazú, ensangrentado. “No fue nada, no sé”, dijo en el momento.
Echazú, ensangrentado. “No fue nada, no sé”, dijo en el momento. 

Desde Esquel

El testimonio de Matías Santana sigue siendo clave para comprender la cacería iniciada por la Gendarmería el primero de agosto, que terminó con la muerte (y desaparición forzada por 80 días) de Santiago Maldonado. Es central en tanto logró ubicar en un croquis elaborado durante su declaración, realizada el 5 de septiembre, el lugar exacto donde fue visto con vida por última vez Santiago. También la ubicación de los gendarmes, la descripción que hicieron otros peñis de cómo Santiago ingresó al río y regresó, y al hacerlo se encontró con los uniformados que disparaban sus balas antitumulto hacia el Río Chubut. La cacería sobre la orilla incluyó los disparos realizados por Darío Zoilán, tal como reconoció el escopetero en su testimonial (sin decir que eran hacia Maldonado), como así también las piedras que lanzaban los gendarmes, como fue el caso de Neri Robledo. Santana también narró el momento exacto en que la Gendarmería rompió el candado de la tranquera de la comunidad mapuche con una tenaza. Este cronista describió en estas mismas páginas un video encontrado en el teléfono de Zoilán donde puede verse a un uniformado con la tenaza en cuestión. 

“La Gendarmería baja de abajo (desde el cruce de El Maitén), en fila, ocupando la ruta y los costados. Los del costado venían tirando. Donde hay un cartel verde, la camioneta blanca rompe la fila (Ford Ranger). Los chicos corren y se meten dentro del campo. Entramos y ahí nos estábamos yendo para la guardia pero la Gendarmería no dejaba de tirar tiros. Estaban apostados en el alambre, seguían tirando para entrar. Seguimos haciendo ejercicios de autodefensa y ahí es donde entró el Unimog (que en realidad es un Eurocargo) que atraviesa la tranquera y los tiradores con escopeta, junto a un efectivo con escudo, entran corriendo. ‘Agarren, agarren’, gritan y ahí salimos corriendo”, narró Santana al inicio de su testimonial. 

La descripción fue precisa, como pudo reconstruir PáginaI12 en ediciones anteriores. La camioneta blanca era la Ford Ranger OLW 237, conducida por Martín Ahumada, en la que luego se movieron Emmanuel Echazú y Pablo Escola. El Unimog fue en realidad un camión Eurocargo, conducido por Lucio Buch, que llegó bastante cerca del río. El escopetero y el uniformado con el escudo eran Orlando Yucra y Aníbal Cardozo. 

En ese momento eran las 11.33 de la mañana. Toda la maniobra de avanzada hacia la comunidad Lof se había iniciado cerca de las 11.21. En la secuencia se lo ve a Echazú disparando hacia la casilla de guardia. A las 11.32 se lo ve a Santiago Maldonado, de campera celeste, salir corriendo por detrás de la casilla hacia el río. 

Durante su testimonial, le pidieron a Santana describir en el pizarrón la secuencia de los hechos. Hay que aclarar que cada vez que se le pidió a los gendarmes hacer el mismo ejercicio, tanto los abogados de Gendarmería como Gonzalo Cané, secretario coordinador con los Poderes Judiciales, se opusieron a que lo hicieran. 

Matías dibujó la ruta, la guardia vieja (que es donde observó una Unimog y la camioneta con un bulto negro, la Ford Ranger OLW 237 tal cual las imágenes que publicó PaginaI12), el camino interior que llega al río, la casilla de guardia, las vías, un camino interior que va hacia la guardia vieja, una tira de pinos, el río, la curva que hace antes de ingresar a la altura de la casilla de guardia, un cerro (que es la pendiente que conduce al cauce), la bajadita del lugar donde sacan agua, y la parte de monte. 

El primero de agosto, Matías Santana bajó hacia el río, hasta una zona donde tenía un caballo, hacia la derecha de la casilla (en dirección a Esquel). Santiago Maldonado estaba más arriba. Cuando estaba subiéndose a su caballo, escuchó: “¡Quedate quieto!” Según narró el uniformado Daniel Gómez, un gendarme gritó “tenemos a uno”. 

“Cuando me encuentro con los otros peñis del otro lado del río, me preguntan si habían agarrado a uno y digo que sí. Después se conversa con los otros chicos. El (Santiago Maldonado) se alcanza a tirar al rio, yo no lo veo. ‘Quédate quieto’, escuché, y ahí apreté las cinchas y subí en seguida. Santiago se tiró al agua pero llovían las piedras, los tiros, y se volvió para atrás, para la orilla. La última vez fue visto agarrado a una rama, agachado y los gendarmes atrás de él, tirándole”, describió Santana. En el dibujo que realizó en el pizarrón, Matías explicó que Maldonado bajó por un lugar más a la izquierda del camino que él había tomado para llegar al caballo. “El sector del río donde lo agarran es donde vamos a sacar agua porque ahí hay una huellita (y hace el gesto con manos y brazos de un camino hacia arriba), y ahí vamos a buscar agua, pescar”, sostuvo. 

Su relato sobre los disparos que los gendarmes realizaron sobre el río en el momento en que Maldonado intentaba cruzarlo coincide con la propia declaración del escopetero Darío Zoilán. Este afirmó que “bajé al río y realicé disparos neutros. Habré tirado 19 o 20 cartuchos”. Zoilán reconoció además que disparó hacia la zona donde había alguien que estaba cruzando o intentando cruzar el río. El escopetero luego se cruzó con Echazú, le preguntó qué le había pasado en la cara, y éste le respondió “no nada, nada, no sé”.

@spremici


Respuesta  Mensaje 16 de 19 en el tema 
De: Ruben1919 Enviado: 12/11/2017 13:26
Página/12 accedió a los testimonios de los buzos que encontraron a Santiago Maldonado
Nuevas revelaciones sobre el hallazgo
No había ningún pozo aunque la profundidad del río en ese punto impedía hacer pie a los prefectos. El cuerpo no estaba sumergido ni cubierto de vegetación, sino flotando y apoyado sobre una rama. Pese a su relevancia, el operativo no fue filmado.
Más de 20 buzos y policías participaron del operativo en el que se halló el cuerpo, al mediodía del 17 de octubre.
Más de 20 buzos y policías participaron del operativo en el que se halló el cuerpo, al mediodía del 17 de octubre.
Imagen: Gustavo Zaninelli

El sector del río Chubut donde fue encontrado el cuerpo sin vida de Santiago Maldonado tenía mayor profundidad que la media de ese curso de agua, y si bien los buzos que lo hallaron no hacían pie, esto no implica que hubiera allí pozo alguno. De hecho, doce personas, del total de 22 buzos y policías que participaron del procedimiento, coincidieron en que el cuerpo no estaba sumergido sino flotando, apoyado o “atajado” por la rama de un sauce. De la docena de declaraciones testimoniales a las que accedió PáginaI12 surge que el momento del hallazgo del cuerpo, a las 12.25 del 17 de octubre, por parte del correntino Rodolfo Altamirano no fue filmado, y sólo estaban presentes los buzos de la Prefectura Naval. A la espera de los resultados finales de la autopsia que estarían a fin de mes, y ante el indicio preliminar de que Maldonado habría muerto por ahogamiento, la versión oficial difundida por algunos medios se apresuró a concluir que esto sucedió en un hoyo de dos metros y medio. Es decir, no lo habrían visto antes porque estaba en ese pozo, pero en ninguna de las fojas que contienen la reconstrucción de los hechos se menciona la palabra “pozo”.

“Veo un bulto en el margen derecho, al llegar toqué la parte que flotaba, era la espalda. El cuerpo estaba apoyado sobre una rama, no agarrado, recostado sobre ella en la parte lateral del torso, del lado izquierdo y boca abajo”, dijo Altamirano en su declaración del 31 de octubre. “El cuerpo estaba como apoyado en un sauce, que hacía una especie de tope para que el cuerpo no navegue”, dijo el buzo rescatista Marcos Montaña. Los relatos de los mapuches, la familia y la abogada Verónica Heredia dicen lo mismo: el cuerpo apareció flotando, no estaba sumergido ni fue desenganchado del fondo, como sugería la nota publicada por un matutino el 2 de noviembre. “Fue detallado (por los buzos a los que no identifica) que el cuerpo estaba en un pozo superior a los 2,4 metros, cubierto de vegetación, entre ramas de sauces y raíces en un espacio donde apenas penetra la luz solar”, publicó ese día el diario Clarín.

Algunos de los seis integrantes de la Prefectura interrogados por el juez Lleral, la fiscal federal Silvina Ávila, el abogado de la APDH y la letrada de la familia afirmaron que en el lugar no hacían pie, y deducían que habría más de un metro con setenta, en base a su propia estatura. Sin embargo, el oficial Juan Carlos Mussin declaró que “en el lugar la profundidad aproximada que me fue indicada por los buzos se trataba de 1,40 metros, los buzos hacían pie en un sector donde hay casi nula corriente de agua y abundan las ramas”. El buzo, a quien el jefe del operativo atribuye el hallazgo cuando en realidad fue Altamirano, agregó que “en esa zona no hay remolinos, a diferencia de otras ubicadas río abajo”.

Del cotejo de los testimonios surgen contradicciones respecto del inicio del procedimiento, Mussin dice que fue a las 11 mientras Ruata habla del mediodía, y también hay diferencias a la hora de calcular la profundidad, lo cual lleva a una lógica sin salida. Los mapuches que viven allí afirmaron (como dijo a PáginaI12 Soraya Maicoño el 1 de agosto cuando Santiago desapareció) en ese sitio no había agua, era orilla. Ahora bien, los testimonios de los buzos y los policías nada dicen sobre la caída de Matías Santana al agua, cuando iba en una de las balsas y justo minutos antes del hallazgo, pero lamentan haber sido agredidos por la comunidad cuando se retiraban, alrededor de las 21. La rabia de los mapuches se sintetizaba en esta frase: “Lo plantaron ante nuestras narices para mostrar la impunidad de que pueden hacer lo que quieran”.

Las versiones que publicó el matutino mencionado describían a 15 personas en las balsas, cuando en realidad en un gomón no entran más que la mitad, muy apretados. Del mismo modo describen el sitio como “sin luz solar” cuando todos los buzos indicaron que en todos los operativos podían divisar el fondo desde la superficie, haciendo snorkel.

Plantado el sauce

Ante la pregunta específica sobre si luego de encontrar el cadáver siguieron rastrillando en busca de elementos personales, todos respondieron que no. Este diario había publicado que el juez federal Gustavo Lleral fue interpelado enfáticamente durante las horas sucesivas por los familiares de Maldonado, su abogada y los miembros de la comunidad mapuche Lof en Resistencia de Cushamen ante la sospecha de que el cuerpo haya sido plantado, porque habían estado en ese mismo lugar pocos días antes y no habían visto nada. Tal como ratifican los testimonios, el magistrado se limitó a esperar la llegada del perito de parte, Alejandro Incháurregui, y no avanzó tampoco en el allanamiento a la estancia Leleque, como había previsto en la resolución que firmó cuatro días antes para ordenar el operativo.

En la resolución el juez había argumentado que la necesidad de volver a rastrillar el río tenía que ver con utilizar elementos de búsqueda más sofisticados, tales como los canes que detectan restos cadavéricos en el agua. Sin embargo, los buzos indicaron que usaron la misma metodología que en los siete rastrillajes anteriores. El jefe de la Prefectura de Bariloche, Ruata, había tenido la iniciativa de sugerirle al magistrado que había que revisar de nuevo, por la cantidad de ramas y zonas irregulares. Y finalmente apareció flotando y lo encontró un buzo, no un perro.

Fueron veintidos personas en aquel rastrillaje, que tuvo a los Maldonado y a la comunidad custodiando el cuerpo horas porque el juez pretendía sacarlo del agua sin esperar la llegada del perito Incháurregui. Tres timoneles fueron en dos balsas, en una de ellas iba Sergio Maldonado, y diez buzos en el agua cubriendo el ancho del río.

El 3 de octubre cuando Ruata acudió al juez para sugerir un nuevo operativo dijo que “la séptima búsqueda, el 18 de septiembre, había sido en el mismo lugar que la primera, del día 5 de agosto y que cubrieron mil metros aguas arriba respecto del punto dato (lugar donde Santiago intentó cruzar y fue visto por última vez), hasta el puesto El Quemado”. También describió que en todos los rastrillajes hicieron natación de superficie observando, salvo algunos buceos en zonas de 2 metros de profundidad, pero que los “pozones” se forman en las curvas del río donde hay remolinos o remansos”. Aquella vez aconsejó “repasar desde el punto dato hasta el puente que une las localidades de Gualjaina y Cushamen”. Esto es hacia Vuelta del Río, es decir, Ruata recomendaba repasar río arriba, y justamente contra la corriente fue hallado el cuerpo, respecto del denominado “punto dato”.

Las declaraciones también coincidieron en destacar su malestar por haber sido requisados por la comunidad, para que no entraran con armas al territorio recuperado por los mapuches. Ruata volvió a ser interrogado el 31 de octubre, y ante una pregunta de la querella dijo que el informe del 17 lo entregó a la dirección de Operaciones de la Prefectura, y que tiene entendido que “lo eleva al Ministerio de Seguridad”. Preguntado por la fiscal si pudo rastrillar el fondo del río donde se encontró el cuerpo, Ruata respondió: “Se obvió la parte de la batimetría (medir la profundidad y el fondo) porque se ordenó preservar el lugar por el hallazgo”. El jefe de los buzos de Bariloche dijo que en los siete operativos previos no habían pasado por el lugar donde finalmente encontraron a Santiago. Otros, como Montaña, dijeron que “no recordaban”. Y Gómez declaró que él no pasó pero “los otros buzos sí pasaron por ese punto”.


Respuesta  Mensaje 17 de 19 en el tema 
De: Ruben1919 Enviado: 26/11/2017 01:06

Santiago Maldonado: una respuesta y nuevos interrogantes

La autopsia concluyó que Santiago Maldonado murió por asfixia por sumersión y un cuadro coadyuvante de hipotermia. El juzgado hará una inspección del lugar donde fue encontrado el cuerpo y tomará nuevas testimoniales.



Respuesta  Mensaje 18 de 19 en el tema 
De: Ruben1919 Enviado: 26/11/2017 01:06
“Tengo más dudas que antes. Santiago no murió porque estaba de turista, era una represión ilegal de Gendarmería”

“Tengo más dudas que antes. Santiago no murió porque estaba de turista, era una represión ilegal de Gendarmería”, dijo Sergio Maldonado después de conocer el informe. En el texto que difundió junto a su familia recuerda cuáles son las pocas certezas con las que cuentan: “que el 1 de agosto hubo una salvaje represión por parte de una fuerza de seguridad estatal conducía y apoyada por autoridades políticas; que se produjeron desvíos y entorpecimientos en la causa de parte de la justicia federal de Chubut y el Poder Ejecutivo Nacional; que es necesario contar con el apoyo de investigadores especializados e independientes para lograr conocer la verdad, obtener justicia y evitar la impunidad en el caso de la muerte de Santiago”.

La etapa de los estudios forenses era sustancial para que continúe la investigación, pero no alcanza para sacar conclusiones, según se desprende tanto de las expresiones del juez Lleral, como de los Maldonado. El juzgado hará en los próximos días una inspección del lugar donde fue encontrado el cuerpo y tomará nuevas declaraciones testimoniales: a integrantes de la comunidad y a cuatro mujeres gendarmes que estuvieron el día del operativo. También se envió un exhorto a Chile para que declare Nicasio Luna, quien relató en televisión que estuvo con Santiago en medio de la represión.

Velas rodean un retrato del activista desaparecido en Argentina, Santiago Maldonado. REUTERS/Marcos Brindicci

La junta médica se reunió ayer a las 9.30 y hasta cerca del mediodía leyeron el informe de 104 páginas que fue finalmente firmado por los 28 peritos que estaban presentes en relación a cada uno de los puntos de pericia que había ordenado el juez. Las conclusiones son resultado de la autopsia que se hizo después del hallazgo del cuerpo, a la que se sumaron estudios complementarios. Expertos de la Facultad de Ciencias Exactas de la UBA analizaron las llamadas diatomeas, que son microalgas que aparecen en cavidades del organismo y que se cotejan con las que hay en el agua donde fue hallado el cuerpo; un equipo de la Universidad Nacional de Quilmes hizo lo que se llama “entomología”, que analiza la presencia de insectos y microorganismos; la Facultad de Farmacia y Bioquímica de la UBA hizo el estudio de ADN; y en el Museo de Ciencias Naturales de La Plata se analizaron restos de hongos, vegetación y tierra impregnados, por ejemplo, a la ropa.

Las conclusiones, según pudo saber PáginaI12 por funcionarios de la investigación, tienen tres puntos fundamentales:

-La causa de la muerte fue “asfixia por sumersión” a la que coadyuvó un cuadro de hipotermia por las bajas temperaturas del agua. Desde la desaparición de Maldonado el agua del Río Chubut no superó los 3,9 grados y llegó a un mínimo de 2. El ahogamiento fue constatado a través de diferentes estudios. Uno es el hallazgo de diatomeas en la cavidad cardíaca, que coinciden con las que hay en el río Chubut. Allí se encontraron nueve variedades distintas de esas algas (seis en el ventrículo izquierdo y tres en el derecho), lo que se considera indicador de la asfixia por sumersión. Los cambios y lesiones observados en los pulmones también son indicadores del ingreso de agua por las vías respiratorias. Los cambios observados en la piel revelan la hipotermia. El Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), que interviene como querellante, informó: “La autopsia reveló que la muerte fue un proceso que se fue dando por la permanencia en el agua helada que llevó a que se le vayan adormeciendo los miembros y reduciendo la capacidad de moverse, que luego derivó en un desvanecimiento que terminó en la sumersión”.

-El cuerpo no tenía lesiones externas, ni ninguna señal de que haya sido arrastrado o golpeado. Este fue uno de los primeros datos que se conocieron el día de la autopsia. No hay señales de violencia ejercida por terceros. “No puede suponerse a priori que haya sufrido violencia física en otro lugar”, dice el CELS. Todo el material genético analizado, hallado incluso en su vestimenta y en el bastón plegable que llevaba pertenecía a Santiago.

-Cuando un cadáver es hallado en el agua no se puede establecer lo que se conoce en medicina forense como “data de muerte”, sino que se calcula la “data de sumersión”. En este caso se usaron tres tablas de referencia para hacer el cálculo. Una de ellas, la que estableció que el cuerpo estuvo al menos 53 días en el agua, es la más antigua (de 1977) y de uso tradicional; la segunda, que establece un piso de 60 días en el agua, es de 2007 y adecuó los cálculos al calentamiento global; la tercera, de origen inglés, es de 2010, e incluye una metodología con ecuaciones y logaritmos que toman en cuenta los días transcurridos y la temperatura de las aguas. Esta última, que es considerada la más precisa por los peritos, es la que arroja que el cuerpo llevaba al menos 73 días en el agua, que es el número que coincide con la fecha de la desaparición de Santiago el 1 de agosto. Los especialistas decidieron usar tres métodos para que no haya objeciones. En función de este análisis, los expertos coincidieron en que el cuerpo siempre estuvo en el agua. Lo que la “entomología” mostró, por los microorganismos hallados, es que al momento del hallazgo llevaba unas 48 horas flotando, pero antes había permanecido hundido. Recién salió a la superficie cuando comenzó el proceso de descomposición.

El hermano del desaparecido Santiago Maldonado lleva su imagen tatuada en su brazo. REUTERS/Marcos Brindicci

Los peritos vieron una filmación del momento del hallazgo del cuerpo en el rastrillaje de la Prefectura. En términos científicos, una autopsia comienza en el lugar donde se encuentra el cadáver. Lo que observaron en esas imágenes -que además permitieron cotejar el estado del cadáver– es que Santiago fue encontrado en un lugar que está lleno de ramas de sauces enmarañadas y que es una zona donde los buzos no hacían pie. Estimaron una profundidad de 1,70 metros. Maldonado, no sabía nadar y tenía temor al agua. Además, llevaba puestas tres capas de ropa y borceguíes. No está claro si la muerte se produjo en ese lugar, pero los exámenes concluyen que se ahogó en ese río.

El resultado de la autopsia y los estudios adicionales no ponen en cuestión que Santiago desapareció en medio de un operativo represivo ilegal, entre disparos

Como reveló ya PáginaI12, ese sitio donde fue encontrado, según un análisis de fotografías y un mapa satelital es muy cercano al punto donde llegó un grupo de gendarmes en la persecución a los mapuches y quienes como Santiago los apoyaban. El subalférez Emmanuel Echazú fue fotografiado allí con el rostro ensangrentado y una enfermera declaró que lo atendió dentro de la comunidad. La Gendarmería había ingresado al territorio con el argumento de que afuera, en la ruta 40, les mapuches les tiraron piedras. Decían que era el delito en flagrancia que les permitía actuar. Pero la imagen de Echazú muestra que los mapuches se defendieron adentro del predio, donde los gendarmes no tenían orden judicial para ingresar.

El resultado de la autopsia y los estudios adicionales no ponen en cuestión que Santiago desapareció en medio de un operativo represivo ilegal, entre disparos. Es algo claro, a juzgar por testimonios ya recogidos en la causa, otros presentados en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y hasta por grabaciones en los celulares de los gendarmes donde reconocen “les dimos corchazos para que tengan”. La familia Maldonado sigue sosteniendo que hubo una desaparición forzada, señaló Sergio. La carátula de la causa, de hecho, por el momento no cambiará.

Todavía resta mucho por saber, incluso sobre cómo Santiago llegó hasta el río. Los resultados forenses no despejan si lo empujaron, si entró al río escapando, si lo asustaron, si lo amenazaron, si lo cercaron, o incluso si algún gendarme lo vio ahogarse y no hizo nada ni avisó (lo que también es un delito). Que las conclusiones de la junta de peritos diga que “el Brujo”, como le decían a Santiago, murió ahogado, no quita la posible responsabilidad estatal, en el hecho y en la cadena de obstáculos promovida desde el gobierno para dificultar llegar a la verdad.


Respuesta  Mensaje 19 de 19 en el tema 
De: Ruben1919 Enviado: 27/07/2018 11:40
Una nueva pericia afirma que la autopsia de Santiago Maldonado contiene graves errores
El informe que pone en duda el relato oficial
El perito Enrique Prueger dijo que el estudio que realizó, sin la aprobación de la familia, contradice el dictamen de la autopsia y concluyó que Santiago “fue plantado” y que no pudo haber estado sumergido 53 días.
El 1º de agosto se cumple el primer aniversario de la muerte de Santiago Maldonado.
El 1º de agosto se cumple el primer aniversario de la muerte de Santiago Maldonado. 

Cuando apareció el cuerpo de Santiago Maldonado, su hermano Sergio dijo que el resultado de la autopsia, que determinó que murió por ahogamiento e hipotermia, no cerraba el caso sino que abría más preguntas que respuestas. La Justicia en primera y segunda instancia rechazó los pedidos de la abogada de la familia, Verónica Heredia, para que se iniciara una investigación con expertos independientes de todos los poderes del Estado, y así este reclamo llegó a la Corte Suprema. Dentro de los argumentos planteados por la letrada estaba la necesidad de ampliar algunos puntos de la pericia general del hallazgo del cuerpo, porque la autopsia no determinó el modo en que murió el tatuador anarquista, cuándo sucedió, ni en qué circunstancias. Aquel dictamen, firmado por unanimidad por todos los peritos de las partes, había establecido que el cuerpo estuvo en el río Chubut entre 53 y 73 días, y que no había señales de que hubiera sido movido. Sin embargo, un estudio elaborado por el perito criminalístico Enrique Prueger pone en cuestión tales conclusiones y vuelve a abrir la puerta a la hipótesis de que haya sido plantado.

“Los propios estudios verificatorios de la autopsia del cuerpo de Santiago Maldonado dan por tierra los resultados del dictamen final”, expresó Prueger a PáginaI12. “El informe de la bióloga es ignorado, describe que hay polen en los pantalones, y que dicho polen desaparece en indumentos con más de 30 días en el agua”, agregó. Por su lado, Heredia dijo que el informe de Prueger no fue pedido por la familia pero enfatizó que “los resultados que difundió un portal regional están en línea con las preguntas que formulamos al juez en el expediente sobre la autopsia, porque no entendíamos por qué llegaban a esas conclusiones”. Gustavo Lleral rechazó responderles y por eso denunció ante el Máximo Tribunal que el magistrado le impide plantearlos a los peritos que hicieron la autopsia. 

El instituto que Prueger dirige en Neuquén, que también interviene en el caso Rafael Nahuel, emitió el informe luego de hacer un experimento con un trozo de carne, y detectar “dos errores” en el informe de la autopsia que firmaron 28 profesionales el 24 de noviembre. El perito afirmó que Maldonado no estuvo 78 días sumergido donde lo encontraron, que fue “plantado por alguien desde unas horas antes a unos diez días previos a su aparición”, y abrió dos posibilidades, que calificó de terrible y siniestra: “Santiago murió ahogado y su cuerpo fue escondido en algún lugar antes de ser arrojado al río para que se lo descubriera, o fue apresado, escondido –si había sido golpeado tal vez para esperar que sus golpes desaparecieran– y luego ahogado y colocado en ese lugar”.

La abogada Heredia indicó que “es un trabajo por su cuenta, pero las conclusiones que trascendieron están en sintonía con nuestras dudas sobre la autopsia: las condiciones y el lugar que se encuentra el cuerpo de Santiago, una parte del río que en esa época tenía treinta centímetros de agua, pasaron por allí tantas veces en los rastrillajes, por qué los mismos buzos que pasaron siete veces por ahí el 17 de octubre se topan con el cuerpo y no dan ninguna explicación sobre por qué no lo encontraron antes, y cómo llegamos al 1 de agosto con toda la violencia desplegada por la Gendarmería”.

Leticia Povilauskas, licenciada en Geología y Palinología, analizó las prendas de Maldonado y su relación con el entorno vegetal del río Chubut. Según consta en el informe de la autopsia, se hallaron granos de polen pertenecientes a Cupresaseae, coníferas de zonas boscosas de la Patagonia. Povilauskas concluyó como “muy importante” que “bajo ningún punto de vista los granos de polen encontrados pueden permanecer adheridos a las prendas citadas, sumergidas en el lugar del hecho por un período de tiempo prolongado, teniendo en cuenta la mínima velocidad que pueda tener la corriente de flujo en el del río, la energía presente en el medio acuático y la cantidad de oxígeno removido en el lecho. Estas condiciones hacen que el polen se desprenda fácilmente de las ropas”.

El otro ítem cuestionado se refiere a las tablas que se utilizan, según el criterio de Prueger, para relacionar la temperatura del agua con la permanencia del cuerpo en el medio acuoso y el fenómeno cadavérico que se produce. “No se tomó la temperatura promedio del agua en el período entre que desaparece y aparece Maldonado; los peritos utilizaron los valores más bajos (3.2° y 3.9°) debiendo haber utilizado el valor promedio, que es de 6,27°, de acuerdo con los registros oficiales. Esto modifica la interpretación de las tablas utilizadas (REH y Madea), que hubiera arrojado un cadáver con cabellos y epidermis desprendidos, uñas sueltas, piel macerada e hinchazón, entre los días 10 a 16”, describió.

Por último, señaló que introdujeron “un kilogramo de carne en el agua para verificar la degradación semana a semana, con peso y fotografías, por el accionar de la fauna ictícola y carroñera que, según la autopsia, hay en ese lugar. En 40 días, se redujo casi a la mitad producto de peces depredadores y alimañas”. Si bien el cuerpo de Santiago presentaba signos de haber sido mordido, son insignificantes comparados con la pérdida de masa que presentan las fotos del experimento. “En las ciencias fácticas no existen estudios complementarios sino verificatorios, y esos estudios en este caso echan por tierra las conclusiones del dictamen”, dijo tajante.

Para la familia la autopsia no estuvo mal hecha, sino que tiene “agujeros negros” e incógnitas. En el mismo sentido impugnaron el peritaje del DNI de Santiago porque “no se están haciendo en las mismas condiciones en que se encontró el cuerpo”. PáginaI12 consultó a uno de los expertos que firmó la autopsia, que evaluó que Prueger manejó información incorrecta, por ejemplo sobre la temperatura del agua “que se tomó día a día”, y que usó parámetros que no son los que tuvo Maldonado. La fuente científica reiteró que “no hay argumentos forenses que indiquen que el cadáver estuvo en otro lugar”, pero agregó que “tampoco dice que no haya estado”. Esa ambigüedad es la que busca disipar el pedido de la familia. Asimismo, este perito ponderó la seriedad de los estudios biológicos sobre el polen. Y coincidió con la importancia de que la autopsia no clausure el caso, pero puso en manos de una “dilucidación criminalística” el resultado final.



Primer  Anterior  5 a 19 de 19  Siguiente   Último  
Tema anterior  Tema siguiente
 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados