La gloria de Dios.

8:1 ¡Oh Jehová, Señor nuestro, 

Cuán  glorioso es tu nombre

en toda la tierra! Has puesto tu gloria

 sobre los cielos;

La primera misión de la Apolo 8 en 1964,

 logró acercarse a la Luna, su comandante 

era Frank Borman, el observaba desde el espacio

 nuestro planeta y al volver quiso contar 

esa experiencia de haber visto desde 

los cielos lo que los rodeaba. Desde 

allí también contemplaba la tierra. 

Que experiencia grandiosa! 

-Para hacerlo se refirió al primer versículo 

que aparece en la Biblia- “Génesis 1/1- 

“En el principio Dios creó los cielos y

la Tierra”, esto le costó un a demanda Judicial iniciada por 

una señora atea, Madalyn Murray Haiar 

quien dijo que esta cita Bíblica pronunciada por el 

violaba la separación entre la Iglesia y el estado.

 Frank Burman en su defensa aclaró mucho

 más aún lo que había dicho y dijo estas 

palabras desde lo profundo de su corazón.

“Tuve el enorme sentimiento de que había

 un poder mayor a nosotros,

que había un Dios y desde luego que también 

hubo un principio.”

Frank Burman y sus compañeros estaban extasiados 

contemplando en los cielos el Poder y la Gloria de Dios.

 Vieron Su grandeza, el Poder

 y la Majestad desplegada sobre los cielos. 

Quien otro que Dios podía haber semejantes

maravillas. El vió su gloria puesta sobre su creacion.

8:1 ¡Oh Jehová, Señor nuestro,

Cuán glorioso es tu nombre en toda la tierra!

Has puesto tu gloria sobre los cielos;

8:3 Cuando veo tus cielos, obra de tus dedos,

La luna y las estrellas que tú formaste,

8:4 Digo: ¿Qué es el hombre, para que

 tengas de él memoria,

Y el hijo del hombre, para que lo visites?

Esta fué la experiencia que Burman vivía, 

está viendo en parte “La gloria de Dios! 

Ese era el sentimiento que tenía, comprendió que

 había alguien que creo todo eso,y se sintió

 pequeño ante tanta Majestad. Después de varios 

proyectos el hombre llegó a la luna, un año 

después del nacimiento de mi hija Patricia.

Con la Apolo 11- Entre sus tripulantes se

 encontraba Buzz Aldrin, otro de los tripulantes, 

quien era miembro de la Iglesia de Houston. 

A este hombre su Pastor le había dicho 

que llevara una pequeña bolsa plástica con pan 

y otra con vino y una copa, para que 

celebren una Santa Cena en la Luna. La hicieron leyendo

 Juan 15-5, e

n una tarjetita que tenían, que decía:

Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; 

el que permanece en mí, y yo en él, 

éste lleva mucho fruto; 

porque separados de mí nada podéis hacer. 

Atrévete a manifestar la gloria de Dios

Todos tus planes podrás llevarlos adelante 

permaneciendo en El bajo Su Gloria. 

Separados de El nada será posible.

ARACELI