7 Cada uno debe dar según lo que haya decidido en su corazón, no de mala gana, ni por obligación, porque Dios ama al que da con alegría.

En lo personal estoy de acuerdo con dar el diezmo. Porque lo hago en gratitud a Dios, dándolo con alegría, con gozo en mi corazón. Contribuyendo al sostén y a la extensión de la obra juntamente con la ofrenda. 

Mi responsabilidad es colaborar para la extensión de la obra. Quienes lo administran son los que darán cuenta ante Dios, no yo. Eso no me corresponde juzgarlo a mi.

La mayoría de los miembros diezmamos. Nunca se exige el diezmo. La Iglesia crece al punto que las clases de la escuela dominical se multiplican. Este año se agregaron salones que están llenos. El plantel de maestros tuvo que multiplicarse. Cada reunión la Iglesia esta colmada, al punto que en este año se van a edificar salones arriba, porque la capacidad se colma cada reunión. 

 El Pastor tiene su trabajo y vive de eso. Su esposa tambien trabaja, y aunque así no fuera igual seguiría poniendo el diezmo. 

Romanos 14:12 nos dice: Cada uno dará a Dios cuenta de si. 

Si usted no quiere diezmar no lo haga, pero no quite a otros la bendición de hacerlo. Recuerde que Dios bendice al dador alegre, no impida a otros ser bendecido. 

Santiago 1:5

Si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada.

Araceli