Página principal  |  Contato  

Correio eletrónico:

Palavra-passe:

Registrar-se agora!

Esqueceu-se da palavra-passe?

*:·.★*Gaviotas volando en Amor y Libertad*★*:·.
 
Novidades
  Entre agora
  Painel de mensagens 
  Galeria de imagens 
 Arquivos e documentos 
 Inquéritos e Testes 
  Lista de participantes
 ....... 
 Un cordial saludo de bienvenida a todos nuestros amigos. 
 GRACIAS POR TU VISITA 
 ✿•*¨`*•✿•*¨`*•✿•*¨`*•✿•*¨`​*•✿•*¨`*•✿ 
 ♥ ஜMensajes 
 ♥ ஜBuzones NAVIDAD 2012 
  
 ི♥ྀ´¯`♥•.¸¸.ི♥ྀ´¯`•♥•´¯` ི♥ྀ.¸¸.•♥ 
 *♥ ஜReglas Conducta 
 ♥ ஜARTE DE GAVIOTA FONDOS 
 ♥ ஜBienvenidos 
 ✿•*¨`*•✿•*¨`*•✿•*¨`*•✿•*¨`​*•✿•*¨`*•✿ 
 ♥ ஜ MIRELA JUSTICIERA 
 ♥ ஜ Reconocimientos 
 ♥ ஜCumples 
 ✿•*¨`*•✿•*¨`*•✿•*¨`*•✿•*¨`​*•✿•*¨`*•✿ 
 ♥ ஜReflexiones 
 ♥ ஜ*Poesia 
 ♥ ஜCapilla Virtual 
 ♥ ஜReligion 
 ✿•*¨`*•✿•*¨`*•✿•*¨`*•✿•*¨`​*•✿•*¨`*•✿ 
 ♥ ஜSuperacion 
 ♥ ஜNene Interior 
 ♥ ஜCoelho y Hays 
 ♥ ஜ Pps Alex&Odris 
 ♥ ஜ*Mugrosos 
 ♥ ஜ۩۞۩ஜComus hermanas 
 ✿•*¨`*•✿•*¨`*•✿•*¨`*•✿•*¨`​*•✿•*¨`*•✿ 
 ♥ ஜMetafisica 
 ♥ ஜKabalah 
 ♥ ஜSabiduria 
 ..... 
 ✿•*¨`*•✿•*¨`*•✿•*¨`*•✿•*¨`​*•✿•*¨`*•✿ 
 ♥ ஜMusica 
 ♥ ஜVideos 
 ♥ ஜNuestro Mundo 
 ✿•*¨`*•✿•*¨`*•✿•*¨`*•✿•*¨`​*•✿•*¨`*•✿ 
 ♥ ஜFantasia 
 ♥ ஜ Gastronomia 
 ♥ ஜBelleza Salud 
 ♥ ஜAdorna tu Nick 
 ✿•*¨`*•✿•*¨`*•✿•*¨`*•✿•*¨`​*•✿•*¨`*•✿ 
 ♥ ஜBuzones Firmas 
 ♥ ஜFirmas Gaviota Libertad 
 ♥ ஜFirmas 
 ♥ ஜ Firmas Valenciano 
 ♥ ஜFirmas Fondos I S H A 
 ✿•*¨`*•✿•*¨`*•✿•*¨`*•✿•*¨`​*•✿•*¨`*•✿ 
 ✿•*¨`*•✿•*¨`*•✿•*¨`*•✿•*¨`​*•✿•*¨`*•✿ 
 ✿•*¨`*•✿•*¨`*•✿•*¨`*•✿•*¨`​*•✿•*¨`*•✿ 
 ....... 
 ♥ ஜGAVIOTAS Presentacion 
  
 
 
  Ferramentas
 
General: *:·.★*Oracion por la Libertad de mi Amigo *★*:·.
Escolher outro painel de mensagens
Assunto anterior  Assunto seguinte
Resposta  Mensagem 1 de 1275 no assunto 
De: LUNASOL  (Mensagem original) Enviado: 15/10/2010 02:28



 
 
Oracion al santo niño de atocha
 
Amantisimo santo niño de atocha
te alabo y te glorifico con todo mi corazon
y te entrego esta oracion en recuerdo del amor puro
que entregaste a tu inmaculada madre y tu padre adoptivo
Aumenta mi amor por Jose, Maria y que juntos al tuyo
los mantenga en mi corazon para lograr
la salvacion de mi alma y
tambien me concedas lo que te pido ardientemente
AMEN
 
Por la libertad de mi amigo
 


Señor, me dicen que debo orar. Pero ¿cómo puedo orar yo que soy tan desdichado? ¿Cómo puedo hablarte en mi condición actual?

Yo estoy triste, me encuentro indigno, a veces me siento desesperado. Me creo maldito y me resisto a orar. Yo sufro profundamente, porque todos están contra mí y me juzgan un malvado porque me encuentro aquí, lejos de mis seres queridos, apartado de mis ocupaciones, sin libertad y sin honor. Y sin paz, ¿cómo es posible que yo me dirija a Ti, oh Señor?

Ahora ya te contemplo en la cruz. Tú también, Señor, has sufrido, y ¡qué sufrimiento! Yo sé que Tú eras buenos, eras sabio, eras inocente. Y ellos te injuriaron, te deshonraron, te juzgaron, te azotaron, te crucificaron, te dieron muerte. Pero ¿por qué? ¿Dónde estaba la justicia?

Y Tú fuiste capaz de perdonar a quienes te trataron con tanta injusticia y crueldad. Tú oraste por ellos. Y aún más: Tú quisiste morir así para salvar a quienes te dieron muerte, para salvarnos a nosotros, hombres pecadores. ¿También puedes salvarme a mí?

Siendo así, Señor, se puede pensar que un hombre es bueno en su corazón aun cuando una sentencia de los tribunales de los hombres caiga sobre sus espaldas. Yo también, oh Señor, en el fondo de mi alma me considero mejor de lo que otros hombres piensan; yo sé lo que es justicia, lo que es bueno, lo que es honor, lo que es virtud.

Ante Ti estos pensamientos surgen en mi mente: ¿Tú lo conoces? ¿Tú sabes que siento disgusto por mis miserias? ¿Tú sabes que estoy a punto de gritar y de llorar? ¿Tú me oyes, oh Señor? ¿Es esta mi oración?

Sí, ésta es mi oración; desde mi profunda amargura yo elevo mi voz a Ti: no la desoigas. Al menos Tú, que sufriste tanto como yo, más que yo, por mí, al menos Tú, Señor, óyeme. Yo tengo que pedirme muchas cosas.

Dame, Señor, la paz del alma, dame tranquilidad de conciencia, una nueva conciencia capaz de buenos pensamientos. Sí, Señor, a Ti te lo diré: si yo me extravié, perdóname. Todos necesitamos perdón y misericordia; yo te pido protección para mí. Y también, Señor, yo te pido por mis seres queridos, que todavía me aman. Señor, ayúdalos, consuélalos. Señor, diles que me recuerden, que me amen aún. Yo angustiosamente necesito saber que todavía alguien se acuerda de mí y me ama.

Y también de estos compañeros de desgracia y aflicción que conmigo se encuentran en esta prisión, Señor, ten misericordia. Misericordia para todos, sí y también para quienes nos hicieron sufrir; para todos los seres humanos en este desdichado mundo. Pues nosotros somos, oh Señor, tus criaturas, tus semejantes, tus hermanos. Oh Cristo, ten misericordia de nosotros.

A nuestra pobre voz unimos la dulce e inocente voz de la Virgen, de la santísima María, que es tu madre y es también para nosotros una madre de mediación y de consuelo. ¡Oh Señor. Danos tu paz! ¡Danos esperanza!

Oración rezada 
 




Primeira  Anterior  31 a 45 de 1275  Seguinte   Última 
Resposta  Mensagem 31 de 1275 no assunto 
De: ·=»ALFONSO «=· Enviado: 15/10/2010 08:28

 
 
Oracion al santo niño de atocha
 
Amantisimo santo niño de atocha
te alabo y te glorifico con todo mi corazon
y te entrego esta oracion en recuerdo del amor puro
que entregaste a tu inmaculada madre y tu padre adoptivo
Aumenta mi amor por Jose, Maria y que juntos al tuyo
los mantenga en mi corazon para lograr
la salvacion de mi alma y
tambien me concedas lo que te pido ardientemente
AMEN
 
Por la libertad de mi amigo
 

 

 

Señor, me dicen que debo orar. Pero ¿cómo puedo orar yo que soy tan desdichado? ¿Cómo puedo hablarte en mi condición actual?

Yo estoy triste, me encuentro indigno, a veces me siento desesperado. Me creo maldito y me resisto a orar. Yo sufro profundamente, porque todos están contra mí y me juzgan un malvado porque me encuentro aquí, lejos de mis seres queridos, apartado de mis ocupaciones, sin libertad y sin honor. Y sin paz, ¿cómo es posible que yo me dirija a Ti, oh Señor?

Ahora ya te contemplo en la cruz. Tú también, Señor, has sufrido, y ¡qué sufrimiento! Yo sé que Tú eras buenos, eras sabio, eras inocente. Y ellos te injuriaron, te deshonraron, te juzgaron, te azotaron, te crucificaron, te dieron muerte. Pero ¿por qué? ¿Dónde estaba la justicia?

Y Tú fuiste capaz de perdonar a quienes te trataron con tanta injusticia y crueldad. Tú oraste por ellos. Y aún más: Tú quisiste morir así para salvar a quienes te dieron muerte, para salvarnos a nosotros, hombres pecadores. ¿También puedes salvarme a mí?

Siendo así, Señor, se puede pensar que un hombre es bueno en su corazón aun cuando una sentencia de los tribunales de los hombres caiga sobre sus espaldas. Yo también, oh Señor, en el fondo de mi alma me considero mejor de lo que otros hombres piensan; yo sé lo que es justicia, lo que es bueno, lo que es honor, lo que es virtud.

Ante Ti estos pensamientos surgen en mi mente: ¿Tú lo conoces? ¿Tú sabes que siento disgusto por mis miserias? ¿Tú sabes que estoy a punto de gritar y de llorar? ¿Tú me oyes, oh Señor? ¿Es esta mi oración?

Sí, ésta es mi oración; desde mi profunda amargura yo elevo mi voz a Ti: no la desoigas. Al menos Tú, que sufriste tanto como yo, más que yo, por mí, al menos Tú, Señor, óyeme. Yo tengo que pedirme muchas cosas.

Dame, Señor, la paz del alma, dame tranquilidad de conciencia, una nueva conciencia capaz de buenos pensamientos. Sí, Señor, a Ti te lo diré: si yo me extravié, perdóname. Todos necesitamos perdón y misericordia; yo te pido protección para mí. Y también, Señor, yo te pido por mis seres queridos, que todavía me aman. Señor, ayúdalos, consuélalos. Señor, diles que me recuerden, que me amen aún. Yo angustiosamente necesito saber que todavía alguien se acuerda de mí y me ama.

Y también de estos compañeros de desgracia y aflicción que conmigo se encuentran en esta prisión, Señor, ten misericordia. Misericordia para todos, sí y también para quienes nos hicieron sufrir; para todos los seres humanos en este desdichado mundo. Pues nosotros somos, oh Señor, tus criaturas, tus semejantes, tus hermanos. Oh Cristo, ten misericordia de nosotros.

A nuestra pobre voz unimos la dulce e inocente voz de la Virgen, de la santísima María, que es tu madre y es también para nosotros una madre de mediación y de consuelo. ¡Oh Señor. Danos tu paz! ¡Danos esperanza!

 
Oración rezada 
 


Resposta  Mensagem 32 de 1275 no assunto 
De: ·=»ALFONSO «=· Enviado: 15/10/2010 08:29

 
 
Oracion al santo niño de atocha
 
Amantisimo santo niño de atocha
te alabo y te glorifico con todo mi corazon
y te entrego esta oracion en recuerdo del amor puro
que entregaste a tu inmaculada madre y tu padre adoptivo
Aumenta mi amor por Jose, Maria y que juntos al tuyo
los mantenga en mi corazon para lograr
la salvacion de mi alma y
tambien me concedas lo que te pido ardientemente
AMEN
 
Por la libertad de mi amigo
 

 

 

Señor, me dicen que debo orar. Pero ¿cómo puedo orar yo que soy tan desdichado? ¿Cómo puedo hablarte en mi condición actual?

Yo estoy triste, me encuentro indigno, a veces me siento desesperado. Me creo maldito y me resisto a orar. Yo sufro profundamente, porque todos están contra mí y me juzgan un malvado porque me encuentro aquí, lejos de mis seres queridos, apartado de mis ocupaciones, sin libertad y sin honor. Y sin paz, ¿cómo es posible que yo me dirija a Ti, oh Señor?

Ahora ya te contemplo en la cruz. Tú también, Señor, has sufrido, y ¡qué sufrimiento! Yo sé que Tú eras buenos, eras sabio, eras inocente. Y ellos te injuriaron, te deshonraron, te juzgaron, te azotaron, te crucificaron, te dieron muerte. Pero ¿por qué? ¿Dónde estaba la justicia?

Y Tú fuiste capaz de perdonar a quienes te trataron con tanta injusticia y crueldad. Tú oraste por ellos. Y aún más: Tú quisiste morir así para salvar a quienes te dieron muerte, para salvarnos a nosotros, hombres pecadores. ¿También puedes salvarme a mí?

Siendo así, Señor, se puede pensar que un hombre es bueno en su corazón aun cuando una sentencia de los tribunales de los hombres caiga sobre sus espaldas. Yo también, oh Señor, en el fondo de mi alma me considero mejor de lo que otros hombres piensan; yo sé lo que es justicia, lo que es bueno, lo que es honor, lo que es virtud.

Ante Ti estos pensamientos surgen en mi mente: ¿Tú lo conoces? ¿Tú sabes que siento disgusto por mis miserias? ¿Tú sabes que estoy a punto de gritar y de llorar? ¿Tú me oyes, oh Señor? ¿Es esta mi oración?

Sí, ésta es mi oración; desde mi profunda amargura yo elevo mi voz a Ti: no la desoigas. Al menos Tú, que sufriste tanto como yo, más que yo, por mí, al menos Tú, Señor, óyeme. Yo tengo que pedirme muchas cosas.

Dame, Señor, la paz del alma, dame tranquilidad de conciencia, una nueva conciencia capaz de buenos pensamientos. Sí, Señor, a Ti te lo diré: si yo me extravié, perdóname. Todos necesitamos perdón y misericordia; yo te pido protección para mí. Y también, Señor, yo te pido por mis seres queridos, que todavía me aman. Señor, ayúdalos, consuélalos. Señor, diles que me recuerden, que me amen aún. Yo angustiosamente necesito saber que todavía alguien se acuerda de mí y me ama.

Y también de estos compañeros de desgracia y aflicción que conmigo se encuentran en esta prisión, Señor, ten misericordia. Misericordia para todos, sí y también para quienes nos hicieron sufrir; para todos los seres humanos en este desdichado mundo. Pues nosotros somos, oh Señor, tus criaturas, tus semejantes, tus hermanos. Oh Cristo, ten misericordia de nosotros.

A nuestra pobre voz unimos la dulce e inocente voz de la Virgen, de la santísima María, que es tu madre y es también para nosotros una madre de mediación y de consuelo. ¡Oh Señor. Danos tu paz! ¡Danos esperanza!

 
Oración rezada 
 


Resposta  Mensagem 33 de 1275 no assunto 
De: ·=»ALFONSO «=· Enviado: 15/10/2010 08:30

 
 
Oracion al santo niño de atocha
 
Amantisimo santo niño de atocha
te alabo y te glorifico con todo mi corazon
y te entrego esta oracion en recuerdo del amor puro
que entregaste a tu inmaculada madre y tu padre adoptivo
Aumenta mi amor por Jose, Maria y que juntos al tuyo
los mantenga en mi corazon para lograr
la salvacion de mi alma y
tambien me concedas lo que te pido ardientemente
AMEN
 
Por la libertad de mi amigo
 

 

 

Señor, me dicen que debo orar. Pero ¿cómo puedo orar yo que soy tan desdichado? ¿Cómo puedo hablarte en mi condición actual?

Yo estoy triste, me encuentro indigno, a veces me siento desesperado. Me creo maldito y me resisto a orar. Yo sufro profundamente, porque todos están contra mí y me juzgan un malvado porque me encuentro aquí, lejos de mis seres queridos, apartado de mis ocupaciones, sin libertad y sin honor. Y sin paz, ¿cómo es posible que yo me dirija a Ti, oh Señor?

Ahora ya te contemplo en la cruz. Tú también, Señor, has sufrido, y ¡qué sufrimiento! Yo sé que Tú eras buenos, eras sabio, eras inocente. Y ellos te injuriaron, te deshonraron, te juzgaron, te azotaron, te crucificaron, te dieron muerte. Pero ¿por qué? ¿Dónde estaba la justicia?

Y Tú fuiste capaz de perdonar a quienes te trataron con tanta injusticia y crueldad. Tú oraste por ellos. Y aún más: Tú quisiste morir así para salvar a quienes te dieron muerte, para salvarnos a nosotros, hombres pecadores. ¿También puedes salvarme a mí?

Siendo así, Señor, se puede pensar que un hombre es bueno en su corazón aun cuando una sentencia de los tribunales de los hombres caiga sobre sus espaldas. Yo también, oh Señor, en el fondo de mi alma me considero mejor de lo que otros hombres piensan; yo sé lo que es justicia, lo que es bueno, lo que es honor, lo que es virtud.

Ante Ti estos pensamientos surgen en mi mente: ¿Tú lo conoces? ¿Tú sabes que siento disgusto por mis miserias? ¿Tú sabes que estoy a punto de gritar y de llorar? ¿Tú me oyes, oh Señor? ¿Es esta mi oración?

Sí, ésta es mi oración; desde mi profunda amargura yo elevo mi voz a Ti: no la desoigas. Al menos Tú, que sufriste tanto como yo, más que yo, por mí, al menos Tú, Señor, óyeme. Yo tengo que pedirme muchas cosas.

Dame, Señor, la paz del alma, dame tranquilidad de conciencia, una nueva conciencia capaz de buenos pensamientos. Sí, Señor, a Ti te lo diré: si yo me extravié, perdóname. Todos necesitamos perdón y misericordia; yo te pido protección para mí. Y también, Señor, yo te pido por mis seres queridos, que todavía me aman. Señor, ayúdalos, consuélalos. Señor, diles que me recuerden, que me amen aún. Yo angustiosamente necesito saber que todavía alguien se acuerda de mí y me ama.

Y también de estos compañeros de desgracia y aflicción que conmigo se encuentran en esta prisión, Señor, ten misericordia. Misericordia para todos, sí y también para quienes nos hicieron sufrir; para todos los seres humanos en este desdichado mundo. Pues nosotros somos, oh Señor, tus criaturas, tus semejantes, tus hermanos. Oh Cristo, ten misericordia de nosotros.

A nuestra pobre voz unimos la dulce e inocente voz de la Virgen, de la santísima María, que es tu madre y es también para nosotros una madre de mediación y de consuelo. ¡Oh Señor. Danos tu paz! ¡Danos esperanza!

 
Oración rezada 
 


Resposta  Mensagem 34 de 1275 no assunto 
De: LUNASOL Enviado: 15/10/2010 12:32

 
 
Oracion al santo niño de atocha
 
Amantisimo santo niño de atocha
te alabo y te glorifico con todo mi corazon
y te entrego esta oracion en recuerdo del amor puro
que entregaste a tu inmaculada madre y tu padre adoptivo
Aumenta mi amor por Jose, Maria y que juntos al tuyo
los mantenga en mi corazon para lograr
la salvacion de mi alma y
tambien me concedas lo que te pido ardientemente
AMEN
 
Por la libertad de mi amigo
 


Señor, me dicen que debo orar. Pero ¿cómo puedo orar yo que soy tan desdichado? ¿Cómo puedo hablarte en mi condición actual?

Yo estoy triste, me encuentro indigno, a veces me siento desesperado. Me creo maldito y me resisto a orar. Yo sufro profundamente, porque todos están contra mí y me juzgan un malvado porque me encuentro aquí, lejos de mis seres queridos, apartado de mis ocupaciones, sin libertad y sin honor. Y sin paz, ¿cómo es posible que yo me dirija a Ti, oh Señor?

Ahora ya te contemplo en la cruz. Tú también, Señor, has sufrido, y ¡qué sufrimiento! Yo sé que Tú eras buenos, eras sabio, eras inocente. Y ellos te injuriaron, te deshonraron, te juzgaron, te azotaron, te crucificaron, te dieron muerte. Pero ¿por qué? ¿Dónde estaba la justicia?

Y Tú fuiste capaz de perdonar a quienes te trataron con tanta injusticia y crueldad. Tú oraste por ellos. Y aún más: Tú quisiste morir así para salvar a quienes te dieron muerte, para salvarnos a nosotros, hombres pecadores. ¿También puedes salvarme a mí?

Siendo así, Señor, se puede pensar que un hombre es bueno en su corazón aun cuando una sentencia de los tribunales de los hombres caiga sobre sus espaldas. Yo también, oh Señor, en el fondo de mi alma me considero mejor de lo que otros hombres piensan; yo sé lo que es justicia, lo que es bueno, lo que es honor, lo que es virtud.

Ante Ti estos pensamientos surgen en mi mente: ¿Tú lo conoces? ¿Tú sabes que siento disgusto por mis miserias? ¿Tú sabes que estoy a punto de gritar y de llorar? ¿Tú me oyes, oh Señor? ¿Es esta mi oración?

Sí, ésta es mi oración; desde mi profunda amargura yo elevo mi voz a Ti: no la desoigas. Al menos Tú, que sufriste tanto como yo, más que yo, por mí, al menos Tú, Señor, óyeme. Yo tengo que pedirme muchas cosas.

Dame, Señor, la paz del alma, dame tranquilidad de conciencia, una nueva conciencia capaz de buenos pensamientos. Sí, Señor, a Ti te lo diré: si yo me extravié, perdóname. Todos necesitamos perdón y misericordia; yo te pido protección para mí. Y también, Señor, yo te pido por mis seres queridos, que todavía me aman. Señor, ayúdalos, consuélalos. Señor, diles que me recuerden, que me amen aún. Yo angustiosamente necesito saber que todavía alguien se acuerda de mí y me ama.

Y también de estos compañeros de desgracia y aflicción que conmigo se encuentran en esta prisión, Señor, ten misericordia. Misericordia para todos, sí y también para quienes nos hicieron sufrir; para todos los seres humanos en este desdichado mundo. Pues nosotros somos, oh Señor, tus criaturas, tus semejantes, tus hermanos. Oh Cristo, ten misericordia de nosotros.

A nuestra pobre voz unimos la dulce e inocente voz de la Virgen, de la santísima María, que es tu madre y es también para nosotros una madre de mediación y de consuelo. ¡Oh Señor. Danos tu paz! ¡Danos esperanza!

Oración rezada 
 



Resposta  Mensagem 35 de 1275 no assunto 
De: LUNASOL Enviado: 15/10/2010 12:32

 
 
Oracion al santo niño de atocha
 
Amantisimo santo niño de atocha
te alabo y te glorifico con todo mi corazon
y te entrego esta oracion en recuerdo del amor puro
que entregaste a tu inmaculada madre y tu padre adoptivo
Aumenta mi amor por Jose, Maria y que juntos al tuyo
los mantenga en mi corazon para lograr
la salvacion de mi alma y
tambien me concedas lo que te pido ardientemente
AMEN
 
Por la libertad de mi amigo
 


Señor, me dicen que debo orar. Pero ¿cómo puedo orar yo que soy tan desdichado? ¿Cómo puedo hablarte en mi condición actual?

Yo estoy triste, me encuentro indigno, a veces me siento desesperado. Me creo maldito y me resisto a orar. Yo sufro profundamente, porque todos están contra mí y me juzgan un malvado porque me encuentro aquí, lejos de mis seres queridos, apartado de mis ocupaciones, sin libertad y sin honor. Y sin paz, ¿cómo es posible que yo me dirija a Ti, oh Señor?

Ahora ya te contemplo en la cruz. Tú también, Señor, has sufrido, y ¡qué sufrimiento! Yo sé que Tú eras buenos, eras sabio, eras inocente. Y ellos te injuriaron, te deshonraron, te juzgaron, te azotaron, te crucificaron, te dieron muerte. Pero ¿por qué? ¿Dónde estaba la justicia?

Y Tú fuiste capaz de perdonar a quienes te trataron con tanta injusticia y crueldad. Tú oraste por ellos. Y aún más: Tú quisiste morir así para salvar a quienes te dieron muerte, para salvarnos a nosotros, hombres pecadores. ¿También puedes salvarme a mí?

Siendo así, Señor, se puede pensar que un hombre es bueno en su corazón aun cuando una sentencia de los tribunales de los hombres caiga sobre sus espaldas. Yo también, oh Señor, en el fondo de mi alma me considero mejor de lo que otros hombres piensan; yo sé lo que es justicia, lo que es bueno, lo que es honor, lo que es virtud.

Ante Ti estos pensamientos surgen en mi mente: ¿Tú lo conoces? ¿Tú sabes que siento disgusto por mis miserias? ¿Tú sabes que estoy a punto de gritar y de llorar? ¿Tú me oyes, oh Señor? ¿Es esta mi oración?

Sí, ésta es mi oración; desde mi profunda amargura yo elevo mi voz a Ti: no la desoigas. Al menos Tú, que sufriste tanto como yo, más que yo, por mí, al menos Tú, Señor, óyeme. Yo tengo que pedirme muchas cosas.

Dame, Señor, la paz del alma, dame tranquilidad de conciencia, una nueva conciencia capaz de buenos pensamientos. Sí, Señor, a Ti te lo diré: si yo me extravié, perdóname. Todos necesitamos perdón y misericordia; yo te pido protección para mí. Y también, Señor, yo te pido por mis seres queridos, que todavía me aman. Señor, ayúdalos, consuélalos. Señor, diles que me recuerden, que me amen aún. Yo angustiosamente necesito saber que todavía alguien se acuerda de mí y me ama.

Y también de estos compañeros de desgracia y aflicción que conmigo se encuentran en esta prisión, Señor, ten misericordia. Misericordia para todos, sí y también para quienes nos hicieron sufrir; para todos los seres humanos en este desdichado mundo. Pues nosotros somos, oh Señor, tus criaturas, tus semejantes, tus hermanos. Oh Cristo, ten misericordia de nosotros.

A nuestra pobre voz unimos la dulce e inocente voz de la Virgen, de la santísima María, que es tu madre y es también para nosotros una madre de mediación y de consuelo. ¡Oh Señor. Danos tu paz! ¡Danos esperanza!

Oración rezada 
 



Resposta  Mensagem 36 de 1275 no assunto 
De: LUNASOL Enviado: 15/10/2010 12:33

 
 
Oracion al santo niño de atocha
 
Amantisimo santo niño de atocha
te alabo y te glorifico con todo mi corazon
y te entrego esta oracion en recuerdo del amor puro
que entregaste a tu inmaculada madre y tu padre adoptivo
Aumenta mi amor por Jose, Maria y que juntos al tuyo
los mantenga en mi corazon para lograr
la salvacion de mi alma y
tambien me concedas lo que te pido ardientemente
AMEN
 
Por la libertad de mi amigo
 


Señor, me dicen que debo orar. Pero ¿cómo puedo orar yo que soy tan desdichado? ¿Cómo puedo hablarte en mi condición actual?

Yo estoy triste, me encuentro indigno, a veces me siento desesperado. Me creo maldito y me resisto a orar. Yo sufro profundamente, porque todos están contra mí y me juzgan un malvado porque me encuentro aquí, lejos de mis seres queridos, apartado de mis ocupaciones, sin libertad y sin honor. Y sin paz, ¿cómo es posible que yo me dirija a Ti, oh Señor?

Ahora ya te contemplo en la cruz. Tú también, Señor, has sufrido, y ¡qué sufrimiento! Yo sé que Tú eras buenos, eras sabio, eras inocente. Y ellos te injuriaron, te deshonraron, te juzgaron, te azotaron, te crucificaron, te dieron muerte. Pero ¿por qué? ¿Dónde estaba la justicia?

Y Tú fuiste capaz de perdonar a quienes te trataron con tanta injusticia y crueldad. Tú oraste por ellos. Y aún más: Tú quisiste morir así para salvar a quienes te dieron muerte, para salvarnos a nosotros, hombres pecadores. ¿También puedes salvarme a mí?

Siendo así, Señor, se puede pensar que un hombre es bueno en su corazón aun cuando una sentencia de los tribunales de los hombres caiga sobre sus espaldas. Yo también, oh Señor, en el fondo de mi alma me considero mejor de lo que otros hombres piensan; yo sé lo que es justicia, lo que es bueno, lo que es honor, lo que es virtud.

Ante Ti estos pensamientos surgen en mi mente: ¿Tú lo conoces? ¿Tú sabes que siento disgusto por mis miserias? ¿Tú sabes que estoy a punto de gritar y de llorar? ¿Tú me oyes, oh Señor? ¿Es esta mi oración?

Sí, ésta es mi oración; desde mi profunda amargura yo elevo mi voz a Ti: no la desoigas. Al menos Tú, que sufriste tanto como yo, más que yo, por mí, al menos Tú, Señor, óyeme. Yo tengo que pedirme muchas cosas.

Dame, Señor, la paz del alma, dame tranquilidad de conciencia, una nueva conciencia capaz de buenos pensamientos. Sí, Señor, a Ti te lo diré: si yo me extravié, perdóname. Todos necesitamos perdón y misericordia; yo te pido protección para mí. Y también, Señor, yo te pido por mis seres queridos, que todavía me aman. Señor, ayúdalos, consuélalos. Señor, diles que me recuerden, que me amen aún. Yo angustiosamente necesito saber que todavía alguien se acuerda de mí y me ama.

Y también de estos compañeros de desgracia y aflicción que conmigo se encuentran en esta prisión, Señor, ten misericordia. Misericordia para todos, sí y también para quienes nos hicieron sufrir; para todos los seres humanos en este desdichado mundo. Pues nosotros somos, oh Señor, tus criaturas, tus semejantes, tus hermanos. Oh Cristo, ten misericordia de nosotros.

A nuestra pobre voz unimos la dulce e inocente voz de la Virgen, de la santísima María, que es tu madre y es también para nosotros una madre de mediación y de consuelo. ¡Oh Señor. Danos tu paz! ¡Danos esperanza!

Oración rezada 
 



Resposta  Mensagem 37 de 1275 no assunto 
De: LUNASOL Enviado: 15/10/2010 12:33

 
 
Oracion al santo niño de atocha
 
Amantisimo santo niño de atocha
te alabo y te glorifico con todo mi corazon
y te entrego esta oracion en recuerdo del amor puro
que entregaste a tu inmaculada madre y tu padre adoptivo
Aumenta mi amor por Jose, Maria y que juntos al tuyo
los mantenga en mi corazon para lograr
la salvacion de mi alma y
tambien me concedas lo que te pido ardientemente
AMEN
 
Por la libertad de mi amigo
 


Señor, me dicen que debo orar. Pero ¿cómo puedo orar yo que soy tan desdichado? ¿Cómo puedo hablarte en mi condición actual?

Yo estoy triste, me encuentro indigno, a veces me siento desesperado. Me creo maldito y me resisto a orar. Yo sufro profundamente, porque todos están contra mí y me juzgan un malvado porque me encuentro aquí, lejos de mis seres queridos, apartado de mis ocupaciones, sin libertad y sin honor. Y sin paz, ¿cómo es posible que yo me dirija a Ti, oh Señor?

Ahora ya te contemplo en la cruz. Tú también, Señor, has sufrido, y ¡qué sufrimiento! Yo sé que Tú eras buenos, eras sabio, eras inocente. Y ellos te injuriaron, te deshonraron, te juzgaron, te azotaron, te crucificaron, te dieron muerte. Pero ¿por qué? ¿Dónde estaba la justicia?

Y Tú fuiste capaz de perdonar a quienes te trataron con tanta injusticia y crueldad. Tú oraste por ellos. Y aún más: Tú quisiste morir así para salvar a quienes te dieron muerte, para salvarnos a nosotros, hombres pecadores. ¿También puedes salvarme a mí?

Siendo así, Señor, se puede pensar que un hombre es bueno en su corazón aun cuando una sentencia de los tribunales de los hombres caiga sobre sus espaldas. Yo también, oh Señor, en el fondo de mi alma me considero mejor de lo que otros hombres piensan; yo sé lo que es justicia, lo que es bueno, lo que es honor, lo que es virtud.

Ante Ti estos pensamientos surgen en mi mente: ¿Tú lo conoces? ¿Tú sabes que siento disgusto por mis miserias? ¿Tú sabes que estoy a punto de gritar y de llorar? ¿Tú me oyes, oh Señor? ¿Es esta mi oración?

Sí, ésta es mi oración; desde mi profunda amargura yo elevo mi voz a Ti: no la desoigas. Al menos Tú, que sufriste tanto como yo, más que yo, por mí, al menos Tú, Señor, óyeme. Yo tengo que pedirme muchas cosas.

Dame, Señor, la paz del alma, dame tranquilidad de conciencia, una nueva conciencia capaz de buenos pensamientos. Sí, Señor, a Ti te lo diré: si yo me extravié, perdóname. Todos necesitamos perdón y misericordia; yo te pido protección para mí. Y también, Señor, yo te pido por mis seres queridos, que todavía me aman. Señor, ayúdalos, consuélalos. Señor, diles que me recuerden, que me amen aún. Yo angustiosamente necesito saber que todavía alguien se acuerda de mí y me ama.

Y también de estos compañeros de desgracia y aflicción que conmigo se encuentran en esta prisión, Señor, ten misericordia. Misericordia para todos, sí y también para quienes nos hicieron sufrir; para todos los seres humanos en este desdichado mundo. Pues nosotros somos, oh Señor, tus criaturas, tus semejantes, tus hermanos. Oh Cristo, ten misericordia de nosotros.

A nuestra pobre voz unimos la dulce e inocente voz de la Virgen, de la santísima María, que es tu madre y es también para nosotros una madre de mediación y de consuelo. ¡Oh Señor. Danos tu paz! ¡Danos esperanza!

Oración rezada 
 



Resposta  Mensagem 38 de 1275 no assunto 
De: LUNASOL Enviado: 15/10/2010 12:34

 
 
Oracion al santo niño de atocha
 
Amantisimo santo niño de atocha
te alabo y te glorifico con todo mi corazon
y te entrego esta oracion en recuerdo del amor puro
que entregaste a tu inmaculada madre y tu padre adoptivo
Aumenta mi amor por Jose, Maria y que juntos al tuyo
los mantenga en mi corazon para lograr
la salvacion de mi alma y
tambien me concedas lo que te pido ardientemente
AMEN
 
Por la libertad de mi amigo
 


Señor, me dicen que debo orar. Pero ¿cómo puedo orar yo que soy tan desdichado? ¿Cómo puedo hablarte en mi condición actual?

Yo estoy triste, me encuentro indigno, a veces me siento desesperado. Me creo maldito y me resisto a orar. Yo sufro profundamente, porque todos están contra mí y me juzgan un malvado porque me encuentro aquí, lejos de mis seres queridos, apartado de mis ocupaciones, sin libertad y sin honor. Y sin paz, ¿cómo es posible que yo me dirija a Ti, oh Señor?

Ahora ya te contemplo en la cruz. Tú también, Señor, has sufrido, y ¡qué sufrimiento! Yo sé que Tú eras buenos, eras sabio, eras inocente. Y ellos te injuriaron, te deshonraron, te juzgaron, te azotaron, te crucificaron, te dieron muerte. Pero ¿por qué? ¿Dónde estaba la justicia?

Y Tú fuiste capaz de perdonar a quienes te trataron con tanta injusticia y crueldad. Tú oraste por ellos. Y aún más: Tú quisiste morir así para salvar a quienes te dieron muerte, para salvarnos a nosotros, hombres pecadores. ¿También puedes salvarme a mí?

Siendo así, Señor, se puede pensar que un hombre es bueno en su corazón aun cuando una sentencia de los tribunales de los hombres caiga sobre sus espaldas. Yo también, oh Señor, en el fondo de mi alma me considero mejor de lo que otros hombres piensan; yo sé lo que es justicia, lo que es bueno, lo que es honor, lo que es virtud.

Ante Ti estos pensamientos surgen en mi mente: ¿Tú lo conoces? ¿Tú sabes que siento disgusto por mis miserias? ¿Tú sabes que estoy a punto de gritar y de llorar? ¿Tú me oyes, oh Señor? ¿Es esta mi oración?

Sí, ésta es mi oración; desde mi profunda amargura yo elevo mi voz a Ti: no la desoigas. Al menos Tú, que sufriste tanto como yo, más que yo, por mí, al menos Tú, Señor, óyeme. Yo tengo que pedirme muchas cosas.

Dame, Señor, la paz del alma, dame tranquilidad de conciencia, una nueva conciencia capaz de buenos pensamientos. Sí, Señor, a Ti te lo diré: si yo me extravié, perdóname. Todos necesitamos perdón y misericordia; yo te pido protección para mí. Y también, Señor, yo te pido por mis seres queridos, que todavía me aman. Señor, ayúdalos, consuélalos. Señor, diles que me recuerden, que me amen aún. Yo angustiosamente necesito saber que todavía alguien se acuerda de mí y me ama.

Y también de estos compañeros de desgracia y aflicción que conmigo se encuentran en esta prisión, Señor, ten misericordia. Misericordia para todos, sí y también para quienes nos hicieron sufrir; para todos los seres humanos en este desdichado mundo. Pues nosotros somos, oh Señor, tus criaturas, tus semejantes, tus hermanos. Oh Cristo, ten misericordia de nosotros.

A nuestra pobre voz unimos la dulce e inocente voz de la Virgen, de la santísima María, que es tu madre y es también para nosotros una madre de mediación y de consuelo. ¡Oh Señor. Danos tu paz! ¡Danos esperanza!

Oración rezada 
 



Resposta  Mensagem 39 de 1275 no assunto 
De: LUNASOL Enviado: 15/10/2010 12:34

 
 
Oracion al santo niño de atocha
 
Amantisimo santo niño de atocha
te alabo y te glorifico con todo mi corazon
y te entrego esta oracion en recuerdo del amor puro
que entregaste a tu inmaculada madre y tu padre adoptivo
Aumenta mi amor por Jose, Maria y que juntos al tuyo
los mantenga en mi corazon para lograr
la salvacion de mi alma y
tambien me concedas lo que te pido ardientemente
AMEN
 
Por la libertad de mi amigo
 


Señor, me dicen que debo orar. Pero ¿cómo puedo orar yo que soy tan desdichado? ¿Cómo puedo hablarte en mi condición actual?

Yo estoy triste, me encuentro indigno, a veces me siento desesperado. Me creo maldito y me resisto a orar. Yo sufro profundamente, porque todos están contra mí y me juzgan un malvado porque me encuentro aquí, lejos de mis seres queridos, apartado de mis ocupaciones, sin libertad y sin honor. Y sin paz, ¿cómo es posible que yo me dirija a Ti, oh Señor?

Ahora ya te contemplo en la cruz. Tú también, Señor, has sufrido, y ¡qué sufrimiento! Yo sé que Tú eras buenos, eras sabio, eras inocente. Y ellos te injuriaron, te deshonraron, te juzgaron, te azotaron, te crucificaron, te dieron muerte. Pero ¿por qué? ¿Dónde estaba la justicia?

Y Tú fuiste capaz de perdonar a quienes te trataron con tanta injusticia y crueldad. Tú oraste por ellos. Y aún más: Tú quisiste morir así para salvar a quienes te dieron muerte, para salvarnos a nosotros, hombres pecadores. ¿También puedes salvarme a mí?

Siendo así, Señor, se puede pensar que un hombre es bueno en su corazón aun cuando una sentencia de los tribunales de los hombres caiga sobre sus espaldas. Yo también, oh Señor, en el fondo de mi alma me considero mejor de lo que otros hombres piensan; yo sé lo que es justicia, lo que es bueno, lo que es honor, lo que es virtud.

Ante Ti estos pensamientos surgen en mi mente: ¿Tú lo conoces? ¿Tú sabes que siento disgusto por mis miserias? ¿Tú sabes que estoy a punto de gritar y de llorar? ¿Tú me oyes, oh Señor? ¿Es esta mi oración?

Sí, ésta es mi oración; desde mi profunda amargura yo elevo mi voz a Ti: no la desoigas. Al menos Tú, que sufriste tanto como yo, más que yo, por mí, al menos Tú, Señor, óyeme. Yo tengo que pedirme muchas cosas.

Dame, Señor, la paz del alma, dame tranquilidad de conciencia, una nueva conciencia capaz de buenos pensamientos. Sí, Señor, a Ti te lo diré: si yo me extravié, perdóname. Todos necesitamos perdón y misericordia; yo te pido protección para mí. Y también, Señor, yo te pido por mis seres queridos, que todavía me aman. Señor, ayúdalos, consuélalos. Señor, diles que me recuerden, que me amen aún. Yo angustiosamente necesito saber que todavía alguien se acuerda de mí y me ama.

Y también de estos compañeros de desgracia y aflicción que conmigo se encuentran en esta prisión, Señor, ten misericordia. Misericordia para todos, sí y también para quienes nos hicieron sufrir; para todos los seres humanos en este desdichado mundo. Pues nosotros somos, oh Señor, tus criaturas, tus semejantes, tus hermanos. Oh Cristo, ten misericordia de nosotros.

A nuestra pobre voz unimos la dulce e inocente voz de la Virgen, de la santísima María, que es tu madre y es también para nosotros una madre de mediación y de consuelo. ¡Oh Señor. Danos tu paz! ¡Danos esperanza!

Oración rezada 
 



Resposta  Mensagem 40 de 1275 no assunto 
De: LUNASOL Enviado: 15/10/2010 12:34

 
 
Oracion al santo niño de atocha
 
Amantisimo santo niño de atocha
te alabo y te glorifico con todo mi corazon
y te entrego esta oracion en recuerdo del amor puro
que entregaste a tu inmaculada madre y tu padre adoptivo
Aumenta mi amor por Jose, Maria y que juntos al tuyo
los mantenga en mi corazon para lograr
la salvacion de mi alma y
tambien me concedas lo que te pido ardientemente
AMEN
 
Por la libertad de mi amigo
 


Señor, me dicen que debo orar. Pero ¿cómo puedo orar yo que soy tan desdichado? ¿Cómo puedo hablarte en mi condición actual?

Yo estoy triste, me encuentro indigno, a veces me siento desesperado. Me creo maldito y me resisto a orar. Yo sufro profundamente, porque todos están contra mí y me juzgan un malvado porque me encuentro aquí, lejos de mis seres queridos, apartado de mis ocupaciones, sin libertad y sin honor. Y sin paz, ¿cómo es posible que yo me dirija a Ti, oh Señor?

Ahora ya te contemplo en la cruz. Tú también, Señor, has sufrido, y ¡qué sufrimiento! Yo sé que Tú eras buenos, eras sabio, eras inocente. Y ellos te injuriaron, te deshonraron, te juzgaron, te azotaron, te crucificaron, te dieron muerte. Pero ¿por qué? ¿Dónde estaba la justicia?

Y Tú fuiste capaz de perdonar a quienes te trataron con tanta injusticia y crueldad. Tú oraste por ellos. Y aún más: Tú quisiste morir así para salvar a quienes te dieron muerte, para salvarnos a nosotros, hombres pecadores. ¿También puedes salvarme a mí?

Siendo así, Señor, se puede pensar que un hombre es bueno en su corazón aun cuando una sentencia de los tribunales de los hombres caiga sobre sus espaldas. Yo también, oh Señor, en el fondo de mi alma me considero mejor de lo que otros hombres piensan; yo sé lo que es justicia, lo que es bueno, lo que es honor, lo que es virtud.

Ante Ti estos pensamientos surgen en mi mente: ¿Tú lo conoces? ¿Tú sabes que siento disgusto por mis miserias? ¿Tú sabes que estoy a punto de gritar y de llorar? ¿Tú me oyes, oh Señor? ¿Es esta mi oración?

Sí, ésta es mi oración; desde mi profunda amargura yo elevo mi voz a Ti: no la desoigas. Al menos Tú, que sufriste tanto como yo, más que yo, por mí, al menos Tú, Señor, óyeme. Yo tengo que pedirme muchas cosas.

Dame, Señor, la paz del alma, dame tranquilidad de conciencia, una nueva conciencia capaz de buenos pensamientos. Sí, Señor, a Ti te lo diré: si yo me extravié, perdóname. Todos necesitamos perdón y misericordia; yo te pido protección para mí. Y también, Señor, yo te pido por mis seres queridos, que todavía me aman. Señor, ayúdalos, consuélalos. Señor, diles que me recuerden, que me amen aún. Yo angustiosamente necesito saber que todavía alguien se acuerda de mí y me ama.

Y también de estos compañeros de desgracia y aflicción que conmigo se encuentran en esta prisión, Señor, ten misericordia. Misericordia para todos, sí y también para quienes nos hicieron sufrir; para todos los seres humanos en este desdichado mundo. Pues nosotros somos, oh Señor, tus criaturas, tus semejantes, tus hermanos. Oh Cristo, ten misericordia de nosotros.

A nuestra pobre voz unimos la dulce e inocente voz de la Virgen, de la santísima María, que es tu madre y es también para nosotros una madre de mediación y de consuelo. ¡Oh Señor. Danos tu paz! ¡Danos esperanza!

Oración rezada 
 



Resposta  Mensagem 41 de 1275 no assunto 
De: Luiza Enviado: 15/10/2010 15:29
 
Oracion al santo niño de atocha
 
Amantisimo santo niño de atocha
te alabo y te glorifico con todo mi corazon
y te entrego esta oracion en recuerdo del amor puro
que entregaste a tu inmaculada madre y tu padre adoptivo
Aumenta mi amor por Jose, Maria y que juntos al tuyo
los mantenga en mi corazon para lograr 
la salvacion de mi alma y 
tambien me concedas lo que te pido ardientemente
AMEN
 
Por la libertad de mi amigo

Resposta  Mensagem 42 de 1275 no assunto 
De: GAVIOTA LIBERTAD Enviado: 15/10/2010 16:35

 
 
Oracion al santo niño de atocha
 
Amantisimo santo niño de atocha
te alabo y te glorifico con todo mi corazon
y te entrego esta oracion en recuerdo del amor puro
que entregaste a tu inmaculada madre y tu padre adoptivo
Aumenta mi amor por Jose, Maria y que juntos al tuyo
los mantenga en mi corazon para lograr
la salvacion de mi alma y
tambien me concedas lo que te pido ardientemente
AMEN
 
Por la libertad de mi amigo
 


Señor, me dicen que debo orar. Pero ¿cómo puedo orar yo que soy tan desdichado? ¿Cómo puedo hablarte en mi condición actual?

Yo estoy triste, me encuentro indigno, a veces me siento desesperado. Me creo maldito y me resisto a orar. Yo sufro profundamente, porque todos están contra mí y me juzgan un malvado porque me encuentro aquí, lejos de mis seres queridos, apartado de mis ocupaciones, sin libertad y sin honor. Y sin paz, ¿cómo es posible que yo me dirija a Ti, oh Señor?

Ahora ya te contemplo en la cruz. Tú también, Señor, has sufrido, y ¡qué sufrimiento! Yo sé que Tú eras buenos, eras sabio, eras inocente. Y ellos te injuriaron, te deshonraron, te juzgaron, te azotaron, te crucificaron, te dieron muerte. Pero ¿por qué? ¿Dónde estaba la justicia?

Y Tú fuiste capaz de perdonar a quienes te trataron con tanta injusticia y crueldad. Tú oraste por ellos. Y aún más: Tú quisiste morir así para salvar a quienes te dieron muerte, para salvarnos a nosotros, hombres pecadores. ¿También puedes salvarme a mí?

Siendo así, Señor, se puede pensar que un hombre es bueno en su corazón aun cuando una sentencia de los tribunales de los hombres caiga sobre sus espaldas. Yo también, oh Señor, en el fondo de mi alma me considero mejor de lo que otros hombres piensan; yo sé lo que es justicia, lo que es bueno, lo que es honor, lo que es virtud.

Ante Ti estos pensamientos surgen en mi mente: ¿Tú lo conoces? ¿Tú sabes que siento disgusto por mis miserias? ¿Tú sabes que estoy a punto de gritar y de llorar? ¿Tú me oyes, oh Señor? ¿Es esta mi oración?

Sí, ésta es mi oración; desde mi profunda amargura yo elevo mi voz a Ti: no la desoigas. Al menos Tú, que sufriste tanto como yo, más que yo, por mí, al menos Tú, Señor, óyeme. Yo tengo que pedirme muchas cosas.

Dame, Señor, la paz del alma, dame tranquilidad de conciencia, una nueva conciencia capaz de buenos pensamientos. Sí, Señor, a Ti te lo diré: si yo me extravié, perdóname. Todos necesitamos perdón y misericordia; yo te pido protección para mí. Y también, Señor, yo te pido por mis seres queridos, que todavía me aman. Señor, ayúdalos, consuélalos. Señor, diles que me recuerden, que me amen aún. Yo angustiosamente necesito saber que todavía alguien se acuerda de mí y me ama.

Y también de estos compañeros de desgracia y aflicción que conmigo se encuentran en esta prisión, Señor, ten misericordia. Misericordia para todos, sí y también para quienes nos hicieron sufrir; para todos los seres humanos en este desdichado mundo. Pues nosotros somos, oh Señor, tus criaturas, tus semejantes, tus hermanos. Oh Cristo, ten misericordia de nosotros.

A nuestra pobre voz unimos la dulce e inocente voz de la Virgen, de la santísima María, que es tu madre y es también para nosotros una madre de mediación y de consuelo. ¡Oh Señor. Danos tu paz! ¡Danos esperanza!

Oración rezada 
 




Resposta  Mensagem 43 de 1275 no assunto 
De: GAVIOTA LIBERTAD Enviado: 15/10/2010 16:35

 
 
Oracion al santo niño de atocha
 
Amantisimo santo niño de atocha
te alabo y te glorifico con todo mi corazon
y te entrego esta oracion en recuerdo del amor puro
que entregaste a tu inmaculada madre y tu padre adoptivo
Aumenta mi amor por Jose, Maria y que juntos al tuyo
los mantenga en mi corazon para lograr
la salvacion de mi alma y
tambien me concedas lo que te pido ardientemente
AMEN
 
Por la libertad de mi amigo
 


Señor, me dicen que debo orar. Pero ¿cómo puedo orar yo que soy tan desdichado? ¿Cómo puedo hablarte en mi condición actual?

Yo estoy triste, me encuentro indigno, a veces me siento desesperado. Me creo maldito y me resisto a orar. Yo sufro profundamente, porque todos están contra mí y me juzgan un malvado porque me encuentro aquí, lejos de mis seres queridos, apartado de mis ocupaciones, sin libertad y sin honor. Y sin paz, ¿cómo es posible que yo me dirija a Ti, oh Señor?

Ahora ya te contemplo en la cruz. Tú también, Señor, has sufrido, y ¡qué sufrimiento! Yo sé que Tú eras buenos, eras sabio, eras inocente. Y ellos te injuriaron, te deshonraron, te juzgaron, te azotaron, te crucificaron, te dieron muerte. Pero ¿por qué? ¿Dónde estaba la justicia?

Y Tú fuiste capaz de perdonar a quienes te trataron con tanta injusticia y crueldad. Tú oraste por ellos. Y aún más: Tú quisiste morir así para salvar a quienes te dieron muerte, para salvarnos a nosotros, hombres pecadores. ¿También puedes salvarme a mí?

Siendo así, Señor, se puede pensar que un hombre es bueno en su corazón aun cuando una sentencia de los tribunales de los hombres caiga sobre sus espaldas. Yo también, oh Señor, en el fondo de mi alma me considero mejor de lo que otros hombres piensan; yo sé lo que es justicia, lo que es bueno, lo que es honor, lo que es virtud.

Ante Ti estos pensamientos surgen en mi mente: ¿Tú lo conoces? ¿Tú sabes que siento disgusto por mis miserias? ¿Tú sabes que estoy a punto de gritar y de llorar? ¿Tú me oyes, oh Señor? ¿Es esta mi oración?

Sí, ésta es mi oración; desde mi profunda amargura yo elevo mi voz a Ti: no la desoigas. Al menos Tú, que sufriste tanto como yo, más que yo, por mí, al menos Tú, Señor, óyeme. Yo tengo que pedirme muchas cosas.

Dame, Señor, la paz del alma, dame tranquilidad de conciencia, una nueva conciencia capaz de buenos pensamientos. Sí, Señor, a Ti te lo diré: si yo me extravié, perdóname. Todos necesitamos perdón y misericordia; yo te pido protección para mí. Y también, Señor, yo te pido por mis seres queridos, que todavía me aman. Señor, ayúdalos, consuélalos. Señor, diles que me recuerden, que me amen aún. Yo angustiosamente necesito saber que todavía alguien se acuerda de mí y me ama.

Y también de estos compañeros de desgracia y aflicción que conmigo se encuentran en esta prisión, Señor, ten misericordia. Misericordia para todos, sí y también para quienes nos hicieron sufrir; para todos los seres humanos en este desdichado mundo. Pues nosotros somos, oh Señor, tus criaturas, tus semejantes, tus hermanos. Oh Cristo, ten misericordia de nosotros.

A nuestra pobre voz unimos la dulce e inocente voz de la Virgen, de la santísima María, que es tu madre y es también para nosotros una madre de mediación y de consuelo. ¡Oh Señor. Danos tu paz! ¡Danos esperanza!

Oración rezada 
 




Resposta  Mensagem 44 de 1275 no assunto 
De: GAVIOTA LIBERTAD Enviado: 15/10/2010 16:36

 
 
Oracion al santo niño de atocha
 
Amantisimo santo niño de atocha
te alabo y te glorifico con todo mi corazon
y te entrego esta oracion en recuerdo del amor puro
que entregaste a tu inmaculada madre y tu padre adoptivo
Aumenta mi amor por Jose, Maria y que juntos al tuyo
los mantenga en mi corazon para lograr
la salvacion de mi alma y
tambien me concedas lo que te pido ardientemente
AMEN
 
Por la libertad de mi amigo
 


Señor, me dicen que debo orar. Pero ¿cómo puedo orar yo que soy tan desdichado? ¿Cómo puedo hablarte en mi condición actual?

Yo estoy triste, me encuentro indigno, a veces me siento desesperado. Me creo maldito y me resisto a orar. Yo sufro profundamente, porque todos están contra mí y me juzgan un malvado porque me encuentro aquí, lejos de mis seres queridos, apartado de mis ocupaciones, sin libertad y sin honor. Y sin paz, ¿cómo es posible que yo me dirija a Ti, oh Señor?

Ahora ya te contemplo en la cruz. Tú también, Señor, has sufrido, y ¡qué sufrimiento! Yo sé que Tú eras buenos, eras sabio, eras inocente. Y ellos te injuriaron, te deshonraron, te juzgaron, te azotaron, te crucificaron, te dieron muerte. Pero ¿por qué? ¿Dónde estaba la justicia?

Y Tú fuiste capaz de perdonar a quienes te trataron con tanta injusticia y crueldad. Tú oraste por ellos. Y aún más: Tú quisiste morir así para salvar a quienes te dieron muerte, para salvarnos a nosotros, hombres pecadores. ¿También puedes salvarme a mí?

Siendo así, Señor, se puede pensar que un hombre es bueno en su corazón aun cuando una sentencia de los tribunales de los hombres caiga sobre sus espaldas. Yo también, oh Señor, en el fondo de mi alma me considero mejor de lo que otros hombres piensan; yo sé lo que es justicia, lo que es bueno, lo que es honor, lo que es virtud.

Ante Ti estos pensamientos surgen en mi mente: ¿Tú lo conoces? ¿Tú sabes que siento disgusto por mis miserias? ¿Tú sabes que estoy a punto de gritar y de llorar? ¿Tú me oyes, oh Señor? ¿Es esta mi oración?

Sí, ésta es mi oración; desde mi profunda amargura yo elevo mi voz a Ti: no la desoigas. Al menos Tú, que sufriste tanto como yo, más que yo, por mí, al menos Tú, Señor, óyeme. Yo tengo que pedirme muchas cosas.

Dame, Señor, la paz del alma, dame tranquilidad de conciencia, una nueva conciencia capaz de buenos pensamientos. Sí, Señor, a Ti te lo diré: si yo me extravié, perdóname. Todos necesitamos perdón y misericordia; yo te pido protección para mí. Y también, Señor, yo te pido por mis seres queridos, que todavía me aman. Señor, ayúdalos, consuélalos. Señor, diles que me recuerden, que me amen aún. Yo angustiosamente necesito saber que todavía alguien se acuerda de mí y me ama.

Y también de estos compañeros de desgracia y aflicción que conmigo se encuentran en esta prisión, Señor, ten misericordia. Misericordia para todos, sí y también para quienes nos hicieron sufrir; para todos los seres humanos en este desdichado mundo. Pues nosotros somos, oh Señor, tus criaturas, tus semejantes, tus hermanos. Oh Cristo, ten misericordia de nosotros.

A nuestra pobre voz unimos la dulce e inocente voz de la Virgen, de la santísima María, que es tu madre y es también para nosotros una madre de mediación y de consuelo. ¡Oh Señor. Danos tu paz! ¡Danos esperanza!

Oración rezada 
 




Resposta  Mensagem 45 de 1275 no assunto 
De: GAVIOTA LIBERTAD Enviado: 15/10/2010 16:36

 
 
Oracion al santo niño de atocha
 
Amantisimo santo niño de atocha
te alabo y te glorifico con todo mi corazon
y te entrego esta oracion en recuerdo del amor puro
que entregaste a tu inmaculada madre y tu padre adoptivo
Aumenta mi amor por Jose, Maria y que juntos al tuyo
los mantenga en mi corazon para lograr
la salvacion de mi alma y
tambien me concedas lo que te pido ardientemente
AMEN
 
Por la libertad de mi amigo
 


Señor, me dicen que debo orar. Pero ¿cómo puedo orar yo que soy tan desdichado? ¿Cómo puedo hablarte en mi condición actual?

Yo estoy triste, me encuentro indigno, a veces me siento desesperado. Me creo maldito y me resisto a orar. Yo sufro profundamente, porque todos están contra mí y me juzgan un malvado porque me encuentro aquí, lejos de mis seres queridos, apartado de mis ocupaciones, sin libertad y sin honor. Y sin paz, ¿cómo es posible que yo me dirija a Ti, oh Señor?

Ahora ya te contemplo en la cruz. Tú también, Señor, has sufrido, y ¡qué sufrimiento! Yo sé que Tú eras buenos, eras sabio, eras inocente. Y ellos te injuriaron, te deshonraron, te juzgaron, te azotaron, te crucificaron, te dieron muerte. Pero ¿por qué? ¿Dónde estaba la justicia?

Y Tú fuiste capaz de perdonar a quienes te trataron con tanta injusticia y crueldad. Tú oraste por ellos. Y aún más: Tú quisiste morir así para salvar a quienes te dieron muerte, para salvarnos a nosotros, hombres pecadores. ¿También puedes salvarme a mí?

Siendo así, Señor, se puede pensar que un hombre es bueno en su corazón aun cuando una sentencia de los tribunales de los hombres caiga sobre sus espaldas. Yo también, oh Señor, en el fondo de mi alma me considero mejor de lo que otros hombres piensan; yo sé lo que es justicia, lo que es bueno, lo que es honor, lo que es virtud.

Ante Ti estos pensamientos surgen en mi mente: ¿Tú lo conoces? ¿Tú sabes que siento disgusto por mis miserias? ¿Tú sabes que estoy a punto de gritar y de llorar? ¿Tú me oyes, oh Señor? ¿Es esta mi oración?

Sí, ésta es mi oración; desde mi profunda amargura yo elevo mi voz a Ti: no la desoigas. Al menos Tú, que sufriste tanto como yo, más que yo, por mí, al menos Tú, Señor, óyeme. Yo tengo que pedirme muchas cosas.

Dame, Señor, la paz del alma, dame tranquilidad de conciencia, una nueva conciencia capaz de buenos pensamientos. Sí, Señor, a Ti te lo diré: si yo me extravié, perdóname. Todos necesitamos perdón y misericordia; yo te pido protección para mí. Y también, Señor, yo te pido por mis seres queridos, que todavía me aman. Señor, ayúdalos, consuélalos. Señor, diles que me recuerden, que me amen aún. Yo angustiosamente necesito saber que todavía alguien se acuerda de mí y me ama.

Y también de estos compañeros de desgracia y aflicción que conmigo se encuentran en esta prisión, Señor, ten misericordia. Misericordia para todos, sí y también para quienes nos hicieron sufrir; para todos los seres humanos en este desdichado mundo. Pues nosotros somos, oh Señor, tus criaturas, tus semejantes, tus hermanos. Oh Cristo, ten misericordia de nosotros.

A nuestra pobre voz unimos la dulce e inocente voz de la Virgen, de la santísima María, que es tu madre y es también para nosotros una madre de mediación y de consuelo. ¡Oh Señor. Danos tu paz! ¡Danos esperanza!

Oración rezada 
 





Primeira  Anterior  31 a 45 de 1275  Seguinte   Última 
Assunto anterior  Assunto seguinte
 
©2025 - Gabitos - Todos os direitos reservados