Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

Comunidad Catòlica Tiberiades
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
  Mensajes Generales 
 ============= 
 © MENSAJES GENERALES 
 ============= 
 © MARIOLOGÍA 
 ® VIRGEN MARÍA 
 ® SANTO ROSARIO 
 ® DIVINA MISERICORDIA 
 ============= 
 ® ESPÍRITU SANTO 
 ============= 
 +CUARESMA+ 
 ============= 
 © GIFS Y FONDOS PAZ ENLA TORMENTA 
 ============= 
 © GIFS 
 © BLOG COLECCIÓN DE GIFS 
 © BLOG CATÓLICO NAVIDEÑO 
 © BLOG CATÓLICO VIRGEN MARÍA 
 © BLOG CATÓLICO JESÚS TE SANA 
 © BLOG CATÓLICO DE LOS SANTOS 
 © BLOG CATÓLICO GOTITAS ESPIRITUALES 
 © BLOG GIFS Y FONDOS PAZ ENLA TORMENTA 
 © BLOG DE LA COMUNIDAD CATÓLICA TIBERIADES 
 ============= 
 ♬ NAVIDAD ♬ 
 © FONDOS DE NAVIDAD 
 ADVIENTO Y NAVIDAD 
 ============= 
 © FONDOS DE PANTALLA 
 ® FONDOS PARA MENSAJES 
 ============= 
 ® CARISMA DE TIBERIADES ® 
 ® NORMAS DE CONDUCTA DE TIBERIADES ® 
 
 
  Herramientas
 
General: @@@@MEDITACIONES Y REFLEXIONES ESPIRITUALES@@@@
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 25 en el tema 
De: PazenlaTormenta  (Mensaje original) Enviado: 10/02/2020 19:35


Primer  Anterior  11 a 25 de 25  Siguiente   Último  
Respuesta  Mensaje 11 de 25 en el tema 
De: PazenlaTormenta Enviado: 15/02/2020 15:47

 

Me dan lástima tantas almas solas

No están los tiempos como para ir solos por los caminos del mundo



Por: Cartas de Jesús a Ti (16) |





Querido amigo, hoy quiero hablarte de la cantidad tan enorme de almas que caminan por el mundo solas, sin el cariño y la ayuda de nadie. En esta civilización en la que predomina la cultura de la comunicación, con tantos medios para conectarse unos con otros, y saber unos de otros al instante, es inexplicable que desde el espíritu evangélico no tengáis los hombres más interés de ayudaros en lo esencial. Nadie da un paso, prácticamente, sin ser controlado por intereses de todo tipo: sociales, políticos, policiales, económicos… Pero del interés por el bien espiritual de los demás, de cada hombre que se cruza en vuestro camino ¿Quién se preocupa? Miro la tierra tan querida por mí, y sólo veo cantidades enormes de ovejas sin pastor, solas, desorientadas, recorriendo la aventura de cada día sin una dirección precisa, sin unos objetivos claros, sumidas muchas veces en la angustia de la soledad, del problema del momento, de la situación lamentable, de la falta de amor, de la confusión en las ideas… No, no encuentro mucha inquietud apostólica hoy. ¿Por qué? ¡Son tantas las razones! Falta fe, y amor sincero, y preocupación por el bien de las almas, por la salvación de todos… Rezáis muchas veces VENGA A NOSOTROS TU REINO, pero hacéis poco para que esto sea posible. ¿Me vais a dejar de nuevo sólo con mi cruz? ¿Vais a esconderos otra vez por miedo a lo qué dirán los otros, por vergüenza a hablar de mí, por no complicaros la vida…?


Cualquier cosa la tomáis como excusa para cruzaros de brazos. Cualquier fallo de otros os desanima. Parece que estáis deseando encontrar un motivo para eximiros de vuestra responsabilidad. Mi Iglesia es divina y humana. Yo os quiero santos, pero comprendo que sois pecadores. Y me duele el fallo y la infidelidad de los míos. Sé que eso hace mucho mal, y especialmente a los que tienen una fe frágil. El escándalo es un pecado gravísimo. Pero, ¿qué hubiera pasado si yo me hubiera quitado la cruz de encima al ver la traición de Judas, la negación de Pedro, y la huída de los demás? Las almas nos deben doler a todos. Son un tesoro precioso muchas veces cubierto de barro y miseria, pero que hay que limpiar delicadamente. Las almas son como ovejas solas que no saben a donde ir, y se pierden, y las ataca el lobo, y sufren porque no tienen la ayuda de alguien que con cariño las anime a seguir adelante, o a rectificar el camino, o a desenredarse de la zarza que las tiene aprisionadas.


No me dejes solo. El trabajo es mucho, pero no quiero hacerlo sin tu ayuda. Yo fundé una Iglesia Familia, Comunidad, para que todos nos ayudemos entre sí. No caben en la Iglesia mía los egoístas que van a lo suyo, y quieren un Dios particular, que salve sus almas en solitario. Eso no es lo que yo dije. Lo que dije hasta la saciedad es que estuvierais unidos, un solo rebaño y un solo pastor, que os amarais unos a otros como Yo os he amado. Que no abandonéis a ninguno de mis amigos, a ninguna de mis ovejas. No están los tiempos como para ir solos por los caminos del mundo. Hay mucho lobo suelto, muchos maleantes que buscan las almas para destrozarlas y dejarlas tiradas en el camino. ¿No lo ves?


Debéis imitar más el espíritu de mi cabeza visible entre vosotros que es el Papa Juan Pablo II. ¿No veis todo el esfuerzo que está haciendo para que el fuego de la Verdad y del amor se mantenga vivo en los rincones del mundo? Y allí va, aunque sólo sean unas pocas almas las que le esperen, pero cada alma vale todo el sacrificio de una vida. Y encima lo critican porque hace lo que hace, y muestra una imagen lamentable de decaimiento, y deterioro físico. ¡Qué imagen presentaba yo cuando ensangrentado y destrozado caminaba hacia el Calvario con una cruz que ya casi no podía llevar! ¡Mal espectáculo para el que sólo busca la estética y la belleza dulzona y contrahecha! Lo que realmente vale es el amor, el corazón bien entregado, el afán de almas, la inquietud apostólica… Todo lo demás es puro espectáculo pasajero.


¡Por favor! No te olvides de las pobres almas solas. De mis ovejas abandonadas. Ama mucho a la Iglesia. Siéntete Iglesia, y da la cara por Mi Causa, que sólo es el bien de cada hombre, la salvación de cada persona en un mundo duro y cruel que sólo busca la eficacia, el rendimiento económico, la producción y la riqueza. Un alma vale más que todo el oro del mundo. No me dejes solas las ovejas de mi rebaño, y trata tú de ser un buen pastor allí donde te encuentres. Otros se preocuparán de ti, Yo el primero.




Un abrazo de tu Amigo


 


Jesús


Respuesta  Mensaje 12 de 25 en el tema 
De: PazenlaTormenta Enviado: 17/02/2020 14:43


No a la guerra entre nosotros




Los judíos hablaban con orgullo de la Ley de Moisés. Según la tradición, Dios mismo la había regalado a su pueblo. Era lo mejor que habían recibido de él. En esa Ley se encierra la voluntad del único Dios verdadero. Ahí pueden encontrar todo lo que necesitan para ser fieles a Dios.


También para Jesús la Ley es importante, pero ya no ocupa el lugar central. Él vive y comunica otra experiencia: está llegando el reino de Dios; el Padre está buscando abrirse camino entre nosotros para hacer un mundo más humano. No basta quedarnos con cumplir la Ley de Moisés. Es necesario abrirnos al Padre y colaborar con él en hacer una vida más justa y fraterna.


Por eso, según Jesús, no basta cumplir la ley que ordena “No matarás”. Es necesario, además, arrancar de nuestra vida la agresividad, el desprecio al otro, los insultos o las venganzas. Aquel que no mata, cumple la ley, pero si no se libera de la violencia, en su corazón no reina todavía ese Dios que busca construir con nosotros una vida más humana.


Según algunos observadores, se está extendiendo en la sociedad actual un lenguaje que refleja el crecimiento de la agresividad. Cada vez son más frecuentes los insultos ofensivos proferidos solo para humillar, despreciar y herir. Palabras nacidas del rechazo, el resentimiento, el odio o la venganza.


Por otra parte, las conversaciones están a menudo tejidas de palabras injustas que reparten condenas y siembran sospechas. Palabras dichas sin amor y sin respeto, que envenenan la convivencia y hacen daño. Palabras nacidas casi siempre de la irritación, la mezquindad o la bajeza.


No es este un hecho que se da solo en la convivencia social. Es también un grave problema en la Iglesia actual. El Papa Francisco sufre al ver divisiones, conflictos y enfrentamientos de “cristianos en guerra contra otros cristianos”. Es un estado de cosas tan contrario al Evangelio que ha sentido la necesidad de dirigirnos una llamada urgente: “No a la guerra entre nosotros”.


Así habla el Papa: “Me duele comprobar cómo en algunas comunidades cristianas, y aún entre personas consagradas, consentimos diversas formas de odios, calumnias, difamaciones, venganzas, celos, deseos de imponer las propias ideas a costa de cualquier cosa, y hasta persecuciones que parecen una implacable caza de brujas. ¿A quién vamos a evangelizar con esos comportamientos”? El Papa quiere trabajar por una Iglesia en la que “todos puedan admirar cómo os cuidáis unos a otros, cómo os dais aliento mutuamente y cómo os acompañáis”.




* Padre José Antonio Pagola


Respuesta  Mensaje 13 de 25 en el tema 
De: PazenlaTormenta Enviado: 17/02/2020 15:30


¿Quién es el Fariseo?

Guía para percibir si estamos ante un fariseo (o si somos fariseos...)



Por: Saúl Castiblanco | Fuente: es.gaudiumpress.org





 "Ese es un fariseo" o "no sea fariseo": son expresiones que todos hemos escuchado, y que tienen ‘sabor', que muerden, mucho más si se ajustan a la realidad de quien así es invectivado.


¿Pero qué en resumen es ser fariseo?


Intentemos dilucidar la cuestión de la mano de Mons. Juan Clá, EP, quien en su espléndida obra Lo inédito sobre los Evangelios profundiza en ella.


Primero recordemos que Jesús los llega a calificar como hijos del diablo. ¿Y quién era el diablo? "Era homicida", "no hay verdad en él", "dice la mentira" y es "padre de la mentira" (Cfr. Jn 8, 43-47).


Los fariseos crearon una religión especial para sí, rechazando la que le había sido revelada al pueblo judío: "Los fariseos habían reducido la religión a una escrupulosa observancia de micro preceptos, en detrimento de la práctica de la verdadera ley: ‘Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas, que pagáis el diezmo de la menta, del anís y del comino, y descuidáis lo más grave de la Ley: la justicia, la misericordia y la fidelidad' " (1).


Les gusta la publicidad a los fariseos, les gustan los lugares bien visibles: "Todo lo que hacen es para que los vea la gente; alargan las filacterias y agrandan las orlas del manto" (Mt 23, 5). Les gusta que les echen incienso, que les tributen honras: "Les gustan los primeros puestos en los banquetes y los asientos de honor en las sinagogas; que les hagan reverencias en las plazas y que la gente los llame rabbí" (Mt 23, 6-7). Pero estas honras no corresponden a su verdadera virtud, pues son sepulcros blanqueados, son vasos que parecen limpios por fuera y son sucios por dentro.


Los fariseos no viven verdaderamente para el Señor, "pues por ser ególatras y, por tanto, por haber dado la espalda a Dios, abusaban de los poderes espirituales" (2) "Sé que el amor de Dios no está en vosotros", les dice Jesús. (Jn 5, 42). "Solo se interesaban por su propia gloria terrena", recalca Mons. Juan. (3)


Son mundanos, en el sentido de que "desean captar la simpatía popular" 4, y "tienen un gusto vanidoso y sin amor a Dios de ir atrás de las buenas posiciones. En el fondo, está [Jesús] condenando [en ellos] el mundanismo, defecto característico de aquellos que hacen de los bienes de esta tierra el fin último de sus acciones". 5


Jesús no condena en los fariseos "los saludos en público, ni siquiera el título de ‘rabbí' - maestro", sino "únicamente el vicio de querer colocarse en el centro de las atenciones de todos". 6 Ellos se consideran "la fuente de la verdad", no Dios. "Además, se adoraban a sí mismos y se consideraban los que gestaban a los otros en las vías de la perfección, debido al concepto equivocado de autoestima del que estaban embebidos". 6 Eran ellos y no Dios el que creaba la virtud en los otros.


"¿Habrá católicos que demuestren una esmerada y escrupulosa conciencia a propósito de un determinado mandamiento y, por otro lado, un gran relativismo en materias más graves (cf. Mt 23, 24)? O incluso, ¿losque fácilmente se escandalizan con banalidades y a continuación emiten un juicio temerario y malicioso, descuidando la justicia, la misericordia y la lealtad (cf. Mt 23, 23)? O bien, ¿los que manifiestan desprecio por los otros, como si fuesen peores que ellos mismos (cf. Lc 7, 36-50; 18, 9-14)?". 7 Preguntas relevantes.



Es el fariseísmo "la suma de todos los pecados", 8 por tanto, algo muy grave a evitar. Examinemos primero nuestra propia conciencia al respecto.



_____________________________________________________


1 Mons. Joao Clá, EP. Lo inédito sobre los Evangelios. Comentarios a los Evangelios dominicales Ciclo A - Domingos del Tiempo Ordinario. Librería Editrice Vaticana. 2014. p. 436.

2 Ibídem. p. 427

3 Ibídem. p. 431

4 Ibídem. p. 432

5 Idem.

6 Ibídem. p. 433

7 Ibídem. p. 435

8 Idem.


 


Respuesta  Mensaje 14 de 25 en el tema 
De: PazenlaTormenta Enviado: 17/02/2020 16:55


Acepta la realidad




Un signo de madurez es aceptar la realidad y poseer suficiente solidez y equilibrio para vivirla. La persona madura es objetiva: sabe valorarse a sí mismo sin dejar de valorar a los demás. Es capaz de tomar una decisión y sostenerla. Madurez es el arte de vivir en paz con lo que no se puede cambiar. Ejercítate en esta sabiduría.


El error fundamental del hombre consiste en vivir entre sueños y ficciones. En cambio, el capítulo primero de la sabiduría consiste en mirar todo con los ojos abiertos, permanecer sereno y sin pestañear ante las asperezas de la realidad, aceptándola como es. La vida del hombre sabio deberá ser un constante pasar de las ilusiones a la realidad, de la fantasía a la objetividad. Necesitamos declarar la guerra a los ensueños, desplumar las ilusiones y avanzar hacia la serenidad. (Larrañaga).


Michel Quoist en “Triunfo” afirma: «Hay quienes “no tienen los pies sobre la tierra”, sencillamente vuelan. Vuelas, cuando consideras tus sueños como realidad; cuando pasas el tiempo concibiendo planes que jamás realizas; cuando no te adaptas a las personas y a las cosas. Soñar tu vida no es vivirla». Acepta tus límites y cultiva tus fortalezas.



* Enviado por el P. Natalio


Respuesta  Mensaje 15 de 25 en el tema 
De: PazenlaTormenta Enviado: 17/02/2020 16:55


El problema de las sectas




La tolerancia religiosa constituye un importante avance social en casi todos los países occidentales, donde en los últimos siglos la religión dominante ha solido respetar –salvo algunas excepciones– a quienes profesaban otras creencias minoritarias (algo que, como hemos recordado, no puede decirse que suceda de modo habitual en el resto del mundo).


Junto a eso, en los últimos años hay en esos países una seria preocupación –que comparto– por la aparición de lo que se ha llamado el fenómeno de las sectas. Se trata de un renacer de sentimientos religiosos bastante complejo, que debe analizarse con calma para no caer en actitudes persecutorias sistemáticas, que serían muy poco congruentes con la necesaria libertad religiosa.


Es preciso delimitar con claridad el problema. Para los romanos, secta era un bando, una escuela, un grupo de personas que seguían a un líder. Más adelante, se denominaron sectas a las doctrinas religiosas que se separaban de un tronco principal. Hoy, cuando se habla del problema de las sectas, solemos pensar en doctrinas que se propagan recurriendo a la violencia o al engaño, o ejerciendo una influencia ilegítima sobre las personas.


Como es lógico, hay que perseguir a quienes se apartan de la legalidad. Y si una secta utiliza medios ilegales, o comete cualquier irregularidad que deba castigarse, tendrán que intervenir los tribunales y hacer que se aplique la ley.


Pero no se les castigará por sus creencias, sino por violar la legalidad penal, civil, laboral, fiscal o administrativa vigente (secuestro de personas, violencia física o psíquica, proxenetismo, prostitución, inducción al suicidio, ejercicio ilícito de la medicina, evasión de impuestos, etc.). Y se castigaría igual a cualquiera que obrara así, fuera una secta, un grupo de amigos, un partido político o un club de cazadores.


Sin embargo, sería una clara manifestación de intolerancia perseguirlas simplemente porque adoptan o propagan estilos de vida que, siendo lícitos, son contrarios a la mentalidad dominante. Eso es lo que han hecho algunos movimientos anti-sectas, que califican como sectaria cualquier forma de experiencia religiosa que, desde su particular punto de vista, consideran más intensa de lo que su laicismo esté dispuesto a consentir.


Más preocupante aún es que algunos de esos movimientos anti-sectas parecen considerar lícito cualquier medio para conseguir los fines que se proponen. Es cierto que hay aspectos muy discutibles en muchas sectas, y que sus actuaciones son a veces claramente inmorales, y en algunos casos, incluso delictivas. Y efectivamente es preciso hacer una crítica enérgica, y pedir que se castigue con rigor cualquier conducta ilícita. Pero nunca puede ser correcto emplear para ello la violencia o el engaño, como de hecho hacen con frecuencia algunos de esos movimientos anti-sectas, cayendo en los mismos desafueros que ellos denuncian en las sectas.




* Alfonso Aguiló


Respuesta  Mensaje 16 de 25 en el tema 
De: PazenlaTormenta Enviado: 18/02/2020 14:27


Sorprendente testimonio





La adoración eucarística es un encuentro del alma y de todo nuestro ser con Jesús. Es la criatura que se encuentra con el Creador. Es el discípulo ante el divino Maestro. Es el enfermo con el Médico de las almas. Es el pobre que recurre al Rico. Es el sediento que bebe de la Fuente. Es el débil que se presenta ante el Todopoderoso.


Cuando murió san Pascual Bailón (1592), hermano franciscano, una multitud acudió a su funeral atraída por la fama de sus virtudes. En la misa de cuerpo presente, el cadáver estaba descubierto para que todos pudieran contemplar el rostro del humilde religioso. Su vida transcurrió en la humildad, el sacrificio, y en el amor a la Eucaristía. En esa ocasión cuando el sacerdote levantó la Hostia, el cuerpo yacente se animó, levantó la cabeza, abrió los ojos y fijándolos en Jesús Eucarístico lo adoró junto con los fieles, asombrados por el prodigio. Luego, ante el cáliz en alto con la Sangre de Cristo, el muerto repitió la escena. Pocos años después fue canonizado.


El santo Cura de Ars exclamaba: “¡Cuán consoladores y suaves son los momentos pasados con este Dios de bondad! ¿Estás dominado por la tristeza? Ven un momento a sentarte a sus pies, y quedarás consolado. ¿Eres despreciado del mundo? Ven aquí, y encontrarás un amigo que jamás quebrantará la fidelidad”. Que sepas aprovechar esta maravillosa presencia.




* Enviado por el P. Natalio


Respuesta  Mensaje 17 de 25 en el tema 
De: PazenlaTormenta Enviado: 18/02/2020 14:31


Aborto, lo que nunca te dirán…


No te dirán que....

1.- El aborto puede perjudicar tu salud.

Muchas personas creen que tener un aborto es tan fácil como sacarse un diente. Por el contrario el aborto es un procedimiento muy delicado que puede tener graves consecuencias. El personal encargado de ésta práctica insiste en hacer creer que las complicaciones son pocas o que no existen. Pero esto no es cierto. El caso es que muchas mujeres han sufrido daño físico a causa de un aborto provocado legal.

El músculo cervical (del cuello uterino) puede ser dañado, pues la cérvix es forzosamente dilatada. Esto significa que en un embarazo futuro hay una gran posibilidad de perder el bebé en forma de aborto espontáneo o parto prematuro. El daño en las paredes uterinas es otra preocupación. Perforaciones del útero, infecciones, hemorragias y coágulos de sangre son apenas unas de las pocas complicaciones que puedes tener en un aborto provocado. Aún si tú puedes salir aparentemente "bien" de un aborto provocado, en el futuro podrás tener problemas de esterilidad, embarazos fuera de la matriz o frecuentes abortos espontáneos.

Algunas mujeres quedan embarazadas sólo una vez en la vida. Quizás sea éste el único bebé que tú puedes tener. Un aborto aumenta la posibilidad de no volver a quedar embarazada cuando desees un hijo. ¿Quieres tomar esa clase de riesgo?


No te dirán que....

2.- El aborto deja cicatrices emocionales.

Es muy común que una mujer sienta las consecuencias de su decisión pocos días después de su aborto. Si estas consecuencias no aparecen inmediatamente, vendrán con el tiempo. Los problemas emocionales se manifiestan de varias formas: una depresión inexplicable, alejamiento de las demás personas, emociones reprimidas, endurecimiento del instinto maternal (lo cual puede resultar en abuso o descuido de los hijos que la mujer pueda tener), fuertes sentimientos de culpabilidad y hasta pensamientos de suicidio. No te dejes engañar. Cada aborto provocado tiene consecuencias emocionales graves.


No te dirán que....

3.- Un aborto provocado mata al bebé.

Antes de que sepas de tu embarazo, el corazón del nuevo ser ya habrá comenzado a latir. A las seis semanas de desarrollo se pueden detectar ondas cerebrales y el bebé se mueve y responde al tacto. A las ocho semanas el bebé está perfectamente desarrollado con dedos de manos y pies y aún tiene sus propias huellas digitales.

Hacia las diez semanas puede fruncir la frente, tragar y chupar su dedo pulgar. Si le tocas suavemente su nariz, mueve la cabeza. Entre las semanas once y doce, todos los sistemas del cuerpo están presentes y funcionando. Todo lo que necesita para llegar a ser un saludable recién nacido es tiempo y nutrición. Ningún órgano o sistema se desarrolla después de las doce semanas.


No te dirán que....

4.- El aborto es violento.

- El método de aborto más común en embarazos de pocas semanas es el de "succión por aspiración". El cuello uterino es dilatado a la fuerza. Luego una aspiradora con un poder 29 veces mayor al de una aspiradora casera es usada para sacar "el contenido del útero" (así le llaman al bebé).

- El método llamado "D & E" se usa en embarazos de quince semanas o más. Como en el método de succión, el bebé es cortado en pedazos. Pero en éste caso, el "doctor" usa un instrumento especial para separar los brazos y las piernas del resto del cuerpo. Luego hace presión en su cabeza para succionar el cerebro y aplastar el cráneo. Entonces continúa sacando el resto del cuerpo.

- Otro de los métodos usados para abortar después de las 15 semanas es aquel en el cual se utiliza una solución salina. Esta solución es inyectada en el saco amniótico y envenena al bebé. También le quema la capa exterior de su piel. Por más de una hora el bebé convulsiona hasta que se muere en agonía. La madre entonces da a luz a un bebé muerto.

- El aborto que se practica en el último trimestre del embarazo es una "histerotomía". Consiste en hacer una incisión en el abdomen de la madre y el bebé es sacado de allí para dejarlo morir.


No te dirán que....

5.- El aborto explota a la mujer.

Los consejeros de las clínicas de abortos usan términos obscuros como "producto de la concepción", "contenido del útero", "tejido fetal", etc., para referirse al bebé. Ellos raramente te aconsejan continuar con tu embarazo, pues para ellos el aborto es un negocio y su propósito es ganar dinero. Diríamos entonces que ellos se están aprovechando de tu "problema" para ganar dinero.

Quien hace el aborto gana más dinero en 30 minutos que durante los nueve meses de embarazo. Ellos no piensan en ti... sino en el dinero que conseguirán.


No te dirán que....

6.- Hay alternativas al aborto.

Existen muchas organizaciones que pueden ofrecer un apoyo práctico en caso de embarazos inesperados. Por ejemplo: ofrecen ropa de maternidad y de bebé, residencia, cuidados pre-natales y ayuda económica. También hay consejeras que le ayudarán durante este período difícil.

Por favor, piensa cuidadosamente en tu futuro. La decisión que hagas ahora, te afectará para todo el resto de tu vida. Como no estás segura de la decisión de abortar, tómate un día más y piensa seriamente. No permitas que nadie te presione a tomar una decisión demasiado rápida y para la cual no estás preparada.

Busca ayuda. No estás sola. Hay mucha gente que quiere ayudarte....y te dirá siempre la verdad.

Esta es una decisión muy difícil de hacer. Por favor, sé madura. Solo una persona inmadura piensa únicamente en sí misma


Respuesta  Mensaje 18 de 25 en el tema 
De: PazenlaTormenta Enviado: 19/02/2020 21:35


¿Es posible ser feliz en el sufrimiento?

La única manera de darle sentido y una respuesta a nuestro dolor y sufrimiento es el camino de Cristo.



Por: Pablo Augusto Perazzo | Fuente: CEC





«Nosotros predicamos a un Cristo crucificado: escándalo para los judíos, necedad para los gentiles; mas para los llamados, lo mismo judíos que griegos, un Cristo, fuerza de Dios y sabiduría de Dios» (1Cor 1, 23-24). Ese es nuestro camino de salvación. Ese es el camino del cristiano. Jesús nunca ha dicho que ser cristiano es algo fácil: «Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día, y sígame» (Lc 9, 23).


Muchas veces la cruz se hace demasiado pesada, y pareciera que no la podemos cargar. Por eso Jesús, conociendo mejor que nadie nuestra debilidad, también dice en otro pasaje:


«Venid a mí todos los que estáis fatigados y agobiados, y yo os aliviaré. Tomad sobre vosotros mi yugo, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas. Porque mi yugo es suave y mi carga ligera».(Mt 11, 28-30) La única manera de darle sentido y una respuesta a nuestro dolor y sufrimiento es el camino de Cristo.


Muchas veces tenemos que acompañar personas en momentos de tribulación, de dolor, de sufrimiento… la verdad es que son pocas las palabras con las que se puede consolar alguien que está sufriendo la muerte de un ser querido; acompañando la enfermedad de un hijo; los problemas graves de un familiar; las injusticias a causa de enemigos; la pobreza de madres que no tienen con que dar de comer a sus hijos; los padres que tienen que lidiar con los distintos problemas de la familia; o, simplemente, situaciones difíciles que se presentan a diario, y requieren un sacrificio y esfuerzo especial de nuestra parte.


La verdad es que si nos quedamos en plano simplemente “horizontal”; es decir, si miramos esas situaciones solamente desde los “ojos del mundo”, es imposible darle sentido; darle una respuesta; darle un sentido a todas esas situaciones. ¿Qué sentido tiene sufrir? Solamente Dios puede darnos sentido. Solamente Cristo, que vivió en su propia carne el sufrimiento, puede entendernos y compadecerse de nosotros. La cruz, por lo tanto, en Cristo, cobra un sentido divino, un camino de salvación. Es, por lo tanto, un camino lleno de sentido. Que nos puede llevar a la felicidad.




 


Muchos huyen del dolor y del sufrimiento. Es comprensible. Pero hacer eso, en el fondo, es huir de la propia vida. Pues nuestra vida siempre tiene una cuota de sufrimiento, de dolor; siempre implica cargar una cruz. Cada uno tiene su Cruz. No significa que busquemos el sufrimiento, pero la vida por sí misma porta una dimensión de dolor. ¿Quién no tiene problemas en la vida?


Volvamos nuestra mirada a Cristo. Él asume el dolor, asume el sufrimiento de la Cruz, de manera voluntaria. «El cual, siendo de condición divina, no retuvo ávidamente el ser igual a Dios. Sino que se despojó de sí mismo tomando condición de siervo, haciéndose semejante a los hombres y apareciendo en su porte como hombre; y se humilló a sí mismo, obedeciendo hasta la muerte y muerte de cruz» (2Fil 6-8). Es decir, descubre que es en ese camino, permitido por el Padre, que cumple su Misión. Libremente opta por asumir el dolor y el sufrimiento en su vida. No se trata de buscar el sufrimiento, pero si Dios lo permite en nuestras vidas, por algo será. Normalmente no sabemos el porqué, pero Dios tiene un Plan para cada uno de nosotros. ¡Cuántas cosas aprendemos! ¡Cuánto crecemos y maduramos como personas, cuando aceptamos el sufrimiento en nuestras vidas!


Una clave espiritual fundamental es aprender a sufrir junto con Jesús. Comprender nuestro dolor a través de Cristo, quien le dio sentido salvífico a todo sufrimiento. De esa manera, sufrimos junto con Jesús. Nos conformamos más a Jesús. Por lo tanto, al participar de su dolor, nos estamos haciendo otros Cristos. Así nos santificamos, y por lo tanto somos cada vez más felices. Sólo quien cree en Cristo puede entender el dolor y el sufrimiento de esta manera. Cómo decíamos al comienzo, es “locura para los griegos y necedad para los judíos”.


«Si de verdad queremos que estas reflexiones se concreten en un consuelo real y fuente de paz, es imprescindible cumplir con una condición: vivirlo todo en la fe, que quiere decir que el cristiano que sufre debe unirse conscientemente al Cristo doliente, debe acompañarlo cargando con paz su propia cruz a la de Cristo, que sube al Calvario llevando con amor la suya, debe no sólo aguantar el dolor con resignación sino asumirlo amorosamente, de forma consciente y voluntaria, sabiendo que de esta manera su sufrimiento, igual que el de Jesús, se torna, fecundo y creador, en fuente de vida y redención» (Ignacio Larrañaga, El arte de ser feliz, Paulinas 2012, p.120).


Respuesta  Mensaje 19 de 25 en el tema 
De: PazenlaTormenta Enviado: 20/02/2020 15:15


Adivinar el futuro

El problema es cuál es el lugar de Dios en el desarrollo de los acontecimientos que implican la voluntad humana



Por: Fr. Nelson Medina, OP | Fuente: fraynelson.com





Nos pusimos a hablar con una amiga sobre la lectura de la mano y la adivinación del futuro. Entonces yo le decía que eso no estaba bien porque la Biblia lo dice, que nadie sabe el futuro sino sólo Dios. Y ella me corchó porque me preguntó que entonces qué pasaba con los profetas... yo le dije que se llamaban Isaías, Jeremías, Ezequiel y Daniel y que en ese tiempo eran muy pintas... pero nada más... la verdad no supe qué responder, porque si nadie sabe el futuro cómo es que la misma Biblia tiene profetas. Entonces mis preguntas son:


1. Por qué es malo ir a sesiones de lectura de mano, adivinación, etc.

2. Por qué, si es malo, la misma Biblia nos cuenta de los profetas.

3. Las profecías que la Virgen le ha contado a algunos de sus videntes, ¿qué son?



¡Mil gracias!

Tus tres preguntas están todas relacionadas con el conocimiento del futuro. Dijiste a tu amiga que la Biblia decía que el futuro sólo lo conoce Dios. Creo que esa frase requiere cierta clarificación. Lo malo de los que leen la mano no es que conozcan o que pretendan conocer el futuro. El problema es cuál es el lugar de Dios en el desarrollo de los acontecimientos que implican la voluntad humana. Voy a tratar de explicarme.


Cuando una persona lee la mano afirma que sucederán ciertas cosas, es decir, dice que hay un "destino" marcado, y esta idea es incompatible con la libertad de Dios. Ese destino inmutable a la gente le interesa porque así quiere salir de dudas en cosas como si va a casarse, si vivirá mucho tiempo, si la pareja lo está engañando, y similares. Si uno cree que hay un destino y que ese destino está así escrito, no queda lugar alguno para el plan que el amor de Dios tenga para uno. Tampoco queda lugar para la propia libertad. Si ya sé que mi destino es que mi pareja me va abandonar, ¿para qué luchar?


La idea de un destino "escrito", o sea, implacable e impersonal, es muy fuerte en el mundo pagano. "Edipo Rey", por ejemplo, es un homenaje impresionante a esa idea. Edipo termina matando al papá y casándose con la mamá, y todos los intentos de evitar ese destino fracasan, de modo que la desgracia se consuma sobre la vida del pobre hombre. ¿Qué tiene eso que ver con la Biblia? Si uno cree en esa idea de destino uno no cree en Dios. El que me lee la mano me está diciendo: "NO hay Dios que cambie tu vida". Por supuesto, eso es del todo opuesto a la revelación que encontramos en la Biblia.


Y hay más riesgos. En el mundo de los adivinadores siempre hay una carta en la manga. Se supone que tu destino está "marcado", pero la misma persona que te dice: "Yo veo que su pareja le está siendo infiel" de seguro tiene algo qué ofrecerte: un bebedizo, un sortilegio, un encantamiento. Adivinación y brujería van de la mano. Y cuando hablamos de brujería hablamos de abrirle las puertas al enemigo del alma. Quizá nada es tan eficaz para darle poder al diablo que decirle que queremos lograr un objetivo "como sea". La brujería la idolatría de la propia voluntad; es el imperio de lo que YO quiero, o sea, exactamente lo opuesto de nuestra fe, que siempre consiste en acoger con amor lo que DIOS quiere. Entrar a las cartas y lecturas de mano es entrar en ese juego sucio, que no puede dejar limpia el alma.


¿Y los profetas, qué? ¡Los profetas nunca hablan de un destino marcado! Los profetas (se entiende, los verdaderos) más bien nos ayudan a comprender el querer de Dios. Los profetas son gente de oración, o sea, gente que ha buscado con ardor y amor el querer del Señor, antes que su propio querer o incluso su propia vida. Un profeta, o un genuino vidente, son exactamente lo opuesto de un adivinador o un brujo.


Además, las profecías de los verdaderos profetas o videntes son SIEMPRE llamados a la conversión. Por supuesto, esta palabra no interesa a los brujos. Los profetas quieren que nuestras vidas sean como Dios las ha pensado y amado, y por eso el lema no es "Esto se tiene que cumplir", como si la Historia humana fuera una película de la que ellos ya vieron los "cortos". El lema de los profetas es lo que dijo uno de ellos, Ezequiel, de parte de Dios: "No quiero la muerte del pecador, sino que se convierta y viva" (Ezequiel 33, 11).


Respuesta  Mensaje 20 de 25 en el tema 
De: PazenlaTormenta Enviado: 20/02/2020 15:37


Acéptate a ti mismo



Por un sabio plan divino las personas somos distintas, tenemos diversas capacidades, diferentes inclinaciones y gustos. Es una realidad y tienes que aceptarla sin dejarte alcanzar ni por la envidia del bien ajeno, ni por el orgullo de lo que te ha tocado. Es señal de madurez la aceptación serena de ti mismo con tus capacidades y carencias.


Padre mío, en tus manos me pongo, con lo poco que soy, feliz de ser como soy. Si alguna vez sentí tristeza y vergüenza de mi persona, te pido perdón por haberme avergonzado de la obra de tus manos. Te doy gracias por haberme hecho capaz de pensar que pienso, portador de un aliento divino e inmortal. Dame la gracia de perdonar-amar esta extraña personalidad. En tu voluntad perdono-amo tantas cosas muy mías que hasta ahora no me gustaban. En tus manos me pongo con lo poco que soy, feliz de ser como soy, amigo de mí mismo. Hágase tu voluntad (Ignacio Larrañaga).


Recuerda que los demás te necesitan tal como eres. No conviene que te pongas una máscara o representes una comedia. Puedes decirte a ti mismo: “voy a llevarles algo especial, pues nunca se encontraron ni se encontrarán con alguien como yo; soy una persona única salida de las manos de Dios”. Dios te valora, hazlo tú también.



* Enviado por el P. Natalio


Respuesta  Mensaje 21 de 25 en el tema 
De: PazenlaTormenta Enviado: 21/02/2020 13:50


Muchos son los llamados, pocos los elegidos

Talentos Trabajando



Por: Katlheen Velasco | Fuente: Catholic.net





Una frase tan peculiar en la biblia que todos alguna vez la hemos escuchado ó leído en diferentes circunstancias de la vida, ésta cita me ha tomado rato tiempo en el pensamiento; así que decidí analizarla cuestionándome con las siguientes tres preguntas.


¿Qué piensas de ésta cita?, ¿Qué te hace sentir?, y ¿Cuál es tú experiencia con dicha frase? Me ha sido sumamente fácil responderlas, no he tenido ninguna experiencia en específico más que ésta situación en la que como inspiración del Espíritu Santo me ha nacido el deseo de analizarla. Lo que pienso acerca de dicha cita es que siempre se trata de escuchar, pero hay dos formas de hacerlo; queriendo y sabiendo.


Dios está siempre ahí, gritando sin cansarse que quiere lo mejor para ti, que quiere tú corazón y tú felicidad; y de verdad que nunca se cansa de hacerlo. Él no es cómo tú madre llamándote a comer, Él no sólo te llama tres veces y no vuelve hacerlo porque ya ha sido suficiente ruego, Él tampoco utiliza algún tipo de corneta u otro sonido para evitarse la fatiga de gritar, mucho menos te contará hasta tres para que lo hagas en seguida. Dios es más sutil, siempre está ahí hablándote en el silencio.


Silencio, eso a lo que todo ser humano le teme sin siquiera darse cuenta, analiza tú vida y date cuenta que el silencio suele ser incómodo, fatigante y muchas veces triste, pero en realidad el silencio para Dios no es lo que para el hombre.


Para Él es el mejor medio de comunicación, es ése momento en el que tu capacidad humana comienza a cuestionarse sobre la forma en cómo vive; es en él cuando te grita todas las respuestas.


Nunca se ha tratado de saber escuchar, en realidad siempre se ha tratado de querer escuchar, la diferencia entre ello es que no se necesita sabiduría para hacer algo, se necesita desear hacerlo con todo el corazón. Porque has escuchado millones de veces que debes ir a misa, que debes seguirlo porque Él es el camino, la verdad y la vida, pero en realidad no has querido escuchar a profundidad dichas palabras que tu entorno te grita y recuerda a cada instante.


Y cuándo aceptas querer hacerlo es cuándo tus ojos se abren a la verdadera realidad, cuándo ya no dependes más de ti y ahora piensas en Él en más que un ser supremo y posiblemente irreal, ahora lo tomas cómo amigo y se convierte en la persona más importante de tu vida y comienzas a cuestionarte porqué tardaste tanto en decirle que sí y aceptar el llamado. Ese sí valiente que cambió tú vida.


Cuando llegas a éste punto te das cuenta de que hay muchos que te acompañan en el sí valiente en tiempo y forma, otros tantos que ya llevan cierto rato en haberlo dado y muchos más que siguen acobardados con los ojos vendados y los oídos cerrados sólo porque si.


Es éste momento cuando te toca ser ejemplo y orar por los que aún no han dado el paso valiente al inicio de una conversión.


Para finalizar, dicha frase me hace sentir valiente y orgullosa de ya haber dado el sí hace un tiempo. Pero también me ocupa una gran responsabilidad, la responsabilidad de ser fiel amante y seguidora.


Respuesta  Mensaje 22 de 25 en el tema 
De: PazenlaTormenta Enviado: 22/02/2020 16:06


COMENTARIO POR LA FIESTA DE LA CÁTEDRA DE SAN PEDRO


De Banquillo de madera a Santa Sede


La Santa Sede en la basílica de San Pedro “cuelga” directamente debajo de la famosa imagen del Espíritu Santo.

En círculos clericales, rueda siempre a manera de broma, la pregunta, ¿cuál es la santa, que si bien tiene cuatro piernas, no podría correr? Pues bien, es la Santa Sede.

El término, no de muy fácil comprensión, es hasta hoy una usual denominación para el Papa, quien como soberano sujeto de derecho internacional, goza del reconocimiento de alrededor de 170 estados y 20 organizaciones internacionales. No pocas veces se piensa que el Papa es reconocido por otros estados y jefes de estado, como jefe del diminuto Estado Vaticano, si bien su condición especial no se fundamenta en el ser el país más pequeño del mundo. El Papa es reconocido en virtud de sus relaciones de siglos con otros estados, sobre todo a través del envío de embajadores. Si hubiera perdido el Vaticano - como fue el caso en el siglo XIX con los Estados Pontificios, de mayor extensión y no poca significancia política - la Santa Sede hubiera permanecido siendo sujeto de derecho internacional reconocido internacionalmente. El Papa, y sólo él entre todos los demás líderes religiosos, es quien goza de la autoridad de un jefe de estado, equiparada a la de los presidentes.  Y todo esto se lo debe, por así decir, al banquillo de madera sobre el que se sentó San Pedro, cuando enseñaba a la comunidad de Roma. Este pequeño asiento del príncipe de los apóstoles se encuentra hoy en el enorme altar de bronce que se levanta al final de la nave occidental de la Basílica de San Pedro. El trono de Pedro, elevado a lo alto por cuatro doctores de la iglesia, es sobrepasado en fulgor por la imagen del espíritu Santo, la única ventana colorida en la Catedral de San Pedro. 


Una silla bajo la luz del Espíritu Santo

La Iglesia celebra hoy la Fiesta de la Cátedra de San Pedro, para recordar la autoridad del primero de los apóstoles y la de sus sucesores. La Santa Sede, suyo concepto se remonta al banco de madera de un pescador, a quien el Señor nombró Pastor de su Iglesia, es la más alta autoridad moral en todo el mundo actual. También los no cristianos prestan atención a las palabras del Papa sobre la paz, migración y protección climática. Más importante que estos temas políticos es sin embargo la preservación y auténtica interpretación de la fe, que le fue confiada a Pedro y a sus sucesores.  A él le fue prometida –tal como bellamente muestra el altar en San Pedro –la especial asistencia del Espíritu Santo al explicar el Evangelio de Cristo desde la Tradición de la Iglesia y sus padres. Él, el Papa, y solamente él, tiene la potestad de las llaves, para atar y desatar. Él tiene poder directo, inmediato, limitado sólo por la Ley Divina sobre toda la Iglesia. Él es el pastor Supremo a quien le es confiado la totalidad del rebaño del Señor. La Iglesia celebra hoy este elevado servicio del servidor de los siervos de Dios. Al contrario de los Patriarcas ortodoxos organizados por iglesias nacionales y de los cientos de denominaciones protestantes, la Iglesia católica es una – gracias al Papa, a quien el Concilio Vaticano II denomina su cabeza visible. 



La piedra sobre la cual nos paramos.

La fiesta de la Cátedra de San Pedro es ocasión para agradecer por las piedras sobre las cuales Jesús quiso edificar su Iglesia. Cada Papa, hombre débil y pecador, es por cierto la base fuerte sobre la cual la enseñanza y la vida de los discípulos de Jesús se asientan firmemente.


El Papa Bendicto XVI, durante la toma de posesión de su cátedra, es decir la Basílica de San Juan de Letrán, explica muy bellamente el ministerio petrino de enseñar y dirigir: 

“Pedro fue el primero que hizo, en nombre de los Apóstoles, la profesión de fe: "Tú eres el Cristo, el Hijo de Dios vivo" (Mt 16, 16). Esta es la tarea de todos los sucesores de Pedro: ser el guía en la profesión de fe en Cristo, el Hijo de Dios vivo. La cátedra de Roma es, ante todo, cátedra de este credo. Desde lo alto de esta cátedra, el Obispo de Roma debe repetir constantemente: Dominus Iesus, "Jesús es el Señor", como escribió san Pablo en sus cartas a los Romanos (Rm 10, 9) y a los Corintios (1 Co 12, 3). A los Corintios, con particular énfasis, les dijo: "Pues aun cuando se les dé el nombre de dioses, bien en el cielo bien en la tierra, (...) para nosotros no hay más que un solo Dios, el Padre; (...) y un solo Señor, Jesucristo, por quien son todas las cosas y por el cual somos nosotros" (1 Co 8, 5-6). 


La cátedra de Pedro obliga a quienes son sus titulares a decir, como ya hizo san Pedro en un momento de crisis de los discípulos, cuando muchos querían irse:  "Señor, ¿a quién vamos a ir? Tú tienes palabras de vida eterna, y nosotros creemos y sabemos que tú eres el Santo de Dios" (Jn 6, 68-69). Aquel que se sienta en la cátedra de Pedro debe recordar las palabras que el Señor dijo a Simón Pedro en la hora de la última Cena: "Y tú, una vez convertido, confirma a tus hermanos" (Lc 22, 32). 

Aquel que es titular del ministerio petrino debe tener conciencia de que es un hombre frágil y débil, como son frágiles y débiles sus fuerzas, y necesita constantemente purificación y conversión. Pero debe tener también conciencia de que del Señor le viene la fuerza para confirmar a sus hermanos en la fe y mantenerlos unidos en la confesión de Cristo crucificado y resucitado. 


En la primera carta de san Pablo a los Corintios encontramos la narración más antigua que tenemos de la resurrección. San Pablo la recogió fielmente de los testigos. Esa narración habla primero de la muerte del Señor por nuestros pecados, de su sepultura, de su resurrección, que tuvo lugar al tercer día, y después dice: "Cristo se apareció a Cefas y luego a los Doce..." (1 Co 15, 4). Así, una vez más, se resume el significado del mandato conferido a Pedro hasta el fin de los tiempos: ser testigo de Cristo resucitado. 


El Obispo de Roma se sienta en su cátedra para dar testimonio de Cristo. Así, la cátedra es el símbolo de la potestas docendi, la potestad de enseñar, parte esencial del mandato de atar y desatar conferido por el Señor a Pedro y, después de él, a los Doce. En la Iglesia, la sagrada Escritura, cuya comprensión crece bajo la inspiración del Espíritu Santo, y el ministerio de la interpretación auténtica, conferido a los Apóstoles, se pertenecen uno al otro de modo indisoluble. 


Cuando la sagrada Escritura se separa de la voz viva de la Iglesia, pasa a ser objeto de las disputas de los expertos. Ciertamente, todo lo que los expertos tienen que decirnos es importante y valioso; el trabajo de los sabios nos ayuda en gran medida a comprender el proceso vivo con el que ha crecido la Escritura y así apreciar su riqueza histórica. Pero la ciencia por sí sola no puede proporcionarnos una interpretación definitiva y vinculante; no está en condiciones de darnos, en la interpretación, la certeza con la que podamos vivir y por la que también podamos morir. Para esto es necesario un mandato más grande, que no puede brotar única y exclusivamente de las capacidades humanas. Para esto se necesita la voz de la Iglesia viva, la Iglesia encomendada a Pedro y al Colegio de los Apóstoles hasta el final de los tiempos. 


Esta potestad de enseñanza asusta a muchos hombres, dentro y fuera de la Iglesia. Se preguntan si no constituye una amenaza para la libertad de conciencia, si no es una presunción contrapuesta a la libertad de pensamiento. No es así. El poder conferido por Cristo a Pedro y a sus sucesores es, en sentido absoluto, un mandato para servir. La potestad de enseñar, en la Iglesia, implica un compromiso al servicio de la obediencia a la fe. 


El Papa no es un soberano absoluto, cuyo pensamiento y voluntad son ley. Al contrario: el ministerio del Papa es garantía de la obediencia a Cristo y a su Palabra. No debe proclamar sus propias ideas, sino vincularse constantemente a sí mismo y la Iglesia a la obediencia a la Palabra de Dios, frente a todos los intentos de adaptación y alteración, así como frente a todo oportunismo. 


Así lo hizo el Papa Juan Pablo II, cuando, ante todos los intentos, aparentemente benévolos con respecto al hombre, frente a las interpretaciones erróneas de la libertad, destacó de modo inequívoco la inviolabilidad del ser humano, la inviolabilidad de la vida humana desde la concepción hasta la muerte natural. La libertad de matar no es una verdadera libertad, sino una tiranía que reduce al ser humano a la esclavitud. El Papa es consciente de que, en sus grandes decisiones, está unido a la gran comunidad de la fe de todos los tiempos, a las interpretaciones vinculantes surgidas a lo largo del camino de peregrinación de la Iglesia. Así, su poder no está por encima, sino al servicio de la palabra de Dios, y tiene la responsabilidad de hacer que esta Palabra siga estando presente en su grandeza y resonando en su pureza, de modo que no la alteren los continuos cambios de las modas.” […]


Un Papa, una familia

El Papa es el Padre de la familia de Cristo, que conduce a los hijos e hijas de Dios a casa. Como obispo de Roma enlaza a todos los católicos a la ciudad sobre las siete colinas. Todos, sin importar color de piel, son ciudadanos de esta ciudad, tenue imagen de aquella urbe que un día descenderá del cielo como el lugar donde habita Dios:


“Queridos romanos, ahora soy vuestro Obispo. Gracias por vuestra generosidad, gracias por vuestra simpatía, gracias por vuestra paciencia conmigo. En cuanto católicos, todos somos, de algún modo, también romanos.  Con las palabras del salmo 87, un himno de alabanza a Sión, madre de todos los pueblos, cantaba Israel y canta la Iglesia: "Se dirá de Sión: "Uno por uno todos han nacido en ella"..." (v. 5). De modo semejante, también nosotros podríamos decir: en cuanto católicos, todos hemos nacido, de algún modo, en Roma. Así, con todo mi corazón, quiero tratar de ser vuestro Obispo, el Obispo de Roma. Todos queremos tratar de ser cada vez más católicos, cada vez más hermanos y hermanas en la gran familia de Dios, la familia en la que no hay extranjeros. Amén.



Monseñor Florian Kolfhaus

Funcionario de la Secretaría de Estado del Vaticano


Respuesta  Mensaje 23 de 25 en el tema 
De: PazenlaTormenta Enviado: 22/02/2020 16:07


Dame, Señor un corazón nuevo




Corazón de Jesús, dame hoy un

corazón nuevo. Un corazón sin amarguras. Un corazón

sin susceptibilidades. Un corazón joven, capaz de 

olvidar los agravios verdaderos o falsos


Dame hoy un corazón que sepa tener esperanzas

cuando todos los demás la pierden

Un corazón amable que sepa 

sonreír aun con lágrimas


Dame un corazón que no pierda nunca

la confianza en los hombres,

aunque fallen mil veces

Un corazón que sepa ser siempre puro,

generoso, desinteresado aunque

sienta el lastre del egoísmo, y 

el mordisco del instinto


Dame Señor, un corazón amable y optimista

como el Tuyo

Un corazón lleno de Paz, de dulzura

de Bondad

Un corazón que ame realmente y no se canse nunca

de dar y pedir perdón

Amén!


Respuesta  Mensaje 24 de 25 en el tema 
De: PazenlaTormenta Enviado: 22/02/2020 16:07


Aunque no seas artista




“Descarguen en el Señor todas sus inquietudes, ya que él se ocupa de ustedes”. Si lees y meditas la Biblia, encontrarás esta exhortación y otras semejantes. Te ayudarán a fortalecer tu confianza en Dios que te ofrece refugio “a la sombra de sus alas mientras vienen calamidades” de cualquier clase y magnitud. “No temas, contigo estoy. Yo te amo”,  te asegura Dios.


Aunque no escribas libros, eres el escritor de tu propia vida… Aunque no seas Miguel Ángel, puedes hacer de tu vida una obra maestra… Aunque no entiendas de cine, ni de cámaras, tu existencia puede transformarse en un film primoroso... con Dios de productor. Aunque no entiendas de música, tu vida puede ser una magnífica sinfonía que los clásicos respetarían... Aunque no hayas estudiado en una escuela de comunicaciones, tu vida puede transformarse en un reportaje modelo... Todo, todo... depende de tu confianza en Dios, y de tu empeño en ser digno hijo suyo.


Confiar en Dios, es depositar toda nuestra fe en él. Dejarle el cuidado de tus cosas. Permitirle disponer de tu futuro, porque sabes que te ama más que tú mismo. Reposar en él “como un niño en brazos de su madre” (salmo 131). Y confiar sobre todo en las pruebas, cuando las cosas resultan incomprensibles.




* Enviado por el P. Natalio


Respuesta  Mensaje 25 de 25 en el tema 
De: PazenlaTormenta Enviado: 22/02/2020 16:09

San Pío de Pietrelcina : La Última Misa





El domingo día 22 de septiembre de 1968 se celebraba el 50 aniversario de la aparición de los estigmas de Padre Pío. Cincuenta ramos de rosas rojas decoraban el altar, traídos por los delegados de setecientos Grupos de Oración llegados de todas partes, en recuerdo de esos 50 años de ininterrumpido sangrar, de crucificado sin cruz, de participación en la Pasión de Cristo.

"Padre, celebre usted una misa solemne y cantada" le pidió el padre guardián.

Como era de esperar, obediente, sin fuerzas, no se sabe cómo, pero lo hizo, ayudado por 3 de sus hermanos, celebró su última misa. Cada paso que daba era un ataque de asma. Algunos testigos cuentan que le vieron muy enfermo. Trató de cantar, pero no pudo... Al terminar, estuvo por desplomarse si el padre Guglielmo no lo hubiera sujetado y ayudado a sentarse en la silla de ruedas. Al alejarse, dirigió una impresionante mirada a los fieles, y tendiéndoles los brazos como si quisiera abrazarlos, se despidió con un susurro:


"Hijos míos, queridos hijos míos".


Cual no sería la sorpresa de algunos fieles que se dieron cuenta, mientras celebraba la Misa, que habían desaparecido las llagas de sus manos, que habían permanecido abiertas, frescas, sangrantes durante medio siglo.



ULTIMA MISA DE PADRE PÍO

Aquel día 22 de septiembre, después de una breve aparición saludando con el pañuelo y bendiciendo con la mano, se retiró a su celda . Sonreía, pero su rostro se veía muy cansado. Dirigiéndose a sus hermanos capuchinos, que lo venían cargando, les dijo: dentro de poco ya no tendrán que molestarse para acompañarme a decir Misa, fue una dramática profecía 

Esa misma noche, a las 21 horas, comenzaba el final de la vida de Padre Pío.


A las 22 horas Padre Pío le pregunta la hora a Padre Pellegrino- que lo cuidaba- Recitaba una Ave Maria y le pedía que se quedara junto a él. A las 23 horas Padre Pellegrino se despide de Padre Pío, pero preocupado, se queda despierto en su celda contigua. Padre Pío sigue con su rosario en la mano recitándolo débilmente.

A las 0.20 horas del día 23 de septiembre, le pide a Padre Pellegrino que lo confiese y le pide renovar su profesión religiosa y consagración de sí mismo y de su vida y después, con voz lenta y cansada le dice Si el Señor me llama hoy, pídeles perdón en mi nombre- a mis hermanos del convento y a todos mis hijos espirituales por las molestias que les di y pídeles una oración por mi alma.

Padre Pío estaba incomodo en su cama, casi no podía respirar. Lo sentaron en su silla de ruedas y lo llevaron a la terraza. Llegó su medico y le puso una inyección. No reaccionó. Sus labios se movían lentamente repitiendo la jaculatoria Jesús, María...

A las 2.09 le pusieron los santos óleos. A las 2.27 cayó de sus manos el rosario. Seguía repitiendo su jaculatoria con gran dificultad. 

A las 2.30 de aquel día, 23 de septiembre de 1968, dulcemente, con el rostro sereno lleno de paz y un rosario entre las manos, el Padre Pío de Pietrelcina entregó su alma a quien ya se la había ofrecido junto con su vida entera.

¡Así muere un Santo!

Con el doctor Sala presente, los hermanos descubrieron la desaparición de los estigmas; en su lugar, ni una cicatriz, ni una señal quedaba del calvario padecido para gloria de Dios y salvación de los hombres. Durante toda su vida, sólo había buscado una cosa, cumplir la Voluntad de Dios.


Había trabajado en la viña del Señor desde su primer día hasta el último. Su cuerpo estaba destruido, masacrado por el cansancio y la enfermedad. Había llegado el momento de entregarlo a la tierra, para que subiera libre- hacia su Señor en la eternidad gloriosa.

Comenzaron a tocar las campanas del convento. En pocos minutos toda la ciudad estaba iluminada. Enseguida la noticia se difundió por todo el mundo. De día y de noche permanecieron abiertas las puertas de la iglesia para acoger a las más de cien mil personas que acudieron a San Giovanni Rotondo para verlo por última vez. Los funerales fueron grandiosos e impresionantes.


El 26 de septiembre de 1968, el ministro general de los capuchinos, presidió los funerales. Se leyó el telegrama de S.S. Pablo VI, y el administrador apostólico, padre Clemente de Santa Maria in Punta, pronunció el elogio fúnebre. El cuerpo del Padre Pío fue bajado a la cripta, que se había preparado unos meses antes, con esa finalidad, exactamente debajo del altar mayor del Santuario de Nuestra Señora de las Gracias y que había sido bendecida a las 11 de la mañana del día 22 de septiembre, víspera de su muerte, al mismo tiempo que la primera piedra del monumental Vía Crucis que recorre varios cientos de metros por las estribaciones del Monte Gargano.



Primer  Anterior  11 a 25 de 25  Siguiente   Último  
Tema anterior  Tema siguiente
 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados