Cada ser humano está destinado a comenzar algo, tiene la posibilidad y la capacidad para comenzar: un negocio, un estudio, una pareja, una familia y así también posee la capacidad de terminarlo. Si comenzás algo lo podés terminar; pero muchas veces somos expertos en los comienzos y nunca llegamos a la conclusión.

Cuando ocurre esto, sin darnos cuenta, estamos actuando con el espíritu de Satanás que fue expulsado, desterrado, del propósito por Dios. Satanás había comenzado en el cielo y no pudo terminar, por eso cada vez que toma tu vida comienza algo pero no lo terminará porque sabe comenzar pero no puede terminar. El único que puede terminar la obra que inicia es el Señor Jesucristo.

Todo lo que Satanás comenzó en tu vida para arruinarla y destruirla no lo va a poder lograr.

Hay una gloria, una unción en comenzar algo, pero hay una gloria y una unción mayor en terminarlo.

Es hermoso comenzar algo tomado de la mano de Dios, pero no dejarlo a mitad de camino, porque cuando terminás algo se suelta todo el potencial que Dios había determinado para esa tarea; por eso la gloria es mayor, la felicidad es mayor, el poder es mayor cuando lo terminaste.

Hay muchas personas que no pueden vivir en el poder de Dios porque comienzan pero no terminan. Eclesiastés dice: “ M ejor es el fin de un negocio que el principio”, hay más gloria en completar algo y finalizarlo.

Jesús le manda un mensaje a Herodes diciendo: “ Díganle a esa zorra que echo fuera demonios, sano a la gente hoy y mañana y al tercer día termino mi obra”. Dijo: “Díganle a esa zorra que lo que vine a hacer lo voy a terminar y ni él ni nadie va a poder interrumpir lo que mi Padre dijo que hiciera”.

Quiero decirte que habrá momentos de tu vida donde te vas a tener que parar y decirle a Satanás: “Zorra no vas a evitar que termine lo que comencé, no lo vas a poder prohibir”. Quiero verte guerrero, decile con autoridad que lo que comenzaste en este año lo terminarás.

Tenemos que descubrir qué nos cuesta terminar, por qué dejamos las cosas por la mitad, por ejemplo: dietas, gimnasio, proyectos, una familia, un ayuno, una oración, una adoración que no llegó al final.

Esa actitud es propia de los seres humanos que en el medio del camino nos desanimamos, distraemos, o tal vez terminar significa mucho esfuerzo y por comodidad o por vagancia no lo hacemos.

El éxito se encuentra cuando se persiste en algo mucho tiempo después que otras personas hayan desistido.

Si soy persistente, perseverante, llegaré a tener éxito a pesar de que otros van dejando en el camino.

Una persona sin perseverancia siempre será errante, nunca podrá echar raíces en ningún lado, siempre está comenzando algo pero nunca lograr terminar nada porque se dispersa, se entusiasma en el medio del camino con un montón de otras cosas que no tienen nada que ver con el llamado que Dios le dio.

Hay gente que un día está metida en el negocio de la venta de autos y al mes siguiente está vendiendo ballenitas en el colectivo, y al siguiente en la venta de seguros porque “lo sintió así”, siempre va cambiando.

Cuando ves a alguien así, que hace cosas incoherentes que no van hacia el mismo objetivo, alejate de esa persona porque cualquier cosa que quieras lograr requiere de persistencia y el éxito nunca es abandonar .

Proverbios 22 dice: “ ¿Has visto hombre solícito en su trabajo? Delante de los reyes estará”.

¿Cuántos desean estar delante de quienes tienen poder, de los grandes?

Entonces tenés que ser solícito en tu trabajo, persistente.

La victoria siempre la tendrá el que persevera, el que aguanta un minuto más.

Persistencia es un segundo más.

Los record Gines son un poquito más, es alguien que logró un poquito más que otro. Por ejemplo, alguien que subió un poquito más alto, corrió unos kilómetros más, logró algo más que el otro.

Algunos record venezolanos son por ejemplo:

-La araña más grande está en Venezuela, mide 28 cm, la de 27 cm quedó en segundo nivel.

-La mayor cantidad de coronas de Miss Mundo están en Venezuela, cinco coronas en 1999.

-El salto ángel de 807 metros sigue siendo hoy record.

-La heladería Coromato, en el estado de Meridan, es la que tiene más variedad de sabores (quizás sea sólo un gusto más).

En Perú hicieron una comida típica que batió los records; se utilizaron 2750 kg de alimentos y se lograron 2040 porciones. Todo se hizo en un solo horno requisito para el desafío.

Tiene éxito en la vida es el que hace un poquito más.

En el reino de Dios tiene éxito el que persevera a pesar de las circunstancias difíciles.

Eliseo le dijo al rey que golpeara la tierra y Joas golpeó tres veces. En ese momento Eliseo se enojó porque el rey no estaba entusiasmado con derrotar al enemigo y le dijo: “Si hubieras golpeado cinco o seis veces lo hubieses derrotado por completo, pero ahora no vas a poder hacerlo”.

Hay personas que hace años siguen padeciendo lo mismo porque no han tenido entusiasmo para derrotar, para sacar del camino al enemigo, siempre se quedarán en el comienzo de las cosas.

Si te llenas de Dios para derrotarlo, todo lo que comiences lo terminarás.

Muchos de los mayores fracasados en el mundo son personas que no se dieron cuenta de lo cerca que estaban, a punto de tener éxito cuando desistieron.

Ser perseverante, persistente, es la prueba de que no fuiste derrotado.

Si alguien te dice que fuiste vencido es que no fuiste perseverante, porque si tenés en claro que estás entusiasmado, lleno de Dios y que serás persistente pase lo que pase, por esa actitud ya tenés la victoria a tu favor.

Una vez un hombre se encuentra con un maestro en medio del camino y le pregunta si le podía señalar el camino al éxito y el maestro sin hablar mueve la mano y le muestra un lugar. Contento por la indicación y pensando que lograría el éxito rápidamente pues sólo tenía que acercarse hasta donde el otro le había mostrado, fue corriendo y de pronto escucha un ruido y el hombre se cae. Vuelve a aparecer todo lastimado y sucio y le dice: “Yo le hice caso, fui hasta donde me dijo que estaba el éxito y lo único que logré fue caerme”. Entonces el maestro vuelve a indicarle con la mano sin hablar. El hombre nuevamente corre y vuelve a caer, se levanta arañado, ensangrentado y enojadísimo y le dice: “Me cansé, le pregunté dónde estaba el éxito y Ud. Me señaló y me caí, ahora hábleme, explíqueme” Y el maestro le dijo: “El éxito está ahí, un poquito más allá de la caída”.

Después de vencer a Goliat todo es más fácil, después de haberte tropezado en la vida seguí adelante porque todo será más fácil; seguí persistiendo aunque la situación sea difícil, perseverá en lo que Dios te dijo porque después de la caída está el éxito que tanto estás buscando.

Después de vencer esa enfermedad declarando que Dios ya te sanó, todo va a ser más fácil.

Después de vencer esa deuda económica porque Dios ya pagó en la cruz –aun en lo económico- vas a tener la victoria porque un poquito más allá de la caída está el éxito buscado.

En Apocalipsis 3 dijo Dios: “ Delante de ti he puesto una puerta abierta que nadie puede cerrar”.

“Una puerta abierta” que puso delante y nadie la puede cerrar.

Entrar por esa puerta nos corresponde las veces que queramos y nadie tiene autoridad para prohibirlo.

La puerta es la oportunidad para que pases cuantas veces quieras y depende de vos.

¿Cuántos fuimos a un tenedor libre? Allí te comés la vida, te servís una y otra vez cuantas veces quieras y nadie te dice: “No coma más porque comió mucho”. Y en esta Palabra Dios te dice: “La puerta de la oportunidad está abierta y nadie la puede cerrar, si no entrás es porque no querés, porque no estás siendo perseverante”.

Tu éxito está del otro lado de la puerta.

Dios te dice: “La puerta está abierta, entrá las veces que quieras, depende de tu perseverancia”.

Esa es la puerta que Dios te ha abierto para que te decidas lograr el éxito, Dios no cierra ninguna puerta. Hay gente que dice: “Esa puerta está cerrada, el otro pudo pero yo no puedo porque a mí los caminos se me traban y las puertas se me cierran”. ¡Mentira! Esa es una mentira de Satanás, porque la Palabra de Dios dice: “He puesto una puerta que permanece abierta y nadie –nunca en tu vida- la podrá cerrar”.

Dios te da la oportunidad para ser rico, cuántas veces vas a entrar por esa puerta, porque te ha abierto la puerta de la prosperidad.

Dios te ha abierto la puerta de la salud.

Dios te ha abierto la puerta del amor, ¿cuántas veces vas a entrar? Hasta que encuentres al amor de tu vida.

Dios te ha abierto la puerta para vender, para estudiar, para comprar. ¿Cuántas veces vas a pasar por esa puerta? Eso depende de cuánta persistencia tengas en tu vida, ni siquiera tenés que golpear.

El Señor para entrar a nuestro corazón dice: “Estoy a la puerta y llamo”, y nosotros la tenemos abierta sin necesidad de golpear.

En Apocalipsis 3:10 dice: “ Has guardado mi mandato de ser constante por eso yo te guardaré de la hora de la tentación ”.

La gloria y la unción de ser perseverante es que Dios te guarda de la tentación.

El que es perseverante, que sabe hacia dónde va, Dios lo guarda de la tentación, de distraerse con cualquier otra cosa; pero el que es inconstante Dios no lo puede guardar de la prueba.

El versículo 11 dice: “ Aférrate a lo que tienes para que nadie te quite la corona”.

Se constante, perseverante en cuidar lo que te di, agarrate fuerte a lo que te di porque sino otro se va a llevar tu corona.

¿No has tenido alguna idea pero como no tuviste las agallas para hacerlo vino otro y se llevó la gloria y la corona por lo que se te había ocurrido antes? ¿Y no te da bronca eso? Porque no tuviste las agallas suficientes para hacerlo.

No cuidaste a tu familia y vino alguien y te la sacó, porque no tuviste las agallas para cuidarla y otro se llevó tu corona.

Aferrate a lo que te di , dice Dios.

Aferrate, se perseverante.

Aferrate a los dones que te di y usalos.

Aferrate a la gracia que te di y usala.

Aferrate al perdón y misericordia que te di y usalos cuantas veces lo necesites para que nadie se lleve tu corona.

Que nadie se lleve lo que Dios te dio

Agarrá fuertemente todo lo que Dios te dio: tu familia, tu esposo/a, tus hijos, tu casa, tu auto, los dones, la misericordia, el amor, el perdón, la iglesia Presencia de Dios y agarralo fuerte para que nadie quite tu corona.

Hay ideas dentro de vos, aferrate a ellas y tené agallas para hacerlas porque sino otro las va a descubrir, las va a hacer y se va a llevar tu corona.

No te distraigas, no sueltes el sueño que Dios te dio.

Barac tenía que ir a la batalla pero solo no se atrevía y la fue a buscar a Débora, y ella le dijo: “Vas a ir pero la gloria de la batalla no va a ser tuya sino de una mujer”. Porque no se atrevió aunque era el destinado a tener la gloria de esa batalla.

No pierdas lo que es tuyo

Tal vez alguna vez fuiste traicionado, herido, malinterpretado, o no recibiste el amor suficiente que estabas buscando, o hiciste algo y los demás no te agradecieron; pero no importa, sé perseverante, persistí, seguí pasando por la puerta de la bendición que está abierta para tu vida. Seguí perseverando porque dentro de muy poco vas a encontrar el éxito, eso que Dios te prometió te lo va a dar y mientras seas perseverante Dios te va a librar de la tentación.

Si no decidís levantarte otra vez estás derrotado

El año pasado fuimos a Nueva York, donde habían estado las torres gemelas, y alrededor ya habían reconstruido todos los hoteles que habían sido destruidos y si antes eran de cinco estrellas ahora son de siete. Y en el lugar donde habían estado las torres gemelas habían hecho todo un piso y estaba la foto de la nueva torre que están construyendo. Le pregunté a quien nos acompañaba, si alguien querría volver a vivir en ese lugar después de lo que pasó, y me respondió: “Los americanos pagarán fortunas por vivir acá”. Es gente con mentalidad que sabe levantarse aun de las pruebas más difíciles porque: el que sabe levantarse es el que tiene la victoria, el que persevera es el que logra todos los sueños que Dios le ha dado.

Tenemos que aprender a conquistar la tentación de abandonar

¿Cuántos se levantaron a la mañana y quisieron seguir estando en la cama?

¿Cuántos se fueron al trabajo y a la media hora quisieron irse?

¿Cuántos vinieron a la reunión y a los diez minutos quisieron irse o que terminara?

Todos tenemos la tendencia a abandonar y debemos aprender a sucumbir a la tentación de abandonar: no me va bien, abandono; las cosas no salen como yo quiero, abandono; me siento mal, abandono; no me dieron el apoyo, abandono; no me entienden, abandono.

Aprendé a sucumbir a la tentación de abandonar para levantarte nuevamente y decir: “Señor, no importa lo que me está pasando, voy a seguir persistiendo porque después de la caída está la victoria”. Después de la caída está el éxito.

Gálatas 4: “ Hijitos míos por quienes vuelvo a sufrir dolores de parto hasta que Cristo sea formado en vosotros”.

Pablo habla como una mujer que está a punto de parir, pero no tiene problemas con su hombría, sabia lo que era por eso podía decir que estaba a punto de dar a luz.

Formado quiere decir que cuando Dios toma tu vida la pone en gran forma, te estiliza, te pone músculos, te hace fuerte, es cuando lo interno comienza a verse por fuera. Si estás bien por dentro por fuera relucís, resplandeces, y la formación que Dios hace, se nota. Dios te dice: “ Preparate para el cambio, para la metamorfosis” y mientras sos perseverante Dios te pone en gran forma.

Dios te ama tanto que siempre te va a alentar a seguir

No está todo dicho, estás a mitad de camino, Satanás puede haber empezado una obra en tu vida pero no tiene derecho ni capacidad para terminarla porque el único que puede terminar lo que empezó soy Yo dice el Señor, y lo voy a hacer porque estoy comprometido a terminar todo lo que comencé.

Le dijo a Pedro que se volvió a pescar: “ Pedro me amas, porque si me amas estás a mitad de camino, apacienta mis ovejas”.

Dios te pregunta: “¿Me amás? Estás a mitad de camino, seguí adelante, seguí siendo perseverante porque vas a terminar todo lo que te dije que hicieras”.

Un hombre llamado Taylor tenía una tienda y quebró siete veces, y un día dijo que no podía seguir así y algo tenía que pasar, tenía que irle bien en ese negocio. Se tomó de la mano de Dios y le puso por nombre a la tienda “Lord and Taylor” –El Señor y Taylor-.

Y hoy tiene una de las tiendas más importantes y más grandes de Estados Unidos, donde comprar algo sale carísimo, pero todo el mundo de la alta sociedad va a comprar allí, a la tienda de “Dios y yo”.

Lo que comienzo con Dios lo termino.

Todo lo que comience con Dios lo voy a terminar.

Pensá en las cosas que todavía no terminaste, las que tenés que alcanzar en este año, las que comenzaste y no terminaste, tenelas en tu mente.

Levantá la mano y aferrate fuerte a lo que Dios te dio, hay dones que Dios te dio para que lo que comenzaste lo termines, hay potencial que Dios te dio para que lo que comenzaste lo termines.

En Isaías dijo: “ Mi siervo no se cansará ni desmayará hasta que establezca en la tierra justicia”. Habló de Jesús y dijo que no se cansaría ni desmayaría hasta que establezca justicia en la tierra.

Sostené en la mano lo que Dios te dio y repetí: No me voy a cansar, ni a desmayar, hasta que termine lo que he comenzado.

Por Alejandra Stamateas

Si esta palabra impactó tu corazón, escríbeme tus comentarios a info@presenciadedios.com