Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

DetallitosdelAlma
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 ╠ ▼Gifs e Imágenes▼╠ 
 ◄ Contenido del Grupo ╠ 
 ♥☺·:*¨BIENVENIDOS¨*:·.☺♥ 
 ♥Carta dAmor del Padre♥ 
 †♥Reflexiones Buenas♥† 
 ♥ ACTUALIZATE ♥ 
 ♥*¨♥AMISTAD♥*¨♥ 
 ♥*Regalitos Virtuales*¨♥ 
 ♫☺CUMPLEAÑOS♫☺ 
 § Aprendiendo § 
 REGLAS DEL GRUPO 
 
 
  Herramientas
 
†☼♥REFLEXIONES♥†♥ : EL TE AMA. Y RECLAMANDO SUS PROMESAS
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 3 en el tema 
De: MAGVBIL  (Mensaje original) Enviado: 04/07/2016 12:34





Hola mis amados:

En muchas ocasiones dudamos del amor que siente el Señor hacia nosotros, sucede porque no tenemos fe o porque estamos atravesando situaciones difíciles y creemos que podemos salir adelante sin Su ayuda, pero estamos en error al pensar esto, Él jamás nos va a abandonar o dejar, lo ha prometido y lo cumplirá, por eso solo Él es Fiel y está a nuestro lado en todo momento, que en nuestra mente quede grabado esto para que en cualquier circunstancia recordemos que es nuestro Ayudador y como el Mejor Amigo permanece atento a que lo tengamos en cuenta para asistirnos. 
 
EL TE AMA.‏

Aunque no lo recuerdes,
Por ti dio la vida.
Aunque no lo creas,
Por ti se preocupa.
Aunque no te consideres importante,
Para Él lo eres.
Aunque no lo aceptes,
Te ha perdonado.
Aunque no lo percibas,
Está contigo.
Aunque a ti mismo te condenes,
Jesús ha optado por amarte.
Él nos ve de otra manera.
Es mucho más,
Mucho mayor
Que nuestro corazón.

RECLAMANDO SUS PROMESAS
Por: Charles Stanley.

La Biblia contiene numerosas promesas, que son manifestaciones de la intención de Dios de derramar misericordiosamente Sus bendiciones. Estas promesas se ubican dentro de varias categorías, y el comprender su diferencia nos ayudara a saber cómo reclamar las bendiciones que nuestro Padre Celestial tiene reservadas para nosotros.
Algunas promesas bíblicas son generales, otras son limitadas. Significa que ciertas promesas involucran a una persona específica, a un tiempo o un propósito, y no se aplican a nosotros. En Génesis 18:13 le aseguro a Sara un hijo. No podemos reclamar esa promesa, asumiendo que Dios hará lo mismo por nosotros. Él puede, sin duda, utilizar ese pasaje para comunicar a su espíritu Su deseo de bendecirle de esa manera. Pero debemos evitar apoderarnos de promesas indiscriminadamente, esperando que se cumplan en nosotros.
La Biblia contiene muchas promesas incondicionales, la seguridad de cuyo cumplimiento no exige nada de nuestra parte. Por ejemplo, Dios dijo que El llevara nuestras cargas cada día (Sal. 55), que nunca nos dejará ni desamparara (He. 13.5), y que El vendrá otra vez (Jn. 14:3). También hay muchas promesas condicionales, que contienen una estipulación de "si... entonces" (Prov. 3:5, 6; 1 Jn. 1:9).
Dios se deleita supliendo las necesidades de Sus hijos, y Sus promesas son para beneficio de ellos. Pero también hace una promesa a los no creyentes: cuando una persona que está perdida pide perdón por sus pecados y recibe a Jesús como su Salvador, será salva (Jn. 3:16). Ha reclamado esa promesa? Si no lo ha hecho, no espere más.
Heredando las promesas de Dios
Dios no habría hecho las promesas que hay en la Biblia, si no hubiera querido dar a Sus hijos grandes bendiciones. Pero, no podemos ser presuntuosos y pensar que esos beneficios nos pertenecen automáticamente. Como podemos reclamar las promesas de Dios, con la esperanza de que Él se complacerá en responder nuestra petición?
Hay varias preguntas que debemos hacernos, para verificar la validez de las necesidades que traemos delante de nuestro Dios:
Responde esta promesa a mi necesidad o deseo personal? Al pedirle a Dios que cumpla esta promesa, se lo pido con el espíritu de ser obediente a Su voluntad? ¿Puede Dios cumplir con esta promesa sin que dañe a otra persona, o sin que interfiera con Su voluntad para la vida de alguien? Da testimonio el Espíritu Santo a mi espíritu, de que Dios esta agradado con mi petición? Sera Dios honrado con el cumplimiento de esta promesa? Contradice a la Palabra de Dios mi petición de reclamar esta promesa? Sera eso de provecho para mi vida espiritual?
Habiendo respondido satisfactoriamente estas preguntas, son necesarios tres requisitos para heredar las promesas de Dios. En primer lugar, necesitamos tener fe. Nuestro Padre quiere que confiemos en Él; el Señor recompensa a quienes lo hacen (Gn. 15:6; He. 11:6). Segundo, debemos ser obedientes a todo lo que sabemos que es la voluntad de Dios para nosotros; nunca recibiremos lo mejor de Él si lo desobedecemos adrede. Y tercero, debemos tener paciencia y estar dispuestos a esperar el tiempo perfecto de Dios. Ese tiempo bien vale la pena, considerando las bendiciones que Él anhela darnos.

Importante estas recomendaciones que nos dicen acá para que a partir de este momento las tengamos en cuenta cuando vamos a reclamar las promesas que el Señor nos ha dado en Su Palabra, porque si nuestro deseo es egoísta, de ninguna forma encontraremos respuesta, por ende seamos sabios y tengamos discernimiento para no ofender al Señor y en cambio ver que nos responde con agrado al ver que está alineada a Su perfecta voluntad, esto es lo que debemos recordar para que se haga efectiva en nuestras vidas, así que al aprender cada día, somos más seguidores de Jesús.

Los amo y bendigo en Jesucristo.

MAGNOLIA





MÉTELA EN TU CORAZÓN 

Según un predicador escocés, guardar la palabra en el corazón es meter una cosa buena en un buen lugar para un buen fin. Muchos tienen la Biblia en la cabeza, o en el bolsillo.  Lo que necesitan es tenerla en el corazón. -D.L. Moody-

"En mi corazon he guardado tus dichos, Para no pecar contra ti"

Salmo 119:11

   



 

 


Primer  Anterior  2 a 3 de 3  Siguiente   Último  
Respuesta  Mensaje 2 de 3 en el tema 
De: Naty S Enviado: 05/07/2016 03:30

Respuesta  Mensaje 3 de 3 en el tema 
De: †♥Dona♥† Enviado: 05/07/2020 04:17


 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados