EXTRACTOS DE CARLOS MATCHELAJOVIC
En nosotros también hay una fuerza activa que es muy inflamable, es
decir muy excitable, se precipita y naturalmente se excita con algo y se
tira sobre las cosas, después normalmente se agota rápidamente de
manera desproporcionada, no es inteligente, se gasta inútilmente, es
decir que todo podemos ver como gastamos demasiada energía rápida en las
cosas que hacemos.
Ahora usamos el trabajo práctico para medirnos,
porque naturalmente yo me puedo medir en todos los actos de la vida: al
hablar, al fumar, al caminar, etc. Esto sería como medir que no se está
inflamando el azufre, para llamarlo así. Si tomo estas palabras azufre,
sal incluyendo sus características psicológicas y cósmicas, como dice
Gurdjieff también en su Enseñanza que en las sustancias tomamos en
cuenta las cualidades psicológicas y cósmicas de algo. Por eso esta
Enseñanza no coincide con la ciencia, que solamente toma en cuenta por
la mayor parte todavía las partes físicas de la materia. Por eso hay
esta incongruencia que podemos hablar de un átomo de pan o un átomo de
agua, que es un átomo, la más pequeña cantidad -que para la ciencia no
puede ser, pues se toma en cuenta solamente la parte física del pan, de
la composición.
Regresando a esto, este azufre se llama "agens" en
latín, agens es el actuante, es decir que nosotros esta fuerza está
actuando pero ¿en qué forma?: Explosiva, inflamable, excitable, etc. o
en forma abrupta, pero no en forma continua. Lo que trabaja más en forma
continua es en realidad la fuerza pasiva. Cuando se habla de fuerza
pasiva parece que hay una contradicción; uno piensa que pasivo es
inerte, pero también una fuerza es una fuerza siempre, no es inercia lo
pasivo sino que está en otra forma, los Alquimistas llaman la sal
"Patiens". Patiens es que sufre, que está sufriendo, que está tolerando,
que está aguantando. Esa es otra fuerza que puede ser muy necesaria
para contrarrestar la otra, pero también puede ser que aguantar
demasiado y que sufre demasiado, entonces ya no puede manifestarse como
fuerza, ya llega a manifestarse como resistencia, y si es resistencia no
es vida, sino que es una resistencia inútil, es una resistencia que
detienen la vibración, que se hace demasiado densa.
Hay una
resistencia importante que tiene que existir por ejemplo en la densidad
de la tierra; si no hay tierra densa no no podríamos mantener en el
Universo por la fuerza de gravitación, etc. Pero aquí se trata de una
fuerza que detiene el proceso, que no se mueve. Y después tenemos una
tercera posibilidad, que tiene que ver con el medir. Medir es un acto
ya, de alguna manera más consciente. Si hubiera llegar yo mismo a
hacerme algo más consciente de mis fuerzas, no arrojando mi violencia y
mis disatisfacciones del inconsciente, mis frustraciones de vida,
manifestandolas en forma impaciente. Tampoco viviendo en una sal que se
moja tanto que es un trozo húmedo de algo, que no tiene fuerza y no
tiene manifestaciones; a veces hablamos de salsa, una salsa salada. Y
los Alquimistas hablan también del agua salada, y de agua dulce. Ésa es
agua salada que se forma por algo pesado en mi, alquímicamente hablando.
La tercera posibilidad que existe es el Mercurio. El nombre Mercurio
nos indica que es el planeta de la inteligencia. Mercurio es el regente
del signo Geminis, es decir, es la discriminación.
Sin
discriminación un -no puedo reconocer al otro ni al mundo. Es el planeta
de la inteligencia. Es el aspecto en realidad de Hermes en Grecia y
Hermes tenía el aspecto del Sicopompo, del Guía de Almas, Guía del
Interior. Hermes en este sentido es un Guía. Ellos atribuyen la tercera
fuerza a esta inteligencia y lo llaman por eso Mercurio, que es
ambivalente o inteligente. Nosotros podemos decir: nuestra Tercera
Fuerza, como la llama Gurdjieff equilibrante es inteligente.
Equilibrarse es un acto de inteligencia. De realizar también es un acto
de inteligencia. Y no es una inteligencia lógica, porque la inteligencia
está en muchos niveles. La palabra inteligencia no hay que confundirla
con razón o con intelecto, porque inteligencia está en todos los
niveles. Es decir, la piedra tiene su inteligencia, el insecto tiene su
inteligencia, los animales tienen su inteligencia, las plantas tienen su
inteligencia y así el Hombre también.
Regresando a este Mercurio.
Esta ya es una fuerza que trata de equilibrar entre este de estas que
inútil. Regresemos a la vela, que ustedes pueden constatar tácitamente
en sí si han adivinado bien o no; cual es cual. La Tercera Fuerza en una
debilidad responde a la mecha, no se apaga la llama y no se reduce la
masa de la cera o de la parafina, sino se recorta la mecha y con esto se
regula. Hay también puedo medir mi desgaste o consumo de mi energía o
de mis fuerzas. En realidad necesito un contacto con este Mercurio
inteligente, con este que puede recortar mi mecha en mí cuando hay una
llama demasiado grande por excitación, por violencia, por precipitación,
por una negatividad que quiere explotar, o algo uránico o algo
indebidamente marciano o si hay demasiada salsa, aqua salsa, mantiene la
mecha tan corta que casi ahoga la mecha, entonces la llamita es
pequeña, mi energía sale muy frenada, en forma semi- bloqueada. No da la
luz necesaria y no da la energía que necesito para mi vida. Porque
vivir es vibrar!. Vivir no es trabajar a regañadientes. Si entra
arrastrando un lastre de mi negatividad, y hago las cosas refunfuñando,
entonces no es un trabajar libre, un trabajar con inteligencia, que
produce un cierto equilibrio y eso inmediatamente me va a producir
cierto goce. Ese goce es mi alegría de vivir y este goce me da
esperanza, me da fe y me puede dar amor. Pero en este caso debe ser algo
consciente, no solamente del cuerpo, no algo enteramente de las
emociones, sino algo que conscientemente está allí, midiendo mi energía.
Como todo es energía o vibración, Gurdjieff llama todo el Universo es
materialidad y esta materialidad es vibración, una vibración muy densa,
muy lenta; una vibración muy fina, muy sutil, muy alta, que sería para
llamarlo así la Vibración de Dios, la Vibración del Absoluto, el cual no
conocemos, la Vibración Galáctica, la vibración al otro lado del reino
mineral como algo muy denso. Pero todo vibra. También puedo preguntarme.
¿Cómo vibro mientras estoy trabajando? Estoy definiendo mi lugar en el
Universo, como hemos dicho en otras oportunidades. Si mi vibración es
muy densa, mi lugar es en la zona densa del Universo. Si trabajo con
vibración más fina, entonces mi lugar es correspondiente a la región más
fina del Universo. Tal vez se introduce en nuestra vida una idea muy
importante: hacerse más consciente de las fuerzas y de las energías que
trabajan en mi y no tambalear por la vida en forma tan inconsciente que
arrojo mis energías sin darme cuenta, cómo. ¡Medir mis energías, medir
mi vibración!