El Cuidado de tu alma Mateo 16: 26 Porque ¿qué aprovechará al hombre, si ganare todo el mundo, y perdiere su alma? ¿O qué recompensa dará el hombre por su alma? Lamentablemente hoy día vivimos en un mundo materialista, donde las personas valen por lo que tienen y no por lo que son, donde la visión principal de las personas no es ser espiritual, sino ricos. No se en que momento esta corriente entró en la iglesia, estamos claros de que Dios quiere prosperarnos y que esa es Su voluntad. El hombre fue creado por Dios con un propósito, no se le dio la autoridad para decidir por su alma, pero si se le dio la autoridad de decidir quien habita en ella, la diferencia entre un ser humano y un ser vivo es Cristo en su corazón, no lo es su intelecto o su carne, es un alma llena de Jesús lo que hace la diferencia; tenemos que entender que la única luz que tiene esta sociedad es la iglesia y si no brillamos para el mundo, quien podrá alumbrarlos entonces, el mundo carece de luz, por eso Jesús se refirió a nosotros como la luz. Actualmente la iglesia no está preocupada por brillar, sino por hacer riquezas, hay que eliminar esta prioridad en las personas, la bendición de Dios es la que enriquece y no añade tristeza con ella, la iglesia ha descuidado lo más valioso que tiene un ser humano, lo cual es su alma. No importa si te ganas el mundo si a la final pierdes tu alma, nadie podrá pagar el rescate por ella, sólo Aquel que murió y resucitó por ti en la cruz. El grave problema que existe hoy es que las personas están menospreciando su alma, apreciando más su carne y la vida que viven en esta tierra. La vida en esta tierra es un punto en una larga línea que se llama eternidad, ¿vas a comprometer tu línea eterna por un punto?, serás capas de cambiar la eternidad por un placer temporal de esta vida. Tu carro por muy bonito que sea hoy, un dia será solo chatarra, pero tú alma tiene el poder de ser eterna en el cielo o en el infierno, es mejor que empecemos a cuidar de nuestra alma. Lo más valioso que tiene un hombre es su alma, y si esta tiene a Cristo es un hombre de valor, por lo demás vives como todos los hombres respirando y existiendo, pero Jesús dijo; Yo he venido para que tengan vida y vida en abundancia. Las personas creen que al atender su alma desatienden las otras cosas, pero es un gran error porque mientras tu alma esté más saludable, tus cosas estarán mucho mejor y protegidas por Dios, tu alma es lo que al final puede tener vida eterna y eso es lo más importante, no existe ningún problema de que tengas cosas, el problema es cuando las cosas te tienen a ti. Tu vida es un suspiro, que triste seria cambiar la eternidad de tu vida por un instante, que es lo que dura tú vida aquí en la tierra. Que provecho hay para el hombre si ganase todo el mundo con su riqueza y gloria, ni las siete maravillas del mundo pueden pagar el precio de tu alma, pero viene el diablo a convencerte de que atiendas al mundo y olvides tu alma, eso no es justo, porque para que hoy tu alma esté salva, costó el precio más alto, la sangre y la vida del Hijo de Dios, eso fue lo único que pudo satisfacer la justicia del Padre y por esa razón tu cuenta esta pagada, cada vez que el Padre ve en la tierra, no nos ve a nosotros sino a su hijo que le dice: Padre perdónalos porque ellos no saben lo que hacen. Eso fue lo que costó la salvación para Jesús, ahora como no podremos vivir para Aquel que limpió nuestros pecados, porque Él pagó ese precio. Es preferible no tener carro, casa o dinero pero que tu alma sea salva, tu alma vale mucho más que todo eso. La salvación si puedes perderla, la Biblia dice; como entonces descuidaremos una salvación tan grande, no es que Dios te la quite, es que tú la pierdes. No existen dos salvaciones, hay una salvación y esa es la que tenemos que cuidar mientras vivamos en esta tierra. Si tu caes o pecas la gracia de Dios es suficiente para levantarte, pero no le des la espalda a Dios, la sangre de Cristo es poderosa para limpiarte de cualquier pecado, pero lo que no tolera el cielo es que alguien le de la espalda a Dios y es ahí cuando el diablo hace lo que quiere contigo, el diablo no puede hacer lo que quiere con alguien que viene a la iglesia. Tu alma vale mucho y es necesario que sigas peleando e intentando fe en cada servicio de la iglesia, el problema es que afuera de la iglesia es mas difícil ser salvo, si yo quiero apagar una braza la aparto del fuego, así pasa con el creyente y el fuego es la iglesia. Ocurre algo cuando vienes a la iglesia; tú alma comienza arder, es el principio de los santos de la congregación en luz, porque donde está tu corazón está tu tesoro. Las personas que saben cuanto vale realmente un alma se la pasan en los supermercados, en los colegios, en las universidades, en cualquier lugar hablando de Aquel que puede salvar el alma del hombre; esas son personas que valen y van a ir al cielo. Somos embajadores en nombre de Cristo, como si Dios rogase por medio de nosotros. No importa que haya que rogarle a un alma para que reciba de Cristo como su salvador, porque no sabemos de qué estamos librando a esa alma y como usted esta ganando ahorros en el cielo. Un alma vale tanto que tú debes rogar para que sea salva, lo que ocurre es que se tiene el valor invertido de las cosas, lo material es más importantes que un alma, pero el alma vale mas que las demás cosas. Todas las cosas tienen un precio según su valor, tú le das más valor aquello por lo cual tú pagas más, lo que mas cuesta es lo que mas vale. El carro que tienes lo hizo alguien, la casa en la que habitas la construyo una persona, pero tu alma costo la sangre y la vida del hijo de Dios, mi salvación costo más que cualquier otra cosa en la tierra y como mi alma vale más, la cuido con mucho cuidado. 1 pedro 1: 18-19Sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación. La sangre que más precio tiene es la sangre pura, limpia y sin pecado de un cordero santo, por eso el diablo trata de convencerte de que lo más valioso es el carro, la casa y son tus cosas, porque él sabe que si tu atiendes estas cosas descuidas tu almas, el diablo es el príncipe de este mundo pero Jesús debe ser el Rey de tú alma, si no eres feliz con Jesús, no aceptaste realmente a Cristo en tu corazón sino una religión, porque el que recibe de Él es feliz y un espíritu con Él es. Pastor Javier Bertucci