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General: España y las chabolas .... crece la miseria ...
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Respuesta  Mensaje 1 de 5 en el tema 
De: Ruben1919  (Mensaje original) Enviado: 19/11/2010 21:53

Un millón y medio de familias viven en España en chabolas

 
 
Un millón y medio de familias viven en España en chabolas
Fundación Gaztelan
- Sara


En el día de los sin techo , las ong cifran en 30.000 las personas sin hogar
Un tercio de quienes viven en estas condiciones son abstemios y nunca han consumido drogas

Un millón y medio de familias viven en infraviviendas tipo chabolas y más de 30.000 personas no tienen hogar en España, dos realidades denunciadas ayer por las organizaciones Cáritas Española, FACIAM y FEANTSA con motivo de la celebración este domingo del Día de los Sin Techo.

Cáritas, la Federación Europea de Asociaciones de Centros para Integración y Ayuda a Marginados (FACIAM) y la Federación Europea de Asociaciones Nacionales que trabajan con personas sin hogar (FEANTSA) presentaron ayer la conmemoración de la jornada de los Sin Techo que se celebrará, anunciaron, bajo el lema No Tener Hogar Significa Mucho Más Que Estar Sin Techo .

"Dicho día queremos llamar la atención sobre el profundo valor humanizador del hogar como espacio de crecimiento y de autonomía personal insustituible para todos los ciudadanos, pero del que no pueden disfrutar las personas que viven en la calle", opinó Julia Almansa, vicepresidenta de FACIAM, en una conferencia de prensa celebrada para presentar la campaña de sensibilización.

Las tres organizaciones denunciaron ayer el "difícil acceso como derecho social, de cualquier ser humano, a una vivienda digna y adecuada, que sufren con especial dramatismo las personas sin hogar".

un 82,7% de varones "La vivienda es el primer paso para construir un hogar, para tejer vínculos y redes que están al lado de cada ser humano, para caminar en la recuperación de la identidad", ha apuntado Sonia Olea, de Cáritas Española. El 82,7% de las personas sin hogar son varones, su edad media es de unos 38 años y sus ingresos medios son de 302 euros al mes, recordó Olea.

Además, un tercio de las personas sin hogar son abstemias y nunca han consumido drogas, y la mitad de la población sin hogar busca trabajo. Cáritas, FACIAM y FEANTSA recuerdan que prácticamente no existen políticas de vivienda para personas sin hogar y el acceso a las de protección pública se hace prácticamente "inalcanzable" al exigirse requisitos legales como ingresos mínimos o empadronamiento. Las citadas asociaciones llamaron la atención sobre la necesidad de coordinación entre los servicios sociales autonómicos y locales en lo que atañe a la atención y seguimiento de personas sin hogar, sobre todo en lo que se refiere a los temas de salud.

Para reflejar dicha situación, Olea expuso que la previsión para el año 2011 es que el porcentaje de viviendas vacías (13,8%) en España sea superior al de viviendas en alquiler (9%).

Fuente: Diario de Noticias



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Respuesta  Mensaje 2 de 5 en el tema 
De: Ruben1919 Enviado: 20/11/2010 14:55
  Ramón Trujillo
 
 
 


Existe la creencia de que mayores impuestos provocan mayor desempleo y empeoran las condiciones de vida. Tal creencia está implícita en la reciente respuesta del presidente de la Confederación Canaria de Empresarios, Sebastián Grisaleña, a la propuesta sindical de incrementar la presión fiscal en Canarias. Grisaleña afirmó que los dirigentes sindicales “no están en la época que nos ha tocado vivir y no se han enterado de que hay un 30% de paro” en el Archipiélago.

En realidad, si la baja presión fiscal fuera un motor de creación de empleo, España, en lugar de tener la mayor tasa de desempleo de la Unión Europea (UE), sería uno de los estados con menos paro. Según Eurostat, en 2008, los ingresos fiscales del Estado representaron el 33.9% del PIB, frente al 40.5% de media en la UE. Por su parte, la presión fiscal en Canarias representa unos nueve puntos menos en el PIB regional que la media estatal.

Sin embargo, Canarias, con menos presión fiscal que el Estado, tiene mayor tasa de desempleo y España, con menos presión fiscal que la UE, soporta mayor nivel de paro. Paralelamente, si, por ejemplo, seleccionamos los seis estados de la UE con menor presión fiscal veremos que, asimismo, son los seis estados con mayor tasa de desempleo.

Los datos de Eurostat, para 2008, muestran que los estados en que los ingresos fiscales representaron menor porcentaje del PIB son Letonia (29.3%), Eslovaquia (29.3%), Lituania (30.6%), Irlanda (30.8%), Estonia (32.3%) y España (33.9%). Pues bien, en septiembre de 2010, son esos seis estados los que encabezan las tasas de paro en la UE. Sólo que lo hacen siguiendo otro orden: España (20.8%), Letonia (19.4%), Estonia (18.6%), Lituania (18.2%), Eslovaquia (14.7%) e Irlanda (14.1%). Todos ellos superan ampliamente la tasa europea de desempleo del 9.6%.

Por el contrario, de los seis estados de la UE con mayor presión fiscal, sólo uno supera la tasa europea de desempleo. Los estados con mayor presión fiscal son Dinamarca (49%), Suecia (47.9%), Bélgica (46.5%), Francia (44.6%), Austria (44.4%) y Finlandia (43.2%). Sus tasas de desempleo, en orden descendente, son las siguientes: Francia (10%), Bélgica (8.7%), Finlandia (8.3%), Suecia (8.2%), Dinamarca (7%) y Austria (4.5%).

Asimismo, podemos señalar que cinco de los seis estados con mayor presión fiscal superan la media europea de población adulta que trabaja en sectores del estado del bienestar (sanidad, educación, apoyo a las familias). Y que cinco de los seis estados con menor presión fiscal no llegan a esa media. Es decir, los que tienen más presión fiscal tienen a más gente trabajando por el bienestar de sus conciudadanos y menos desempleo.

Si los que más tienen pagan más impuestos, mejoran el bienestar y la cantidad de empleo público y, además, al incrementarse la demanda, aumenta el empleo privado. Repartir es más importante que crecer. Y crecer más repartiendo menos mejora la calidad de vida menos que crecer menos repartiendo más.

En India, el estado de Kerala, con 32 millones de habitantes, ha sido gobernado por la izquierda desde 1957. En 1990, su PIB por habitante de 1.802 dólares era inferior a los 2.223 dólares de India. Pero su fiscalidad progresiva, su protección a los trabajadores y su gasto social han hecho que la tasa de mortalidad infantil de Kerala sea cinco veces inferior a la del resto del país, la esperanza de vida cinco años superior, la tasa de pobreza más de cinco veces menor que el promedio nacional y la alfabetización muy superior.

La experiencia internacional muestra que quienes reparten mejor viven mejor. Y es que la redistribución de la riqueza es la mejor expresión de la justicia social. Y una fiscalidad más progresiva y más justa nos demostraría también a los canarios que podemos vivir con mucho menos desempleo, menos pobreza y bastante más calidad de vida.

Ramón Trujillo es coordinador de Izquierda Unida en Tenerife.

España
Impuestos y desempleo
 
 

Respuesta  Mensaje 3 de 5 en el tema 
De: Ruben1919 Enviado: 20/11/2010 15:20
 
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La crisis económica puede durar hasta 2012 y convertirse en un problema social | Economía

La crisis económica puede durar hasta 2012 y convertirse en un problema social
Los precios de la vivienda seguirán bajando y aún no han tocado suelo
24/03/2009 - 13:27
- JOSÉ JIMÉNEZ

La crisis de la economía española puede trascender el ámbito económico y derivar en un problema social, extendiendo su duración hasta las próximas elecciones generales que se celebrarán en 2012, según ha indicado hoy el catedrático de Política Económica de la Universidad Complutense de Madrid y ex ministro de Comercio y Turismo, Luis Gámir.

En la presentación del libro "La crisis económica en España: La Vivienda y la Innovación", editado por el Instituto de Estudios Económicos, el académico ha indicado que la crisis en España tiene un fuerte componente social, dados los elevados niveles de paro, y puede desembocar en una crisis política que se extienda hasta las próximas elecciones.

En su opinión, la actual crisis comenzó siendo económica, lo que ha colocado a España en la recesión y en una potencial deflación. A este respecto, Gámir ha recordado que el Gobierno perdió credibilidad cuando negó la existencia de la crisis y el coste de esta decisión fue elevado, ya que se tradujo en pérdida de credibilidad de los paquetes de política económica.

Respecto al incremento de los precios de la vivienda, Gámir ha recordado que desde 1996 a 2004 se produjo un fuerte tirón de la demanda que llevó a un incremento de precios del 150%, según sus propias cifras. Las causas que motivaron esa subida son, a su juicio, las mismas que ha provocado ahora la caída de los precios de la vivienda.

Así, el profesor destaca la existencia de un ‘shock’ o brusco descenso de la demanda a partir de 2006 motivado por la dificultad de obtener créditos, los altos tipos de interés, y por la incipiente desaceleración de la economía, que cambió las expectativas de los potenciales compradores respecto a la posibilidad de perder su empleo. “Somos claramente líderes en paro, y las perspectivas son de ir a peor, lo que no favorece el endeudamiento a largo plazo”, sentencia el experto.

A su juicio, los precios de la vivienda seguirán bajando y aún no han tocado suelo, sobre todo por el lado de la demanda, porque hay un stock muy grande de casas sin vender y no parece que la demanda esté dando muestras de recuperación. “Es un mercado muy especial y tarda tiempo en ajustarse”, puntualiza Gámir.


Como el problema es de baja demanda, el catedrático considera que “es coherente la propuesta que ha aparecido en el debate político sobre el incremento de la deducción por vivienda habitual del 15% al 25%”. Es una medida adecuada pero no suficiente, dada la fuerza de la crisis financiera, la carencia de créditos, la recesión y el paro.


Respecto a las políticas de fomento del alquiler, Gámir ha apuntado que la Sociedad Estatal creada por el Gobierno para fomentarlo ha sido un fracaso y cree necesario que se utilicen fórmulas como el fomento del alquiler en Viviendas de Protección Oficial, ya que de este modo, la vivienda se puede recolocar en el mercado cuando, pasado un tiempo, el beneficiario hubiera aumentado su renta.


En el acto también intervino el director general del Instituto de Estudios Económicos, Juan Iranzo, para quien la salida de la crisis no puede venir por el lado de la demanda, ya que la economía española “tiene un déficit de ahorro”. A su modo de ver, es necesario aumentar las exportaciones, defender la inversión productiva, aumentar la competitividad y mejorar el mercado laboral.
__________________

Respuesta  Mensaje 4 de 5 en el tema 
De: Ruben1919 Enviado: 21/11/2010 17:26

' Españolito que vienes
  al mundo te guarde Dios
  Una de las dos Españas 
  ha de helarte el corazón'

 Antonio Machado

 

Respuesta  Mensaje 5 de 5 en el tema 
De: IGNACIOAL Enviado: 21/11/2010 17:50
MISERIA EN COLOMBIA http://www.munduatamusika.com/cronica48/miseria.jpg
 
 
 
http://www.osterrieth.be/obelco/enfantsdesrues.jpg
 
 
http://colombia.indymedia.org/uploads/2006/03/miseria.jpg   http://hcalvospina.free.fr/local/cache-vignettes/L379xH249/miseria_violencia-3fd3e.jpg
 
 
http://impactocna.com/wp-content/uploads/2010/04/miseria.jpg
 
 

¿Por qué Colombia no sale del club de los pobres?

Por María Teresa Ronderos
Esta foto de Buenaventura sintetiza la paradoja colombiana. El conflicto armado es una de las razones para que a pesar de la bonanza económica de los últimos años no se haya logrado reducir la pobreza al ritmo que lo hicieron otros países del continente
Esta foto de Buenaventura sintetiza la paradoja colombiana. El conflicto armado es una de las razones para que a pesar de la bonanza económica de los últimos años no se haya logrado reducir la pobreza al ritmo que lo hicieron otros países del continente
 
INFORME Mientras los demás países de América Latina aprovecharon la bonanza económica para sacar a millones de sus ciudadanos de la pobreza, Colombia quedó rezagada y aún tiene escandalosos índices de miseria y desigualdad. Será el desafío principal del próximo Presidente.
Sábado 13 Marzo 2010

En años prósperos del nuevo siglo, entre 2003 y 2008, Colombia creció como hace tiempo no se veía: en promedio el 5,5 por ciento del PIB cada año, y superó en desempeño a Brasil, Chile y México. Sin embargo, mientras para varios de los países de América Latina este tiempo de vacas gordas significó que muchos de sus habitantes salieron de la pobreza y la indigencia y consiguieron un empleo decente, en Colombia, el florecimiento de la confianza inversionista no nos sacó del club de los pobres.

Así, una nación enorme como Brasil pudo en esos años rescatar de la pobreza a 40 millones de personas. Y Perú, donde uno de cada cuatro habitantes pasaba hambre en 2001, consiguió reducir la indigencia a la mitad. Incluso Venezuela, a pesar de la polarización política, redujo sus pobres y sus indigentes a la mitad y Ecuador bajó los primeros en 10 por ciento.

Colombia, en cambio, en materia social mejoró a cuentagotas. Bajó la pobreza de 51 a 46 por ciento, sólo 5 puntos. Y entre los pobres, el número de indigentes volvió a quedar casi como estaba en 2002, al borde de la escandalosa cifra de 18 por ciento. Esto quiere decir que casi uno de cada cinco colombianos no tiene ingresos suficientes para cubrir sus necesidades calóricas básicas, que es la manera técnica de decir que sufren de hambre.

Otro ingrediente se añade a este triste panorama. El boom económico abrió más la brecha entre ricos y pobres en Colombia, según lo estableció la Cepal. Al comenzar el siglo XXI Colombia estaba entre los países con altos índices de desigualdad, junto con Perú, y Brasil era casi el peor de América Latina. Para 2008, Perú había bajado a la categoría media y Brasil se había salido de la lista de desigualdad extrema. Colombia, no obstante, entró a la lista de los muy desiguales.

 
¿Qué nos pasa?
¿Por qué Colombia no pudo aprovechar los años de bonanza para aliviar la pobreza? ¿Por qué este país con instituciones públicas mucho más sofisticadas que las de Guatemala, más urbanizado que Bolivia y con un sector empresarial más pujante que el de República Dominicana, está con ellos en la cola de América Latina, en materia de pobreza? ¿Por qué después de haber más que duplicado su gasto público social (del 5,9 por ciento del PIB en 1990 al 12,6 por ciento en 2008) no consigue que esto se traduzca en menos pobres?

Una primera explicación es que un largo y degradado conflicto armado, como ninguno otro en la región, ha pauperizado a la población. Según encontró la Segunda Encuesta Nacional de Verificación de los Derechos de la Población Desplazada, 760.000 familias campesinas fueron forzadas a huir para salvar sus vidas entre 1998 y 2008, dejando atrás, por abandono o por despojo, 5,5 millones de hectáreas de tierra.

Si antes del éxodo la mitad de esas familias eran pobres y una tercera parte tenían ingresos de miseria, después, el 97 por ciento quedó en la pobreza y el 80 por ciento en la indigencia. Esa catástrofe social perdura hasta hoy. Según el Dane, la pobreza entre los habitantes del campo está por encima del 65 por ciento, lejos del promedio nacional de 46 por ciento. Y la indigencia urbana también aumentó en el último año.

La desigualdad, además, se profundizó con el conflicto de la última década. Según investigó Ana María Ibáñez, del Cede (Universidad de los Andes), desde 2005 el índice Gini de concentración de la propiedad aumentó hasta 0,875, el más alto de la región después del de Paraguay, un país mucho más pequeño. "Los de por sí pocos propietarios de la tierra compraron aún más predios y la propiedad se concentró a estos extremos", explica Ibáñez.

La guerra también nos afectó de otra manera. En la última década el país se concentró en una prioridad, reducir la violencia. A eso le apostó el gobierno de Álvaro Uribe buena parte de los recursos y de su energía institucional. Por eso, a pesar de haber aumentado tanto el gasto social, éste sigue estando por debajo de países como Brasil o Costa Rica.

El otro gran problema es la corrupción. Se han desviado miles de millones de pesos de gasto público social a políticos inescrupulosos o a los actores armados, como se hizo evidente en el escándalo de la para-política. Según el Índice de Transparencia Internacional que mide la percepción de corrupción del sector público en 180 países, Colombia viene empeorando en los últimos años, y en 2009 bajó del puesto 70 al 75.

Pero además hubo políticas públicas que impidieron que Colombia aprovechara la bonanza para mejorar de manera más radical la calidad de vida.

 
¿Política contra-pobres?
Es una verdad de Perogrullo que nadie puede combatir la pobreza si no produce más. Pero aumentar el PIB no es suficiente. Es necesario crear empleos formales que son los que llevan a la gente a salir de la pobreza. Esa es la política social más eficaz.

Este gobierno arrancó con un panorama bastante difícil: la economía apenas creciendo, un 17 por ciento de desempleo y una suma de viejas políticas que hicieron el empleo muy costoso. Crecimos, pero no logramos bajar el desempleo a menos de dos dígitos y se crearon muchos más empleos informales que formales. ¿Por qué?

El consenso entre los economistas es que si generar un empleo formal es de por sí costoso, la política económica reciente desincentivó aún más la creación de nuevos puestos de trabajo.

Una empresa debe girar casi 60 por ciento más sobre cada salario que le paga al trabajador, en salud, pensión y parafiscales. Además, después de cierto rango, al empleado le hacen retención en la fuente. Estos costos no salariales son hoy los más altos de América Latina.

La política de Uribe de confianza inversionista consistió en otorgarles exenciones a las empresas para que se animaran a invertir y a crecer y, la más protuberante, otorgó una deducción de impuestos del 40 por ciento de la inversión de capital productivo. Trabajo caro y capital barato hicieron que los empresarios reemplazaran a muchos de sus empleados por máquinas. Es decir, cambiaron la señora de los tintos por una cafetera, y al señor del parqueadero por una palanca automática.

Dos importantes economistas de corte neoliberal, el colombiano Rodrigo Botero y el argentino Domingo Cavallo, llegaron a la misma conclusión en un documento de febrero pasado: combinar impuestos a la nómina y exenciones tributarias al uso del capital crea una estructura desfavorable para la generación de empleo formal.

El desestímulo al empleo formal también actuó frente las personas con menores ingresos. La masificación del régimen subsidiado de salud, y de programas como Familias en Acción y Familias Guardabosques les han dado a muchos trabajadores informales de los niveles 1 y 2 de Sisbén un incentivo perfecto para no formalizar su trabajo. ¿Para qué querría un trabajador informal tener una vinculación con un salario mínimo, que le obliga a cotizar salud y pensión cuando puede obtener salud subsidiada y además recibir ayudas en efectivo?.

Así, un pequeño empresario colombiano preferirá no vincular a sus empleados porque le sale más barata la nómina y ellos consiguen subsidios del gobierno. Según la senadora Cecilia López, hay tres millones de trabajadores cuyos patrones no pagan la seguridad social. "Así un sistema de salud diseñado para tener más trabajadores cotizando, y menos subsidiados, terminó al revés y se volvió insostenible", le dijo a SEMANA.

Olga Lucía Acosta, experta en políticas sociales de la Cepal en Bogotá, explica que los gobiernos colombianos han sido más amigos de dejarle la creación de empleo al mercado y les ha faltado ser proactivos en impulsar políticas audaces de empleo, como lo ha hecho Brasil, por ejemplo.

En Colombia, sólo hasta hace poco se empezó a desarrollar una tímida política de empleo y generación de ingresos, que no tiene el peso que debería en un país con un desempleo que se niega tercamente a bajar y un alto empleo informal.


Familias en Acción, bueno pero no suficiente
Si de alcanzar al mayor número de personas con servicios sociales se trata, en general, el gobierno Uribe fue exitoso: desde 2002 se ampliaron los cupos en educación, y en salud el brinco fue gigante: de 50 por ciento de la población cubierta en 2002, a 89 por ciento hoy. Pero se creció tan rápido que se puso el sistema en riesgo, como lo supo el país con la emergencia social. En cuanto a brindarles protección a los más marginados, Colombia ha seguido el patrón de otros gobiernos latinoamericanos, darle dinero a la gente con algunas condiciones (que asistan a controles médicos, manden los hijos a la escuela, etcétera). En Brasil es la Bolsa-Familia, en México el programa Oportunidades, o en Ecuador los de Desarrollo Humano. En 2009 había 101 millones de latinoamericanos pobres en estos programas de pagos condicionados.

En Colombia, Familias en Acción es un programa masivo de tres billones de pesos anuales que atiende a 2,9 millones de familias. Además el gobierno creó la Red Juntos, por la cual 7.100 cogestores acompañan a 1.060.000 familias pobres para que accedan más fácilmente a los servicios de 14 entidades estatales. Todo este esfuerzo, dijo Diego Molano, director de Acción Social a SEMANA, ha contribuido en que el impacto de la crisis de 2008-2009 sobre los más pobres sea menor que el de la anterior crisis.

Sin embargo, según Jorge Núñez, experto de la Misión de Pobreza, de todos modos los más ricos del país se están quedando con el 30 por ciento del gasto público social. La principal razón es porque los de mayores ingresos reciben el 86 por ciento de las pensiones y a los de menores sólo les toca el 0,1 por ciento. "No tiene mucho sentido hacer un gran esfuerzo de gasto social, si éste no llega en forma prioritaria a los más pobres", dijo a SEMANA.

El próximo Presidente colombiano tiene que diseñar una política audaz si quiere sacar a Colombia del atraso social en que se encuentra. Bajar la pobreza a cifras de un dígito como lo hicieron Chile o Brasil y salirse definitivamente de la vergonzosa lista de los países más desiguales del mundo, requiere mucho más que eficaces programas que le alivian la miseria a la gente, pero que poco ayudan a sacarla para siempre de la pobreza. Se trata de construir sobre lo ya hecho, y hacer de la generación de empleo formal y la redistribución de la riqueza un propósito nacional.
 
 
AREGLEN SUS PROBLEMAS Y LUEGO HABLAN DE LOS DE LOS DEMAS
RUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUU
 


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