"Pero sea vuestro hablar: Sí, sí; no, no; porque lo que es más que esto, de mal procede" (Mateo 5:37).
Hablemos de responsabilidad, de seriedad, de compromiso, cumplimiento y deber. Deber es todo aquello a que una persona esta obligada por la moral, la religión o la conciencia. El responsable es puntual, respeta los acuerdos, es firme en obras y en palabras, es reflexivo piensa para actuar y asume las consecuencias de sus actos. Es cumplido.
La responsabilidad es indispensable para convivir bien. Somos responsables cuando cumplimos y cuándo respetamos los derechos ajenos.
Un pequeño carro deportivo estaba estacionado en un centro comercial. Un joven de chaqueta blanca –probablemente un médico residente del hospital cercano- se metió en el carro, y rápidamente echó reversa, golpeando levemente la defensa trasera de otro automóvil.
Luego de examinar el daño, garrapateó una breve nota en una tarjeta, la pegó en la "herida" con tela adhesiva y se marchó.
Un curioso, fue a mirar, y esto fue lo que leyó: "Lamento mucho esto. Tome dos aspirinas y llámame mañana, por la mañana". Al pie de la nota, estaba su nombre y número telefónico.
Eso es responsabilidad lo cual es derivado de responder. Es la obligación de satisfacer algún cargo o compromiso moral; es ser serio y el serio respeta los compromisos, es firme en obras y en palabras, no huye del deber ni del cumplimiento.
El precio de la grandeza es la seriedad. Le preguntaron a una destacada actriz cómo hacia para sobresalir y dijo que tenía esta consigna: Actuar con amor, pasión y seriedad. Estupenda fórmula para superar obstáculos y dar lo mejor de sí en cualquier campo:Trabajar con amorTrabajar con pasiónTrabajar con seriedad
En esta vida todos podemos llegar a la cima con el empuje del amor, la pasión y la seriedad. No necesitamos decir siempre todo lo que sabemos, pero lo que decimos debe ser absolutamente verdad. Un cristiano no debe necesitar jurar, sino sólo decir "sí" o "no" y ser creído, como un pagano bajo juramento.
Se cuenta que en 1341 fue coronado poeta laureado en Roma el insigne Petrarca, erudito, historiador, arqueólogo, rebuscador incasable de manuscritos antiguos.
Por algún tiempo Petrarca vivió en el hogar del cardenal Colonna.
Habiendo ocurrido una querella en la casa, del cardenal, éste reunió a la familia y demás moradores, haciéndoles jurar que dirían la verdad. Cuando correspondió el turno a Petrarca, el cardenal, reconociendo el carácter y la seriedad de este hombre, le dijo: "en cuento a ti, Petrarca, tu palabra es suficiente.
Este es un ejemplo digno de imitar: en una y otra situación sea usted el mismo: firme en su palabra, seguro en su pensamiento, honesto en sus actos, sereno en la confianza. Sea responsable. Cumpla lo que promete. No huya de las responsabilidades. Que ninguna consideración de egoísmo o de venganza afecte la inviolabilidad de su palabra. Haga pocas promesas, pero cuando haga alguna, cúmplala. La palabra es el hombre y, "a lo hecho, pecho".
Asuma sus deberes espirituales. Quien tiene un concepto exacto de sus relaciones para con Dios, es quien mejor puede cumplir sus deberes para con sus semejantes. Medite en sus responsabilidades ante Dios y el prójimo. De usted dependen las personas que le rodean en la familia, en el trabajo, en la sociedad. Realice su trabajo con amor, produciendo lo más que pueda y lo que le permitan sus fuerzas. En sus manos está una parte del futuro de la humanidad.
En el engranaje de esta maquinaria mística que es la iglesia usted puede que sea una pieza pequeña, pero necesaria. Por su culpa se pueden estropear piezas importantes y quizá toda la maquinaria. En la hora de la prueba: ¡reajuste, engrase! Muchas piezas ( personas), dependen de usted.
es actuar con honestidad y cuidado, es ser fiel a lo pactado, es ser justo e íntegro. es dinamizar la labor con la fuerza del entusiasmo, es entregarse por entero sin hacer concesiones a la mediocridad. es querer lo que se hace, poner el corazón tanto en las tareas grandes como en las pequeñas. El deber nos obliga a hacer las cosas bien, pero el amor nos lleva a hacerlas más hermosas.
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