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De: JoKeR-MaN (Mensaje original) |
Enviado: 24/02/2011 23:51 |
[[ SALÓN DEL GRAN MAESTRO ]]
Tras un largo camino lleno de dificultades y retos, has llegado a la cámara del patriarca, donde reside la principal figura entre los 88 santos al servicio de Athena. Este hombre ha orquestado la traición del santuario a la diosa Athena, y tu deber es derrotarlo por el bien del mundo. Sin embargo, el patriarca no es quién aparenta ser y un misterio encierra tras su diabólica máscara. ¿Vencerás al malvado Gran Maestro y restauraras el orden en el santuario? ¡La batalla por las 12 casas se decidirá aquí!
SSV
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**Al fin después de tanto tiempo June logra llegar hasta la cámara del Patriarca, pero parece haber rastros de batalla en el mismo, lo que sorprende a la amazona de bronce, -¿Pero será que...? ¡Seiya!, ¡No puede ser Seiya!, ¡Seiya no esta!- exclama con desesperación y angustia al no percibir ni el cosmos, ni la figura del santo de Pegaso, una sensación de muerte y vacio recorre por el cuerpo y mente de la muchacha, como si se tratase de su propia sentencia de muerte, pero eso no la detendrá no, hasta el final seguirá los ideales del caballero de Cefeo quien fue su maestro, decidida y dispuesta atacar, junto con un grito de guerra ingresa al recinto azotando el látigo en finas ondas entrelazadas con la velocidad del sonido, como si se tratase de una amenaza, se encuentra lista para el ataque**
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**El joven de los cabellos grises y la armadura dorada se encuentra reposando sobre el trono del maestro cuando June entra en escena. Y al verla ahí, una horripilante sonrisa se dibuja en su rostro. Sin levantarse de su asiento de oro, comienza a aplaudir sarcásticamente a la amazona de bronce. -¡Bravo!- exclama casi frenético el de los ojos rojos -¡Has logrado atravesar los 12 templos del zodíaco y encarar al Gran Maestro!- entonces se levanta y cautelosamente se acerca a la dama de bronce, sin despegar sus ojos de ella. Entonces, su fisionomía comienza a iluminarse en energía dorada, haciendo sentir su poder por todo el cuarto. -¿Estas lista para enfrentar tu destino?- dice, con un tono malicioso en la voz, rodeando a la poseedora del látigo lentamente. ¡La batalla final por las 12 casas está a punto de comenzar! ¡June de Camaleón contra Saga de Géminis!**
[[¿Quién eres? ¿El ángel o el demonio? ¿El justo o el malvado?]]
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**A cuestas de haber llegado hasta el mismísimo salón Patriarcal y aunque las finas ondas del látigo parecen no impresionar en lo mas mínimo el corrupto pontífice June se detiene ante aquello, una sensación de sorpresa y frivolidad recorre el cuerpo de la amazona al percibir el cosmos que crece minuto a minuto dentro de aquella cámara, como si no hubiese escuchado su pregunta la joven responde con un azote tratando de ligar las piernas de su oponente, el rumor de la guerra ya es vano, porque esto, ¡acaba de comenzar!**
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**Aprovechando el dominio sobre la velocidad luz que el Gran Maestro posee, comienza una veloz carrera en dirección de June. Al estar ya cerca de ella, con su mano izquierda intenta tomarla por la máscara que cubre su rostro y empujarla; mientras con la derecha crea una pequeña pero poderosa esfera de energía. Con la misma velocidad, y con un movimiento como de abrazo, Saga lleva aquella esfera de energía a la espalda de la amazona de bronce, intentando detonarla ahí y crear daño en el cuerpo y armadura de la rubia. En realidad, todo es un juego para el traicionero santo de oro; pues en realidad no ve un rival en aquella amazona.**
[[¿Quién eres? ¿El ángel o el demonio? ¿El justo o el malvado?]]
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**Es el momento, ya no queda más tiempo siquiera. June se apresta a lanzar su látigo sin éxito alguno, “¿Cómo?” se interroga a sí misma cuando en un movimiento que ella no pudo captar por la velocidad ejercida por el Patriarca, es tomada por sorpresa cuando es arrojada por el rostro cubierto por la máscara de bronce retrocediendo involuntariamente casi hasta la puerta del salón barriendo el suelo con su cuerpo, pero no es todo, aunque es más de una acción, solo puede observar aquella esfera de energía llegar hasta su espalda, solo un grito ahogado se deja escuchar de parte de la joven cuando siente como cada parte de su protección es resquebrajada como si fuese un metal delicado, su adolorida espalda no es impedimento para continuar, un hilo de sangre se escurre de su faz al tiempo de emitir un leve quejido, sin poder levantarse del suelo, intenta mover cada músculo de su cuerpo**
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**Aquel malvado hombre suelta una risilla diabólica, al ver como su ataque da resultado. -¡Ya no hay nadie que pueda detenerme!- exclama con locura el guerrero de oro. Es entonces que mira a la intrépida amazona en el suelo. Su cuerpo no deja de emanar aquella luz de oro, y su poder fluye a través de cada una de sus células. Es entonces que comienza a concentrar todo su poder, preparándose para dar el golpe de gracia. -¡Prepárate para morir!- ruge con fiereza, mientras el mismo cuarto comienza a temblar ligeramente por su increíble poder. La luz de oro se hace más brillante a cada instante, y sus cabellos comienzan a flotar y agitarse con violencia. ¿Será que no hay nadie que se oponga al malvado patriarca y a sus ambiciones?**
[[¿Quién eres? ¿El ángel o el demonio? ¿El justo o el malvado?]]
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**Como si la fuerza se hubiese alejado, como si las esperanzas se hubiesen acabado, June se encuentra en plena batalla, teniendo gran desventaja en su contra, solo le queda entregarse al sueño de la muerte, pero no se trata solo de ella, se trata del santuario, de los caballeros, de Athena, sobretodo de su maestro Albiore. "No, no puedo, no debo permitirlo" piensa aun en ese estado cuando todo parece haberse perdido; pequeñas luces azules merodean su cuerpo, como si se tratase de su cosmos naciente, -Sí, yo voy a detenerte- murmura cabizbaja cuando su adolorida humanidad se coloca de pie como si se tratase de un impulso mayor que ella, apretando fuertemente el látigo que reluce junto con su cosmos es lanzado rompiendo la velocidad del sonido hacia el cuello del dorado tratando con ello de asfixiarlo fuertemente**
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**Ante el golpe de la amazona, Saga interpone su antebrazo izquierdo; con la intensión de que el látigo se enredara ahí, y quedaran unidos. -¡Jamás me vencerás en ese estado tan lamentable!- menta con orgullo, sin embargo poco a poco siente el ardiente cosmos de June. °°¿Qué pasa? ¡Su cosmos arde en un nivel alarmante!°° piensa para sí, sin despegar sus ojos de ella; mientas una gota de sudor helado recorre su mejilla. Frunciendo el ceño, Saga abre su palma derecha; y cientos de diminutas esferas de energía dorada comienzan a arremolinarse ahí. Poco a poco, aquellas partículas de luz se funden unas con otras aumentando su tamaño, hasta que una sola esfera de energía latente, del tamaño de un pomelo, queda ahí. -¡Muere, June!- dice, mientras lanza aquel ken de luz con una tremenda velocidad en busca del abdomen de la ya herida amazona de Camaleón. ¿Será suficiente un ken de poder dorado para derrotar a aquella guerrera?**
Nota: June, tengo una idea ya para terminar esta batalla de las 12 casas. Tengo el permiso ya del administrador para manipular a todos los personajes anteriores. Después de tu turno, dejaré esa idea. Gracias por todo.
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**June se lanza con su pequeña fuerza en contra del dorado, aun sabiendo que tiene las de perder, pero su arma queda enredada en el brazo, como si no hubiese apuntado bien, y sin querer es atraida hacia el, poco puede observar y sentir cuando ese ken impacta en su vientre, esta ves su grito se puede escuchar resonar por el eco del salón patriarcal, -Ahhhhhhh- chocando con una de las columnas, hiríendose màs aun, ya sin fuerzas para continuar, queda en el suelo yaciente, con un pie en el más allá**
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De: krishna |
Enviado: 07/03/2012 21:20 |
** Después de haber atravesado la doceava casa, el santo dorado de Escorpion llega por fin a su destino, el salon patriarcal, la gran puerta de entrada esta cerrada, sin embargo los gritos de una mujer se escuchan dentro, lo cual alerta los sentidos de Kardia. --June-- menta el santo al tiempo que de un solo empujón abre de par en par aquel obstaculo ingresando de lleno en la alcoba, lo que sus ojos ven es increíble: el Santo de Geminis se encuentra ahi. --Saga, ¿que demonios es esto?--exclama dirigiendose a aquel camarada, el cual, parece haber perdido la razón. --Explicame que sucede aqui, por que atacas y donde esta el Patriarca, contestame o te lo sacare a golpes-- finaliza mientras un aura dorada cubre su cuerpo, esperando la reacción del griego**
Perdon que interrumpa pero me parecio interesante dar un péqueño giro a la historia, espero sea interesante.
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**El Gran Maestro se preparaba para dar el golpe final a la amazona de camaleón, cuando una nueva figura irrumpe el lugar. Kardia de Scorpio. El, a diferencia de los santos de plata y bronce, representa un problema para Saga: No solo en su nivel de poder, sino que destruye su ambición de controlar a los 12 caballeros dorados. Con una mirada ciertamente malvada, el de Géminis le habla a Kardia –Tarde lo temprano te enterarías, Kardia…- dice, mientas voltea su cuerpo para tener al octavo dorado de frente, dejando a la moribunda June a sus espaldas -¡Yo soy el Gran Maestro! – exclama sin despegar su vista del rival. -¿Es que acaso no lo entiendes? ¡Solo la verdadera fuerza puede proteger este mundo de las ambiciones de Poseidón, Hades y Zeus!- Y entonces calla y da un par de pasos en dirección a Kardia. –Demuestra tu lealtad al santuario, Kardia… ¡Mata a esa traidora!¡Te lo ordeno yo, El Gran Maestro!- dice, señalando con el dedo índice a June, quién aún está en el piso. ¿Aceptará Kardia las palabras de Saga? ¿O se revelará como un perro que muerde la mano que lo alimenta?**
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Nota: Te suplico Kardia terminemos este combate lo más pronto posible, para exponer el final que preparé para esta saga. Gracias.
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De: krishna |
Enviado: 14/03/2012 05:19 |
**Ahora todo esta claro, las palabras de Albiore eran ciertas, el santuario esta corrompido y eso no puede continuar asi. El aura dorada que cubre el cuerpo de Kardia incrementa mas y mas su brillo mientras los pasos firmes del dorado se acercan a aquel demonio. --Tendré que tomar cartas en el asunto-- menta para si mismo al tiempo que, colocándose a escasos metros del falso Patriarca y extendiendo el brazo derecho señala con el dedo indice mientras exclama: --Ahora me encargaré de castigarte por rebelarte en contra de Athena y el Santuario-- terminando de decir esto, el joven griego extiende la palma y lana una esfera de energia a gran velocidad buscando impactar el torso de Saga, no es el máximo poder del santo, solo busca amedrentarlo y medir su poder. ¿Que pasará?**
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**-Así que esa es tu respuesta, Kardia…- comenta Saga con cierto aire de cólera, mientras una impenetrable mirada se apodera de su rostro. Y, al ver venir aquel ken de energía, el dorado de Géminis levanta su brazo derecho y, cuando ya tiene cerca aquella esfera de energía lo deja caer en diagonal con fuerza; bateando aquella ofensiva. El ken se desintegra al instante, desvaneciéndose en miles de pequeñas esferas de energía. La energía dorada vuelve a rodear la fisionomía de Saga, y si poder se hace sentir por todo el lugar. Incluso su blanca capa y sus grises cabellos comienzan a agitarse con violencia. La colisión del poder de dos santos dorados. Saga retrae su diestra, con la palama en forma de garra, sin perder de vista al santo de Scorpio. ¿Qué clase de trampa estará preparando el usurpador Gran Maestro?**
[[¿Quién eres? ¿El ángel o el demonio? ¿El justo o el malvado?]]
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De: krishna |
Enviado: 17/03/2012 20:30 |
**El primer envío de Kardia ha sido desviado por aquel dorado enloquecido y traidor, sin embargo aun no hay nada escrito. --Vaya vaya Saga, no eres tan débil despues de todo, eso me obliga a usar todo mi poder y castigarte-- continua hablando aquel griego al tiempo que emprende una veloz carrera de frente al enemigo, mientras recorre la escasa distancia que le separa de Géminis, en su mano derecha se acumula energía cosmica, pero esferente esta vez: es de un color rojo intenso y el dedo indice se alrga hasta tomar la forma del aguijon del escorpion. No es otra cosa que su ataque mas poderoso: La Aguja Escarlata, la cual, de impactar en el enemigo le mermará los sentidos en medio de un sufrimiento tan terrible que pedirá la muerte. Es tal la velocidad del santo que aparenta ser una saeta escarlata que avanza mas y mas hasta casi impactar con el rival, sin embargo la luz atraviesa el cuerpo de Saga y Kardia se materializa detrás de el, de tener exito en su ataque, el santo traidor tendra diez impactos en su cuerpo y el martirio sera horrible. ¿Habra funcionado** |
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**El santo de géminis recibe aquellas agujas directamente en el cuerpo. El dolor invade su cuerpo, y de las 10 heridas comienza a brotar sangre, manchando su pulida armadura. Sin embargo, pronto una maniaca sonrisa se dibuja en su rostro, mientras una risilla diabólica resuena por todo aquel salón. –Kardia… Tendrás que ser mucho más habilidoso para asesinarme…- dice con un cierto aire de gracia mientras lentamente retoma su posición erguida. ¿Cómo es posible? Después de recibir 10 de las legendarias agujas escarlata, ahora su cuerpo debe estar más muerto que vivo. Con fuerza, Saga lanza su mano con la palma abierta en dirección de Kardia, y una proyección de su cosmos sale disparado; impactando al escorpión dorado en el pecho. Kardia se estrella contra uno de los pilares que sostienen el lugar, y pierde su casco. Mientras un hilo de sangre baja desde su labio hasta su mentón, el del corazón ardiente piensa para sí mientras se pone de pie °°Maldición… Saga es más fuerte de lo que pensé…°°. El cosmos de ambos guerreros resuena y choca en aquel salón; una batalla verdaderamente legendaria donde ninguno de ellos cede ni un solo centímetro. Después de varios minutos de intenso combate, ambos guerreros respiran con dificultad y muestran sus armaduras signos de batalla. Y, en un traicionero movimiento, Saga levanta su puño donde su cosmos se concentra -¡¡SATÁN IMPERIAL!!- exclama, pero antes de poder soltar aquella diabólica técnica, un cosmos más allá de la imaginación bloquea la fuerza de Saga. -¿Pero que- se pregunta el de Géminis, cuando una corriente de aire abre las puertas de la cámara patriarcal, y revela a una joven y bella mujer envuelta en una poderosa luz cósmica. Lleva en su mano izquierda a la personificación de la victoria; a la diosa Nike y la fuerza que emana es francamente divina. Esa muchacha no es nada más y nada menos que Athena. A espaldas de la diosa, un grupo de valientes guerreros la escoltan; grupo al cual Kardia se une lentamente mientras ayuda a June a ponerse de pie. Mu de Aries, Retsu de Lince, Aldebarán de Tauro, Aioria de Leo, Marín de Águila, Shaka de Virgo, Hyoga de Cisne, Kardia de Scorpio y June de Camaleón. Algunos muestran en sus cuerpos y sus armaduras el duro combate, otros se limitan a mirar con desprecio al traidor; todos siendo los sobrevivientes de la cruel batalla por las 12 casas. –Saga, tu derrota es irremediable- dice con una dulce voz la Diosa –Si te consideras un caballero dorado, arrepiéntete de tus pecados-. Una mueca de desesperación se dibuja en el maligno rostro de Saga, quién se ve acorralado por Athena y sus santos. Pero un instante después, la maligna sonrisa regresa a su rostro y comenta a Athena y a sus caballeros –Soy el único hombre capaz de gobernar a este mundo-. Adebarán contesta con un tono amenazador -¡No me hagas reir! ¡Todos sabemos muy bien lo que has hecho!-, mientras Aioria comenta fúrico -¡Tu intentaste asesinar a Athena -cuando era tan solo una bebé, y mataste a mi hermano Aioros!- Shaka se limita a guardar silencio, con sus ojos cerrados. Saga esta indefenso contra 5 santos de oro. –Escuchen, caballeros de oro- dice el maligno Gran Maestro, como un último intento de volver a poner bajo su ideología a los invencibles guerreros dorados –Aunque sea maligno, no hay nadie que pueda proteger a este mundo de los mezquinos Dioses y ponerlo bajo control. ¡Sería una tontería juntarse con esa niña creyendo que es Athena! ¡¿No les importaría que el mundo se arruinara?!- Sin embargo, Athena se abre paso entre sus santos y contesta al podrido Gran Maestro –Géminis, si eso es cierto y este mundo no tiene amor, ni justicia y está bajo la ley del más fuerte; me atrevo a decir esto: Creo que debería ser destruido.- Ante esta respuesta, Saga se queda atónito y con una expresión de horror en su rostro. –Pero creo que mientras las personas se amen unas a otras y deseen la paz, este mundo no será destruido. Todos hemos peleado por esto, y seguiremos luchando en nombre de la paz. Así que es mejor que te des por vencido. – Saga no comprende las palabras de Saori, y su cosmos vuelve a envolver su cuerpo. -¡Ahora yo les demostraré con mi poder que tengo la razón y que Athena está equivocada!- Es en aquel instante que Saga levanta su puño contra su diosa cuando la armadura dorada de Géminis comienza a brillar, y abandona a su amo. –¡No puedo creerlo! ¡La armadura ha renunciado a mí por su propia voluntad!- menta Saga sorprendido, a lo que Athena contesta –Estas volviendo a ser tu… Aunque poco a poco. La armadura no ha renunciado a ti, pero quiere ver como reaccionarás. Ahora Saga, conviértete en un ser de bien y olvida el mál…-. Saga se toma el rostro y deambula hasta el trono del patriarca. –Callate…- susurra de entre dientes, mientras toma una daga dorada que escondió con recelo por casi 13 años. -¡Muerte Athena!- exclama, mientras se lanza contra la Diosa empuñando la daga. °°No puedes matar a Athena porque tú también eres un santo que debe protegerla. No puedes matar a Athena. °° aquel extraño pensamiento inunda de súbito la mente de Saga, y de último momento lleva la daga a su propio abdomen, en un acto suicida. Un chorro de sangre mancha el suelo del lugar, mientras Saga cae arrodillado frente a Saori. –Athena… perdóname…- dice, mientras su cabello regresa a su tono azulado y su rostro vuelve a ser angelical. Poco a poco, la vida abandona el cuerpo del usurpador. –Perdóname… Athena…- dice una última vez, antes de soltar su último aliento. Saga de Géminis, el traidor de la doble personalidad ha muerto. Athena suelta una lágrima por el santo caído, pues al final, era uno de sus guerreros y él vivía atormentado por su propia desgracia. El reinado de Saga ha acabado, y ahora Athena regresa al santuario. Varios santos han caído, y será difícil reconstruir el santuario. Pero nuevas batallas se avecinan, y tanto Athena como sus fieles santos estarán listos.**
Nota: Kardia, apoyado por la administración general, decidí dar por terminada esta Saga de las 12 Casas. Espero no cause un inconveniente.
Doy por conlcuida la recreación de las 12 casas.
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