Me gustan tus labios generosos
y tus ojos adormecidos
y el temblor de tus acariciantes besos
Busco tus brazos poseidos
Amo tus muslos fornidos
girnalda que me oprimen cuando te beso
y tibios guardianes de tu nido.
Sueño con inflexiones de tu voz y suspiros
en tu entrega fugitiva y en ti risa
y hay en tus modulaciones
inconfesables excesos
de una sumisión esquiva
CEFE