Un día llegaste a mi vida y pude comprender la hermosura del cielo en la sinceridad de tu mirada, comprendí que sobran las palabras cuando se trata de expresar los sentimientos que aguardan en el corazón.
Si pudieras ver en mi alma entenderías que una vida no basta para explicarte cuanto te amo, quiero fundirme en tu vida, en tus sueños y en tu corazón para que juntos podamos mirar en la misma dirección, bajo el mismo cielo, respirando el mismo aire, dejando atrás el camino lleno de abrojos y espinas que ya nunca volverá y volar tan alto que el viento sea testigo de que nuestro amor nunca tendrá fin...
Buenas noches gaviota, gracias por estar y compartir en este tu vuelo
te deseo un dia maravilloso de martes, que Dios te bendiga.
la Virgen te acompañe y los Angeles te guien
besitos y bendiciones
Cada nuevo amigo que ganamos en la carrera de la vida nos perfecciona y enriquece mas aun por lo que de nosotros mismos nos descubre, que por lo que de el mismo nos da.