Cuando aprendi a llorar por el dolor de las heridas nacidas en mi alma.... busqué por los caminos el valor para no despertar a la muerte traidora... Cuando aprendi a llorar por el calor ausente supe que en la vida que Dios me regaló viviria pocos momentos de profunda alegria.... Y aún asi... hay momentos en los que amo a la vida de un modo casi... casi... magico.... porque.... Hay tantas cosas bellas alrededor que nos llenan el alma de alegria.... de magia regalada a traves de nuestros ojos... de nuestro tacto... a traves de tantas cosas.... Y miro al cielo azul... Y miro las verdes montañas.... Admiro esa magia natural que rige nuestras vidas aunque a veces cegados estamos ante la antigua magia..... Y miro las estrellas... que sirven y acompañan a mi amiga la luna.... esa que inspira tanto en la piel de los poetas..... Le doy gracias al Padre que hizo posible que mis ojos.... que todos mis sentidos sientan la dulce magia disfruten saboreando el calor y la presencia de un mundo casi perfecto..... Cuando aprendi a llorar por el dolor sentido.... tambien aprendi a amar este mundo bendito..... Cuando aprenda a reir por el amor correspondido por esa inmensa magia que une dos cuerpos en uno... entonces... solo entonces... lloraré de alegria... al fin habré encontrado la verdadera poesia.....
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