Masa:

200 g de harina de trigo integral
50 g de nueces peladas y procesadas
50 g de manteca
5 cucharadas de aceite de maíz
3 cucharadas de azúcar rubio
2 yemas

Relleno:

750 g de ricota
8 cucharadas de de azúcar rubio
Ralladura de la cáscara de 1 limón

Salsa inglesa:

750 cc de leche
4 yemas
100 g de azúcar rubio
1 naranja

1. Salsa inglesa: pelar la naranja y retirar el hollejo. Colocarla en una cacerola, verter la leche y mantener a hervor bajo durante 10 minutos (debe quedar ½ l) . Batir en un bol de metal las yemas junto con el azúcar hasta que la preparación quede lisa y clara. Incorporar la leche previamente colada, batiéndola. Trabajar sobre el fuego bajo revolviendo constantemente con una cuchara de madera. La crema estará lista cuando cubra la cuchara. Dejar que tome temperatura ambiente y reservar en la heladera.

2. Masa: cortar la manteca en cubos. Trabajar con una espátula junto con el aceite, la harina, el polvo de nueces y el azúcar hasta obtener un arenado. Incorporar las yemas y trabajar con los dedos hasta unir los ingredientes. Si es necesario, agregar un poco de agua fría. Cubrir con papel film y dejar reposar en la heladera durante ½ hora. Estirar con un palote de madera hasta 5 mm de espesor y dividir la preparación en dos. Utilizar una parte para forrar un molde cuadrado cubriendo los bordes del recipiente hasta 2 cm de alto. Cocinar en horno precalentado a temperatura media durante 5 minutos. Retirar y reservar.

3. Relleno: mezclar en un bol la ralladura de limón, la ricota y azúcar. Distribuir sobre la masa cocida. Colocar la masa restante sobre el relleno y cerrar los bordes. Continuar la cocción por 20 minutos más. Retirar, dejar enfriar y servir junto a la salsa inglesa de naranja.