POEMAS DEL PROFETA
"La Humildad ante la Espera"
Se inclinaba tardío ante la tierra fecundada.
Frente al lago.
Profundo pozo de amor tranquilizado en el misterio de los dioses.
Murmullo de razas anteriores que guardaban el secreto de regreso.
En el horizonte se veían las huellas de agua del hombre de las islas
---que regresa por el mar.
¡Por fin volvía el viajero!
El fruto crecido en el cincel del tiempo.
El hijo, cansado, agotado, iluminado, resplandeciente convertido en Padre!
Dulce fé del tiempo revelado
que hace contemplar vivos, como a niños,
a viento, mar y sol unidos al atardecer,
en vigilia permanente hacia las aguas de las islas
por donde llegaba el hombre
con el destino en las manos.
Se inclinaba tardío. Era preciso reconocerlo.
¡Pero se inclinaba, al fin!
La tarde se iluminaba de rayos repentinos.
Había una última esperanza que iluminaba la tarde.
Rafael de Js. Vásquez G.
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