Hasta hace tan solo unos meses, pensaba que no podía haber amor mas grande que el amor de una madre, y que ninguna madre podría amar mas a sus hijos mas que yo, pero solo hasta hace un mes comprendí que no es cierto, no porque mi amor se haya ido, sino porque ante la majestuosidad del amor recibido de mis tres tesoros, en mis momentos difíciles sentí que el mío se opacaba con tanta belleza.

Ni la luz de las estrellas, podrían iluminar tanto, como lo hicieron Uds, en esos días, mis amores, Ni la inmensidad del cielo se podría comparar con el amor que me brindaron, Ni las riquezas de todo el universo podrían hacerme sentir mas afortunada que tenerlos a Uds, Ni la medicina mas avanzada podría curar con la magia que lo hicieron Uds, Ni los mas grandes sabios hubiesen podido superarlos en las decisiones tomadas, Ni la fuerza del roble podría superar la fortaleza de Uds en esos días, Ni la caña mas dulce, superaría la dulzura de sus miradas, solo Uds hicieron esos días mas cortos y a pesar de todo mas felices, porque por fin pude comprender que mas importante que todo lo material que les pueda dar, es poder disfrutar momentos inolvidables con Uds.

Quizás todo lo que ha sucedido no ha sido fácil, porque hemos tenido que pasar por momento difíciles, pero gracias a ello, he comprendido que tengo los hijos mas maravillosos del mundo, gracias a este tropezón me he encontrado con tres piedras preciosas que son Uds, y les aseguro que nada es comparado con la felicidad que siento por ello.

Gracias mis amores, por ser los hijos mas maravillosos del mundo y por estar siempre!

Ahora solo me queda dar Gracias a Dios, por brindarme la oportunidad de comprender que no hay nada mas importante que el amor, que solo el puede vencer cualquier obstáculo, que solo el amor puede levantarnos en los momentos mas difíciles y que gracias a el, tenemos la maravillosa oportunidad de Vivir.