| 
   
  
  
ODISEA DE UN SUEÑO    
   
Cansado de la vida quise irme muy lejos,  
me puse un par de alas para poder volar  
siguiendo mi sueño de encontrar el amor  
que sólo se halla una vez en la vida.  
   
Anduve errante, viajé sin rumbo fijo  
por mundos inventados  
tomando caminos indefinidos 
como peregrino que busca alcanzar  
la beldad muy dificil de realizar... 
por ser imaginada. 
   
   
Después de jornadas imposibles  
con intrincados valles y sinuosas veredas,  
crucé desiertos dormidos en oleajes  
de dunas mecidas por el viento Simún;  
tormentas arenosas de mil colores  
coronadas con rosas yermas carentes de olor... 
   
Cautivo por el perentorio deseo de hallar  
el tan ansiado como imaginario oasis  
que calmaría mi sed de amar,  
continué vagando por mi sueño... 
esta vez con mayor intensidad;  
   
Una vez logrado mi firme propósito  
bebería agua fresca y clara del manantial de la Vida  
y allí tomaría merecido descanso  
de mi adorado sueño... 
para seguir más tarde y ya sin dilación  
el rumbo de la Rosa de los Vientos,  
como  nómada que vaga su aspiración  
sin reparar en esfuerzos. 
   
   
Alcanzaría posteriormente, como un Tuareg,  
la ciudad imperial de Palmira,  
antiquísimo parador de caminantes y trovadores,  
para acariciar mi visionado espejismo;  
extrayendo de él lo que más anhelé  
y ver un sueño tan altamente idealizado  
convertirse en realidad... 
   
la realidad más soñada en la Tierra;  
la que yo denodadamente perseguí con ahinco... 
   
   
Y terminando así mi odisea  
desperté dentro de mi más adorado sueño. 
 
Autor: 
Casimiro López Cano       
  
           
Webset Copyright ©2011 UTOPIA All Rights Reserved 
 |