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MÁS ALLÁ DE LAS GALAXIAS
Estaba junto a ella en el día más feliz de mi vida, tenía recostada mi cabeza sobre sus piernas y la miraba fijamente a los ojos en esos instantes llenos de sensaciones a flor de piel, sus ojos eran las estrellas que cada noche brillaban en el cielo como guía de mi destino, como brújula de mi camino, como timón hacia el puerto de sus delirios, como olas enfurecidas inundando la costa, ella sonreía y yo podía sentir la fuerza del amor que se expandía por todo el universo más allá de las galaxias, una fuerza que en su poder llegaba hasta lo más profundo de mi alma.
-Siempre soñé que se harían realidad cada uno de tus escritos.
-¡Mi amor! Al fin puedo tenerte en mis brazos.
-¡Mi poeta guapo, mi ángel! Cada una de tus letras me hacían suspirar y en tus alas buscaba el refugio para mis deseos íntimos y divinos.
-Eres hermosa, una mujer increíble y única.
-Quiero que me ames por toda la eternidad y que tu boca deje las huellas de tu pasión en cada espacio de mi cuerpo.
-Mi musa, la mejor poesía la haremos
entre los dos.
Cerré mis ojos y ella cerró los suyos y sus labios llegaron a los míos en una armonía perfecta y mis venas aumentaron su caudal para unir mi alma a su corazón en una fusión de placer y de éxtasis.
Ángel de las Letras
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