NIÑA DULZURA
Pequeña encantadora,
gota de luz divina
en la orilla de mis deseos
te siento mi niña dulzura.
Perfume contagiante,
mirada fija deslumbrante.
Mi tesoro de maravilla
eres tú mi niña dulzura.
Labios calidos caricias;
Sonrisa fluida, alegría.
En mis mañanas tardes y noches
te llevo niña dulzura mía.
Manos frágiles, decoradas;
caricias que invitan a soñar.
me llenas de tu ternura,
de tu cariño mi niña dulzura.
Tu voz, libre canción.
Tu sentir, pasión tuya.
Me llena de goce, de alegría,
de un querer intenso
niña dulzura mía.
José Garcia Estrada