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A EMPEZAR
Por 
diez años Tomás Edison intentó construir una batería de almacenaje de cargas 
eléctricas. Sus esfuerzos, estrangularon en gran medida sus finanzas. En 
Diciembre de 1914, una combustión espontánea en su estudio casi lo llevó a la 
ruina.
En 
minutos todos los compuestos empacados para discos o cintas y otras sustancias 
inflamables ardieron en llamas. Aunque los departamentos de bomberos vinieron de 
ocho pueblos circundantes, el intenso calor y la poca presión de agua provocaron 
que fuera inútil extinguir las llamas. Todo quedó destruido. El daño excedía a 
los dos millones de dólares, los edificios de cemento que se consideraban 
construidos a prueba de fuego, estaban asegurados apenas por la décima parte de 
esa cantidad.
Charles, 
el hijo del inventor, buscó con desesperación a sus padre, temeroso de que su 
espíritu resultara dañado.
Finalmente 
lo encontró contemplando con serenidad el fuego, su rostro resplandecía mientras 
reflexionaba. "Mi corazón se dolía por él", decía Charles. "El tenía sesenta 
años, ya no era un joven y todo ardía en llamas"
En 
la mañana siguiente, Edison contempló las ruinas y exclamó: 
"Hay 
algo valioso con el desastre. Se quemaron todos nuestros 
errores.
Gracias 
a Dios podemos comenzar de nuevo.
"Tres 
semanas después del incendio, Edison se las ingenió para inventar el primer 
fonógrafo."
Con 
cada nuevo día, tenemos la oportunidad de comenzar de 
nuevo.
Desconozco 
autor
EL 
EXITO
El 
Rey recibió como obsequio dos pichones de halcón y los entregó al maestro de 
cetrería para que los entrenara. Pasados unos meses, el instructor comunico al 
rey que uno de los halcones estaba perfectamente educado, pero que al otro no 
sabía lo que le sucedía: No se había movido de la rama desde el día de su 
llegada a palacio, a tal punto que había que llevarle el alimento hasta 
allí.
El 
Rey mando a llamar curanderos y sanadores de todo tipo, pero nadie pudo hacer 
volar al ave. Encargo entonces la misión a miembros de la corte, pero nada 
sucedió. Por la ventana de sus habitaciones, el monarca podía ver que el pájaro 
continuaba inmóvil.
Publicó 
por fin un bando entre sus súbditos, y, a la mañana siguiente, vio al halcón 
volando ágilmente en los jardines. Traedme al autor de ese milagro, 
dijo.
Enseguida 
le presentaron a un campesino. Tu hiciste volar al halcón? Como lo 
hiciste?
Eres 
mago, acaso?
Entre 
feliz e intimidado, el hombrecito solo explico:
No 
fue difícil, su Alteza: solo corté la rama. El pájaro se dio cuenta que tenía 
alas
y 
empezó a volar"
Sabemos 
que tenemos alas? Sabemos que podemos volar y a que estamos agarrados 
?
Nos 
damos cuenta que no nos podemos soltar? Qué esta esperando nuestra rama para 
romperse?
Quién 
o qué la puede cortar? Cuáles son las razones que hoy nos impiden levantar 
vuelo?
Estamos 
haciendo algo importante?
"No 
podemos descubrir nuevos mares amenos que tengas el coraje de perder de vista la 
costa" Vivimos dentro de una zona de comodidad donde nos movemos, creemos que 
eso es lo único que existe. Dentro de esa zona esta todo lo que sabemos y todo 
lo que creemos.
Viven 
nuestros valores, nuestros miedos y nuestras limitaciones. En esa zona reina 
nuestro pasado y nuestra historia. Todo lo conocido, cotidiano y fácil. Es 
nuestra zona de confort y por lo general creemos que es nuestro único lugar y 
modo de vivir. Tenemos sueños, queremos resultados
extraordinarios, 
buscamos oportunidades pero no siempre estamos 
dispuestos
a 
correr riesgos, no siempre estamos dispuestos a transitar caminos difíciles o 
incómodos. Nos conformamos con lo que tenemos, creemos que es lo único y posible 
y aprendemos a vivir desde la resignación.
El 
liderazgo es la habilidad que podemos adquirir cuando aprendemos a ampliar 
nuestra zona de comodidad.
Cuando 
estamos dispuestos a correr riesgos. Cuando aprendemos a caminar en la cuerda 
floja. Cuando estamos dispuestos a levantar la vara que nos regalo Dios y que 
mide nuestra potencialidad.
Un 
verdadero líder tiene seguridad en si mismo para permanecer solo, coraje para 
tomar las decisiones mas difíciles, audacia para transitar hacia lo nuevo con 
pasión y ternura suficiente para escuchar
las 
necesidades de los demás.
El 
hombre no busca ser un líder, se convierte en líder por la calidad de sus 
acciones y la integridad de sus intentos.
Los 
lideres son como las águilas, no vuelan en bandadas, los encuentras cada tanto y 
volando solos... Nadie vendrá a rescatarnos Nadie cortara la rama nosotros somos 
los magos el futuro esta en nuestras manos
Solo 
necesitamos comenzar..AHORA
Desconozco 
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