| Aprendí a mirar las estrellas, alumbrando los sueños con ellas.
 A mirar los colores del viento y a sentir el sabor del silencio.
 
 Aprendí a encender ilusiones y a escuchar hablar el corazón, con palabras calladas,
  con matices de mil sensaciones.
 Cuando un día, el dolor tomó mi mano, conocí de frente a la tristeza, la pena y el llanto se marcharon, al sentir el amor y su grandeza.
 
 La soledad, querida compañera, la que con tanto miedo rechazaba,
 me mostró la paz y la armonía de los momentos que con ella estaba.
 Comprendí, el sentido de la vida, viviendo el amor y la desdicha, sintiendo la alegría
 y la tristeza, conociendo lo breve de la vida.
 Aprendí el valor de la paciencia, a calmar los vientos de mi ira, a llenar con mares
 de esperanza las zonas más oscuras de mi vida.
 Vivir es aprender a cada instante...de cada situación, de cada momento,
 de cada sensación, de cada injusticia o sin razón...del amor, del desamor,  de la felicidad, de la infelicidad, de la protección, del abandono.
  Un café...? 
 zumo... 
 fruta... 
 pan... 
 croissants... 
 bollos... 
 cake... 
 pastas... 
 completo... 
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