La tranquilidad es uno de los grandes placeres que una persona puede tener.
Por otro lado, la falta de tranquilidad puede hacer que la vida de uno sea una constante tortura.
La persona que llega a obtener tranquilidad, ha ganado todo. Para obtener tranquilidad,
necesitas estar tranquilo/a con tus emociones, deseos y necesitas estar en paz contigo mismo.
Una actitud mental pacífica y un alma serena son los factores más importantes para obtener
la felicidad.
La tranquilidad vive dentro de nosotros cuando logras aquietar la mente.
Es un trabajo de meditación, constante y fructífero, y de actitud ante la vida.
El deseo mengua y fluyes, viviendo el momento y apreciando las pequeñas grandes cosas.
La tranquilidad es esencial para obtener muchas virtudes.
Su ausencia nos lleva a tener todo tipo de problemas. Cuando tú tienes tranquilidad,
puedes usar tu mente constructivamente. La falta de tranquilidad genera frustracion,
enojo, resentimiento, odio.
Serenidad interna es la esencia del verdadero éxito en la vida y ésto es totalmente
independiente de las posesiones materiales.
La calidad de los rezos y bendiciones de uno, depende en el dominio de nuestros pensamientos.
Sólo cuando una persona tiene tranquilidad puede realmente sentir amor por sus iguales.
La falta de tranquilidad lleva a sentir rencor hacia otros. La tranquilidad lleva a amar.
Sólo si la persona tiene tranquilidad podrá pasar la prueba de tratar a otros correctamente.
Ella podrá ser bondadosa con todo el mundo. Su tranquilidad le permitirá tolerar a otros
y ser paciente con tus pares y amigos
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