Isabel, Papaya, es mi "compañera de fatigas" desde mis primeros pasos

en este medio.

Tiene muchas notas  por las que la respeto y admiro y confío.

Su humor , estruendoso a veces, nunca ha ido separado de una enorme

madurez y claridad para saber donde está y como quiere posicionarse,

hablando claro y sin dejarse ni vencer ni influir siquiera por los pareceres ajenos.

 

Su mamá a muerto y aunque, por algunos días no supe que hacer, he pensado

que lo mejor es lo que ella hace y en lo que coincidimos, hacer lo que nos nace

Y me nace decirle aquí, en este espacio en el que ella también tiene su

saco de dormir, Papaya, lo siento mucho, te acompaño en tu sentimiento..

 

Descanse en paz!

 

Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros

tu reino y hágse tu voluntad, en la tierra como en el cielo.

Danos hoy nuestro pan de cada día y perdona nuestras ofensas

como nosotros perdonamos a los que nos ofenden. Así sea.