No importa cuánto te hayan empujado hacia atrás, siempre puedes avanzar. No importa cuán bajo hayas caído, siempre tienes la opción de recuperarte.
Hasta las más grandes desilusiones y las mayores tragedias pueden ser superadas. No importa cuán oscuro se torne todo; el día puede, y de hecho así será, amanecer luminoso una vez más.
Sea cual fuere la situación, siempre existe la posibilidad real de un cambio positivo. Hasta en los mejores momentos, las cosas pueden mejorar más aún. Y ciertamente, en los peores momentos el cambio para mejor sólo está esperando ser concretado.
Hoy tienes a tu alcance cosas magníficas y maravillosas. Mañana a esta hora puedes estar caminando decididamente en dirección a tus más preciados sueños y deseos. En tu corazón tú sabes que es así. Permite que tus acciones estén guiadas por tus posibilidades, e ingresarás así en un día nuevo y luminoso.