El valor de lo que hagas dependerá del valor que pongas en ello. El éxito no está dado tanto por lo que haces o lo que dejas de hacer, sino por la pasión que pones y el significado que tiene para ti.

En cualquier campo de acción que puedas imaginar hay personas que disfrutan de un éxito impresionante, así como otros fracasan irremediablemente. Y si observas detenidamente verás que la diferencia, muy a menudo, está dada por lo que cada uno de ellos pone en lo que hace.

Sea lo que fuere que haya que hacer; una llamada telefónica, una carrera universitaria, un día en la playa o una tarea rutinaria, cada una de esas cosas es una oportunidad para que aportes algo de ti mismo. Y haciéndolo con una actitud positiva, creativa y entusiasta puedes generar verdadero valor, real y duradero.

Para obtener algo, para conseguir algo valioso a partir de lo que sea que hagas, pon lo mejor de ti en ello. En lugar de afligirte si la vida te ha jugado una mala pasada, prepárate para vivirla exquisitamente y a tu manera propia y especial.

Cada instante de cada día, sea cual fuere la situación, es una oportunidad para que agregues valor al mundo que te rodea. Pon algo bueno y útil en cada día, algo que sólo tú podrías. Pon lo mejor de ti y disfrutarás cada instante recibiendo a cambio placer y plenitud.