Decir Amén implica un gran compromiso, es hacer una profesión de fe, es decirle a Dios que sí, que estamos de acuerdo con todo lo que Él nos dice, es repetirle una y otra vez que le vamos a ser fieles, es asegurar nuestra esperanza...
Usarlo como algo común no es alabar a Dios, es burlarse..Jesucristo iniciando algunos de sus discursos con un doble «Amén, amén», en el Nuevo Testamento, frecuentemente traducido como: «En verdad, en verdad» o «De cierto, de cierto» (por ejemplo: Juan 14:12).4
En el libro del Apocalipsis, Cristo es llamado «el Amén» (Apocalipsis 3:14).2
Se ha vuelto tan usual usarla en Facebook, que ya suena a burla, pero como dice la Biblia..."Dios no puede ser burlado"...Galatas 6:7
Piensa antes de usar esa palabra o poner carteles en cosas innecesarias, dale un buen uso al Amén...
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