Caminando

Despues del medio dia, esperaste con paciencia a estar en la compañia mia. Me enseñaste cosas interesantes para mi, en un bello atardeser de verano, y estando a la par tulla, me tomaste de la mano  y me hiciste sentir como un ser humano. Fuiste mi segunda madre, creo que ese amor compartido,  va a estar siempre en mi corazon, aunque valla caminando solo,  callado, porque no estas a mi lado. Cada ves que el atardecer llega a su crepusculo, recuerdo cada ves que tomabas mi pequeña mano y me ayudavas a saltar o simplemente   para no mojar mis zapatos, porque estaria en mi casa dentro de un rato. No sabes el dolor que siento cada vez que te recuerdo y te escribo este pensamiento,   porque te extraño a cada momento.

Alonso  Rodriguez Vargas