COBARDIA
Con los brazos caídos
la mirada torva
los vemos pasar.
Son jóvenes de hoy
que nada esperan,
son jóvenes viejos,
que evitamos mirar.
Envueltos en sus delirios
de drogas y de alcohol,
sin nada por futuro
sin sueños que soñar.
Son hijos, padres, hermanos,
pero nada son.
Solo un milagro podrá salvarlos
de un destino fatal:
la cárcel o la muerte,
no tendrán otra opción,
Y nosotros, los lúcidos
los normales, más cobardes que ellos,
cuando pasan, evitamos mirar. Frida.
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