Página principal  |  Contato  

Correio eletrónico:

Palavra-passe:

Registrar-se agora!

Esqueceu-se da palavra-passe?

BRISAS DE AMOR PARA TI
 
Novidades
  Entre agora
  Painel de mensagens 
  Galeria de imagens 
 Arquivos e documentos 
 Inquéritos e Testes 
  Lista de participantes
 General 
 * REGLAMENTO DE LA CASITA 
 * PRESENTATE AQUI 
 * POEMAS 
 * REFLEXIONES 
 * NUESTRA MUSICA 
 * CAPILLA VIRTUAL 
 * MUNDO DE LOS NIÑOS 
 * LA COCINA DE NORMA 
 * SALA DE JUEGOS 
 * TRUQUITOS DE BELLEZA Y DE SALUD 
 * BELLAS ROSAS 
 * VARIEDAD DE FLORES 
 * PSICOLOGIA 
 * METAFISICA Y FILOSOFIA 
 * MEDICINA NATURAL 
 * PHOTOBUCKET 
 * LINDAS BASES PARA FIRMAS 
 * IMAGENES 
 * OFRECIMIENTOS DE FIRMAS 
 * ENTREGAS DE FIRMAS 
 * TEXTURAS Y GLITTERS PARA FONDOS 
 * HERMOSOS FONDOS PARA TU USO 
 * FONDOS CUMPLE Y PARA EPOCAS 
 * GIFS PRECIOSOS 
 * COMUNIDADES AMIGAS DEJA TU BANNER 
 * CONOCE TUS ADMINISTRADORES 
 * RINCON BRISSA 
 * RINCON THEEDU 
 * RINCON TITA 
 * RINCON NORMA 
 * RINCON LOLILLA 
 * PORTADAS GUARDADAS 
 * GRUPOS UNIDOS * 
 
 
  Ferramentas
 
* POEMAS : COBARDE
Escolher outro painel de mensagens
Assunto anterior  Assunto seguinte
Resposta  Mensagem 1 de 1 no assunto 
De: OSCARJ  (Mensagem original) Enviado: 30/07/2010 13:47
Enviado: 30/07/2010 08:10
oscarj.jpg

 

COBARDE

 

Raudo el buque navega. En la toldilla
fuma impasible el capitán negrero.

Por la abierta escotilla
sube murmullo ronco y plañídero,
que el sollozo semeja
de mil bestias humanas;
es el ébano vivo que se queja
al dejar las llanuras africanas.

Y mientras gime abajo el cargamento,
y a merced de las olas y del viento,
navega el barco por la mar bravía,
que nos relate el capitán un cuento,
pide a voces la audaz marinería.

-¿Una historia pedís? Ahí va la mía,
-el negrero exclamó-. Si por mi alarde
de arrojo temerario habéis creído,
que cual valiente soy, valiente he sido,
¡grande fue vuestro error! Yo fuí un cobarde.

Yo fuí cobarde, sí, porque yo amaba
con la ternura de la edad primera,
a una mujer que infame me engañaba,
y la amaba frenético, la amaba
como ama a sus cachorros la pantera.

No sé si su adulterío o mi cariño
la hicieron concebir un tierno niño,
mas sé que entre la madre y el hijuelo
tanta dicha gocé, tanta ventura,
que a deciros verdad me figuraba
que casí comprendí lo que era el cielo.

Breves fueron mis cándidos amores,
breve mi dicha fue, breve mi calma,
y al saber la traición de los traidores
sentía del infierno los horrores,
dentro del corazón, dentro del alma.

A mi ríval deshice a machetazos
y antes de herir a la que impía
rompió de amor los bendecidos lazos,
el arma se detuvo, que en los brazos
de la mujer culpable, sonreía
el pequeñuelo débil e inocente,

y no quise manchar su tersa frente;
y, de pueril ternura haciendo alarde,
por no dejar sin madre al pequeñuelo,
¡a la infiel perdoné como un cobarde!

 

Marcos Rafael Blanco Belmonte

 

 

 



Primeira  Anterior  Sem resposta  Seguinte   Última  

 
©2024 - Gabitos - Todos os direitos reservados