Manual de la perfecta madre permisiva (como tener hijos groseros en 8 lecciones)

Si usted desea que su hijo sea grosero, desagradable, mal educado, irresponsable y poco cívico, este es el manual que usted está necesitando.

Si bien es cierto que para educar un perfecto salvaje como hijo, es necesaria una dedicación desde su mas tierna infancia, donde se le enseñe con constancia a ser molesto y abusivo, nunca es tarde para torcer a su hijo. La adolescencia es otro capítulo básico en la vida de un chico, donde una madre (o padre) puede hacer mucho para convertirlo en una lacra para la sociedad y para si mismo.

Por todo ello, hemos decidido publicar este Manual de la Perfecta madre permisiva, que es la receta ideal para crear hijos detestables. Todo explicado en lecciones muy simples de comprender y de seguir. De hecho es bastante probable que usted ya este, sin saberlo, siguiendo estos pasos.

Veamos las lecciones:

1.- Lección 1º Nunca cumpla su palabra

Nunca jamás vaya usted a cumplir su palabra frente a su hijo. No vaya a ser que él comience a creer que la palabra o el compromiso tienen algun valor.

Si el nene se comporta mal y usted lo amenaza con algún castigo, no se le ocurra cumplirlo nunca. Esto hecharía a perder todo este plan y correría el riesgo de que su hijo se convierta en alguien obediente o responsable.

Muestrele que las promesas y los planes son cosas sin sentido. En resúmen, es vital demostrarles que la palabra empeñada es una cosa para los tontos, un vivo ni por asomo le da valor alguno.

2.- Lección 2º Nunca les ponga límites

Ponrle límites a un niño o adolescente tendría, primero el inconveniente de tener que supervizarlo en vez de que usted se dedique el agradable acto de conversar con la vencina o mirar la TV. Otro inconveniente es que tendrá que soportar las quejas del menor, siendo mas fácil ceder ante todo con tal de sacarselo de encima.

De hecho, el método mas seguro de sacarse un hijo de encima, es ser permisivo y no ponerle ningún límite jamás.

Un tercer, y muy grave, inconveneiente sería que su hijo se puede convertir en una persona cívica y analítica, que respete a sus semejantes, que cumpla las normas y que viva feliz. Ni se le ocurra hacerle algo tan feo a su hijo.

Es más sencillo y cómodo, que aprenda a vivir la vida como una injusticia permanente en su contra, pues al no estar acostumbrado a los límites ni a adaptarse, sufrirá como una afrenta casi personal, cualquier medida o norma a la que se enfrente en el futuro.

3.- Lección 3º No les enseñe lo que es el respeto

Ni se le ocurra enseñarles a respetar a sus abuelos, profesores, vecinos, familiares o amigos.

El respeto es muestra de debilidad y no queremos tan desagradable actitud en nuestros hijos.

En este punto es vital el ejemplo. Maltrate usted a sus propios padres frente al hijo y refierase a la gente siempre en tonos irrespetuosos. Insulte lo mas posible y muestrales que la vida debe ser una batalla. Por supuesto, parte vital, son las malas palabras. Cuanto mas ofensivo, mejor.

No vaya usted a caer en el signo de debilidad que significa no tolerar que digan malas palabras, si es algo tan gracioso y divertido en boca de un pequeño.

4.- Lección 4º No les dedique atención

Este es un punto estelar.

Un método que no falla es, para tener hijos desagradables, no les preste atención. No los eduque y déjelos andar solo por ahí en todo momento. Total que los soporten otros, usted no tiene por que hacerlo.

No les dedique tiempo ni vaya usted a suponer que tiene alguna obligación hacia ellos mas alla de techo y comida.

Asegurese que sus niños vayan sin desayunar a la escuela y deje que sus hijas sea anoréxicas. Cuanta mas desatención, mas desagradables serán.

5.- Lección 51 Nunca respete ninguna norma frente a ellos

Todos queremos ser cancheros. Mostrarnos sin debilidad, enseñelos a ser así.

Respetar una norma es para los bobos. El vivo no respeta nada y se ofende tremendamente si alguien pretende cometer la terrible injusticia de querer hacerlos respetar las reglas.

Erradique todo respeto a las normas, en este caso, una vez mas, el ejemplo esl emejor camino. Sea usted un patán, para que hijo pueda serlo.

 

6.- Lección 6º Si la maestra los sanciona, golpee usted a la maestra

 

Nunca, pero realmente nunca, vaya usted a apoyar que alguna maestra trate de ser represiva con su hijo. Si llega a sancionarlo o llamarle la atención al monstruo que tiene usted por hijo, pongase furiosa y vaya a tirarle las mechas a la susodicha maestra.

Sería una locura que usted apoye a las autoridades quienes perversamente pretenden que su hijo sea menos desagradable y que cumpla sus deberes.

7.- Lección 7º No les enseñe a superarse ni a valorar el estudio

 

El vivo no necesita estudiar, ni necesita superarse, eso es para los bobos. Usted ya tiene esa brillante filosofía, transmitala a sus hijos.

Digales todo el tiempo en voz alta que todo eso no tiene sentido, que en este país solo los vivos hacen plata.

Convensalos en no gastar su tiempo estudiando o tratando de ser mejores en alguna area.

Siguiendo estas sencillas lecciones conseguirá usted crear un ser absolutamente detestable (como sus padres), que no respete nada ni a nadie, que no valore nada y que se sienta agredido si algun se atreve a intentar ponerles un límite.

Compre un catricilo y llevelos mde vacaciones a que conduzcan el cuatriciclo acorde a estos valores que usted les ha enseñado con tanta paciencia, es posible que se accidente.

O dejelos ir solos de veraneo a Gesell o San Bernardo a correr riesgos a esos antros nocturnos, todo con tal de librarse de ellos unos días.