Vamos, apúrate. 
Sacudí, con fuerza, tu tristeza. 
Desconectate del dolor. 
Sentí… Sentí. 
Una poderosa fuerza nos envuelve 
y nos eleva. 
Contemplá los destellos de luz. 
La vida danza, es una fiesta. 
Cuántos colores, cuánta magia, cuánto amor. 
Desplegá tus alas. 
Entregate al viento de la consciencia. 
Volá bien alto, por encima de los miedos 
y la desesperanza. 
Reí. 
Disfrutá. 
Gozá. 
Recordá tu esencia y ayudá a que 
otros se levanten y vuelen. 
Sos un ángel humano. 
Estas palabras llegan para
 conmover tu espíritu 
y reavivar la llama de tu pasión. 
Despertá. Viniste a propagar ánimo 
y confianza en los momentos de crisis. 
Por tus venas fluye la energía de 
una estirpe relumbrante. 
Tu destino está al servicio de un 
reino inmaculado, 
en donde no se oculta el Sol. 
También me muevo dentro de los 
límites de la materia. 
Sé que hay terremotos, huracanes,
 tsunamis, inundaciones, 
atentados, muertes, muertes
 y más muertes, 
pero pará, hacé una pausa. 
Elevate. 
Basta de lamentos. 
Mirá con los ojos del alma. 
Recuperá tu capacidad de conectar
 con la existencia. 
Equilibra tus vibraciones. 
La transición es bien caótica 
y alarmante, 
pero todo está dispuesto para 
que aprendamos 
las lecciones y trascendamos
 la inconsciencia. 
Las alas te fueron dadas 
para que puedas contar con una
 fuerza adicional 
que te permita despegar de la
 confusión y el desconsuelo. 
Sirven para que no te arrastre 
la desorientación y el sufrimiento, 
y puedas asistir a quienes necesiten
 una cuota adicional de fe y optimismo. 
Sé que no podés verlas, pero eso
 no significa que no las tengas. 
Recordá: tus alas son internas. 
Se despliegan cuando abrís tu corazón, 
de par en par, hacia la luz. 
Que esta sonrisa contagiosa, 
que ahora renace en tu rostro,
 te acompañe por siempre. 
Hemos recorrido un largo trecho 
para llegar hasta esta instancia, 
en donde prometimos ayudarnos 
a volar hacia otros cielos. 
Me emociona reencontrarte. 
Extrañaba el armónico sonido 
de tu cálido aleteo. 
No permitas, nunca más, que nada 
ni nadie trunque tu vuelo. 
Valoro tu misión, viniste para ayudar
 al proceso de evolución. 
Sos un ángel humano. 
