LLEGO A PENSAR Y PIENSO Era una tarde de otoño cuando triste te vi partir, mi corazón latÍa fuerte, muy fuerte y la tristeza, complacida, se apoderó de mis miedos, absorvente.     Llego a pensar que me quedaré perdida y sola que mis noches no serán nada sin ti. ¿ Llegaré a sentir la sensación gélida de la soledad? Me acurrucaré mirando a la luna en mi jardin.     Las nubes pausadas pasaban y yo las miraba como si de pronto estuviera encantada, mi mirada se perdia en el cielo y un escalofrío irrumpió mi piel, pero no, no soñaba.     Me duele el alma de tanto quererte me sangra la herida al verte partir me siento vacía por fuera y por dentro y sin tus caricias no puedo vivir.     Llegué a pensar y pienso que no me atrae la idea de perderte no puedo... tengo que llorar! Mi vida es un camino visible de torturas; otro mejor sin ti jamás lo llegaré a alcanzar.     Tu amor sigue siendo para mi, el umbral de mi vida! Autora: Marisa Prunera