LOS QUE NOS HIEREN
Muchos de nosotros nos preguntamos: ¿por qué los seres humanos lastimamos?
Pensamos que las personas que nos hieren no han tenido una vida fácil, que jamás tuvieron
el cobijo y el amparo de una familia, por lo que es posible que hayan desarrollado un resentimiento social.
Sin embargo todos los seres humanos hemos tenido, en algún momento de nuestras vidas, momentos infelices, momentos deprimentes, que nos marcan, que nos dejan huella.
Lo que ocurre es que algunos se dejan tirar y lloran amargamente, no sólo un rato, sino siempre y culpan a los demás de sus desdichas.
Otros, en cambio, aprenden, lo superan y se abren a los demás. Gente que se vuelve con la vida, optimista, que de los errores y tropiezos saca algo bueno y productivo.
Cuando la ira se apodera de nosotros, cuando el coraje nos gana la partida y rompemos con todo lo establecido, no tratemos de disculpar nuestros actos y, por lo contrario, cambiemos de actitud.
Tengamos presente que el lastimar a otros, sea con palabras o con hechos, nos deja un vacío enorme. Nos produce la sensación de haber fallado a nuestros principios. Corrompemos la moral, corrompemos nuestra capacidad de ser humanos y nos volvemos agresivos.
Medita un instante antes de herir a alguien, antes de que sea demasiado tarde y tengas que arrepentirte para siempre.
A/D
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