Antonella... - Creaciones_Gabito

Antonella siente que la brisa tibia despierta su piel y se despereza, abre la ventana y deja que su mirar se enrede en la hiedra; esa misma hiedra que crea arabescos en la lejana pared.

La mujer derrama cascabeles con su risa, mientras desliza su índice por el bucle, que caprichoso rueda por su mejilla.La música de Bach seductora bella y motivante por la claraboya, desde el balcón cercano; asegura con su melodía que la vida es un manantial de aprendizajes y desafíos.

Inspira profundo y casi en un susurro dice convencida:

”Voy a dejarme fluir hasta hacer de la vida exquisita ambrosia para saborearla sin culpas ni miedos; viajaré por ella despojada de atuendos y máscaras. Necesito y quiero vivir el vértigo de lo desconocido; transitar descalza y con la lluvia resucitar a los sueños.

Se que siendo cabra, sol y cóndor ,soy un mapa que contiene mar, pradera y montaña, no obstante estoy atrapada.

Tengo la certeza que destilo dulzura, color y sabiduría; pero también desorden, locura y cinismo; por ello trato de escuchar al que habla el lenguaje de la vida eterna.

Mi niña interior se esconde muchas veces buscando reparo y afecto, otras juega sin miedos a la guarapa o huye montada en los navíos de los mensajeros galácticos.”

-y así sin artilugios Antonella se ahonda más en los laberintos de su sentir-

“Me descubro adolescente abordando temeraria el mundo de las sensaciones profundas; o mujer que florece en ternura y mieles.

Me percibo luna que intrépida salta murallas, trenza idilios y se mira extasiada en el lago cuajado de estrellas.

Me vuelvo flor que emana perfumes que perturban y hechizan.

Husmeo y leo la sangre que fluye vital en el corazón amante.

Siento que soy cántaro de mansa y fructífera arcilla que recibe en su interior tu amorosa visita; visita que vibra con la maravillosa energía de ser, sentir y vivir en Dios.”

Publicado por Maria de los Angeles Roccato

Bach - Brandenburg Concerto No. 3 In G Major

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