Conocemos muy bien cuál es el concepto de comida rápida, principalmente se alude a los restaurantes u otros establecimientos especializados en elaborar y servir una comida rápidamente, siendo a su vez un alimento que se consume cómodamente pero sin necesidad de utilizar cubiertos. El denominado Fast Food existe en todas las culturas, pero no siempre relacionado con las conocidas cadenas de restauración y su deficiencia nutritiva.

Las hamburguesas, las patatas y otros alimentos fritos, las pizzas… se engloban en la comida rápida cuando en realidad no lo es si cada componente elaborado está hecho de forma artesanal, que es lo que nos gustaría promover, desde las masas de pizza, hasta el pan de las hamburguesas, pasando por la carne de pollo de los nuggets. Por eso hemos reunido lo que se podría definir como doce recetas de comida rápida casera en el recopilatorio dominical.

Si hacemos una hamburguesa casera con ingredientes naturales no tiene por qué ser tan perjudicial y estar tan cargada de grasas como la de los establecimientos especializados, hasta la elaboración de la salsa de tomate, ketchup o mostaza puede estar en nuestras manos. ¿Y si hablamos de pizzas?, ¿qué tiene de malo una masa como la del pan, unas lonchas de jamón, unos dados de berenjena y un poco de queso, por poner un ejemplo?

Disfrutar de la comida rápida casera de vez en cuando ayuda a olvidarse totalmente del fast food en las cadenas de restauración, a quien le guste, o como mínimo se aprende a saborear una hamburguesa, pues por muchos componentes que tenga, son reconocibles. Y encima se puede configurar al gusto, ¿cuál es vuestra hamburguesa favorita?

Os dejamos con algunas recetas caseras de lo que se puede considerar comida rápida, o quizá mejor llamarla comida informal.

Nuggets de pollo: Es innegable que los nuggets de pollo están deliciosos, el sabor de esta carne blanca gusta a todos, y mejora con un crujiente rebozado. La elaboración es fácil y la degustación inolvidable.

Bombas de patata con salsa de huevo frito: Esta es una tapa tradicional en nuestra cultura, le damos algunos toque personales que seguramente os gustarán.

Falafel: El fast food de Medio Oriente, elaborado con garbanzos y especias, y acompañado de una refrescante salsa de yogur.

Bocadillo de secreto de cerdo en pan de pita: Un bocadillo para chuparse los dedos, el secreto de cerdo es un corte de carne muy jugoso y sabroso que en esta ocasión se sirve con un fino y crujiente pan plano.

Bocadillo de lomo a la parrilla con higos y cheddar: Los bocadillos nos permiten realizar múltiples combinaciones, muchas de las recetas que se sirven en un plato también se pueden servir entre pan.

Piadina de jamón y queso brie: La piadina es también un pan plano, ésta es originaria de la región italiana de Emilia Romagna, con este pan podemos hacer todo tipo de bocadillos. El pan es muy fácil de hacer, no dejéis de probarlo.

Hamburguesa con salsa de chile dulce: Si hay platos que se pueden convertir en bocadillo, evidentemente hay bocadillos que se pueden servir en plato, esta hamburguesa es un ejemplo de ello y de lo fácil que es hacer hamburguesas caseras originales y exquisitas.

Mini hamburguesa de pollo con bacon y cebolla: Con pechuga de pollo, chile, lima, jengibre, leche de coco… podéis elaborar una hamburguesa que seguro que repetiréis.

Patatas bravas: La tapa por excelencia, ¿quién no ha disfrutado de unas ‘bravas’ en el aperitivo?, aquí tenéis la receta de la salsa brava que afirman que es la auténtica de los locales más emblemáticos de Madrid.

Pizza vegetal: Una de las opciones para elaborar una pizza vegetal, con pimiento verde, berenjena, cebolla y tomate.

Pizza funghi: La pizza de setas es una de las favoritas entre las básicas, junto a la cuatro quesos, la cuatro estaciones, la boloñesa… lo cierto es que cada vez hay más pizzas favoritas.

Pizza de jamón y berenjena: La cebolla aporta un toque especial a las pizzas, además de sabor y dulzor, jugosidad. Contrasta con el jamón serrano y se enriquece con varios quesos.

¡¡Feliz semana!!