Cuando callas un secreto...
conozco tu fidelidad.
Cuando callas tu propio dolor... conozco tu fortaleza.
Cuando callas ante el dolor ajeno... conozco tu cobardía.
Cuando callas ante la injusticia...
conozco tu complicidad.
Cuando callas ante lo imposible... conozco tu madurez.
Cuando callas ante la insensatez... conozco tu sabiduría.
Cuando callas ante los fuertes... conozco tu temor.
Cuando callas ante lo que ignoras... conozco tu prudencia.
Cuando callas tus propios méritos... conozco tu humildad.
El silencio es el tiempo donde el sabio medita.
La cárcel de la que huye el necio.
Pero también es el refugio donde se esconden los cobardes.
Calla cuando tengas que callar.
Pero que nadie apague tu voz...
Cuando tengas que gritar.
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