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| De: Ceciliak59 (Missatge original) |
Enviat: 14/05/2010 13:51 |
Autocompasión.-
La tienen en mayor proporción aquellas personas que - cuando niños - sólo conseguían la atención de sus padres al estar enfermos o con problemas serios. Como adultos, pretenden seguir disfrutando de "las ventajas de la enfermedad", sin tomar consciencia de que con su actitud producen un efecto contrario al deseado.
Recuerdo un alumno que tuve, ya fallecido. Era diabético desde los cinco años. A los cuarenta, había sufrido un infarto, se estaba quedando ciego, y había perdido la sensibilidad de las extremidades inferiores. Sin embargo, alegre, chistoso y entretenido, animaba cualquier reunión social. Una vez le pregunté por qué nunca se quejaba, teniendo tantos motivos para ello. Y me respondió: "La gente huye de los quejumbrosos, y yo no quiero que me dejen solo".
El también compraba cariño, pero con un profundo conocimiento de la naturaleza humana. |
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Queidos amigos. Nos toca observar en nosotros mismos la autocompasión. Se reportará los días 3 y 4 de junio.
Como apoyo práctico, durante estos días tendremos el reto de tener las manos y los brazos libres hasta donde nos sea posible. Significa que no voy a cruzar los brazos enfrente de mi pecho, ni meter las manos en los bolsillos del pantalón, o apoyarlas en la cintura, o entrecruzarlas por atrás de mi espalda. Recuerden que este tipo de ejercicios, en principio muy sencillos, pero en la realidad muy difícil de hacer, son algo así como despertadores, que los podemos aprovechar para recordar la tarea que estamos realizando, y a la vez puede servir para observar con qué está conectado el hábito de cruzar los brazos (frente a quién lo hago?, en qué situaciones?, estoy enojado o temeroso?, etc,). Y, por supuesto, sirve como un tipo de "sensor" o "medidor" de hasta donde no hay alguien presente, capaz de frenar el hábito... |
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