Es una sensación curiosa detectar como hay un silencio en busca de la respuesta, y si te alcanza la respuesta, su llegada a veces te impregna de asombro como de dónde llegó esta respuesta? ya estaba en mi dentro y silenciada? o ha llegado procedente de algún nivel distinto al mio actual? 

Siempre diré como vivi mi estancia en Monterrey, en casa de Don Carlos y vi como una luz a modo de tubo bajaba del cielo y se le colaba por la coronilla, muchas veces cuando en reunión hablabamos sobre el Trabajo y el nos daba instruciones.

Pero lo más asombroso fué el día que yo saliendo de un sitting, tenía una pregunta en mi cabeza y Don Carlos , bajando por la escalera del piso superior, tras darme solamente los buenos días, pues yo aún permanecia en silencio y concentración, se encaminó a su libreria, cojió un libro , lo abrió sin pensar siquiera,  por una página al azar y me dijo: Mira a ver si ahí encuentras tu respuesta?.......y la respuesta estaba, vaya si estaba¡¡¡¡¡¡

Un beso a cada uno, con sabor a las mandarinas de mi huerto, Mery