Mariposa...

Mariposa que vuelas

al compás de tus piruetas

llévame contigo

sí..., llévame contigo,

y juntos poder volar.


Volar... volar... volar...,

revoloteando sobre las flores

pudiendo de ellas libar

de ese néctar prohibido.


Es tal la sensación de hambruna

que al no verse colmada

sufre el sentimiento mío

quedándome adormecio.


Volando y libando quiero despertar

de ese sueño prolongado

despertando este corazón adormecio.


¡Despierta corazón dormido!

Siente como a tu hondura

llega por fin esa anhelante primavera

sintiendo como conecta contigo

la calidez de otro corazón dormido.


¡Despierta de aquel dolor!

Que te dejo el corazón herido

no huyas ni tengas pavor

despierta cual mariposa.


Despierta olvidando en el olvido

el néctar que no se te dio

a ese tu corazón adormecio,

y... de nuevo Ama al Amor