  
El 12 de octubre de 1942 representó para nuestros pueblos indígenas
el comienzo de una guerra de exterminio que impuso un régimen colonial,
al que se opusieron de manera directa.
517 años después, muchos pueblos originarios preservaron su
identidad comunitaria vigorizada por constantes rebeliones
y la resistencia cultural.
Hoy, los indígenas levantan la voz para tomar en sus manos la historia.
Por esta razón, desde el 10 de octubre de 2002 el presidente de la República
Bolivariana de Venezuela establece por Decreto Constitucional conmemorar
el 12 de octubre de cada año el Día de la Resistencia Indígena.
Esta conmemoración se realiza con el objetivo de reconocernos
y autoafirmarnos en nuestra diversidad cultural y humana,
reivindicando tanto a los pueblos indígenas de América,
como los aportes de los pueblos de las culturas africanas,
asiáticas y europeas, que conforman nuestra nacionalidad.
Es así como Venezuela ha respetado el dolor de sus comunidades indígenas,
instituyendo el Día de la Resistencia Indígena,
por la liberación y en contra del colonialismo imperialista.
El cambio provocado en Venezuela por el Decreto 2028,
de celebrar el 12 de octubre como el Día de la Resistencia Indígena
en lugar del Día de la Raza, como se acostumbraba,
no siempre es entendido enteramente.
La dificultad se debe esencialmente a la visión histórica aprendida,
especialmente en las escuelas y reforzada permanente
por los medios comerciales de difusión masiva.
Comparto con ustedes parte del texto
Taky Ongoy
"......Quiero saber hasta donde mi sangre puede asumir el
compromiso que tengo con mi tierra y mis hermanos
frente al dolor de los que, con nuestra ignorancia ,
inocente en algunos casos , hemos discriminado como
si fueran ellos los culpables de su propia desgracia,
cuando en realidad son la llama viva de nuestra conciencia,
lo poco que queda de nuestra antigua dignidad, de nuestra bella cultura.
No intento hacer aquí anti-hispanismo:
únicamente contribuir a conformar un todo agregando la parte que faltaba.
Una abuela india y un abuelo español transitan por mi sangre.
Para que naveguen felices quiero darles un curso firme,
apoyado en el respeto y el amor por mi propia cultura,
tratando de entender por qué festejó todavía fechas
que representan la muerte y el aniquilamiento de bellísimas
expresiones artísticas que son parte del patrimonio cultural universal,
y de sus creadores que fueron justamente mis antepasados.
América vive y yo soy parte de este cuerpo que se niega
a festejar cuando en realidad quiere llorar.
Deseo ese respeto.
Necesito la autocrítica porque nuestro futuro
se erigirá con hombres conocedores de la verdad y fieles a ella."
Victor Heredia

  
|