Todos los seres humanos tenemos dos aspectos que mostrar al mundo:
la
cara amable, con todas las cualidades y fortalezas que hemos
desarrollado,
y el aspecto
negativo con todos nuestros defectos,
fallas
de carácter, e innumerables carencias.
A esto habría
que añadir que cuando la parte positiva está muy desarrollada,
por lo regular
también la sombra, es muy poderosa.
La ciencia de la felicidad consiste,
en saber
alinearse ... para poder obtener lo mejor
que cada ser
tiene para dar.
Esto
se logra solamente cuando somos capaces,
de mantener
nuestro enfoque, en su lado positivo.
Cuando ocurre lo
contrario
(percibes reiteradamente sus
defectos,no escatimas en la
crítica,
y rechazas un
determinado comportamiento, que tú desapruebas)
entonces creas la correspondencia exacta
para que esa
persona descargue en ti,
toda su
negatividad.
Realmente todo
depende del lente que tú uses,
porque es
tu enfoque el que crea.... las correspondencias.
Tus experiencias
siempre responden, a una ley cósmica que decreta:
“De lo
mismo que tu das .... recibes”.
Consideremos por ejemplo el caso de una
pareja de enamorados.
Cuando están de novios normalmente los
dos
se regocijan
en las cualidades del otro,
y su relación
los transporta hasta la cumbre de la felicidad y la armonía.
Sin embargo, en
el momento en que comienza su convivencia,
empiezan a
notar los defectos del compañero,
y sus atributos
positivos fácilmente pasan, a segundo plano.
Entonces la polaridad
cambia, y se comienza a atraer
lo peor que la
pareja tiene para dar,
naturalmente en
detrimento de la felicidad mutua.
Todo conflicto en las relaciones
comienza,
con el enfoque
de la mente,
en un aspecto
negativo del otro.
La
mente juzga hace su propia interpretación de lo que ve y luego condena.
Cuando un patrón mental ha sido creado,
la energía
fluye
en la
dirección que se le imprime,
hasta
devolverse y producir un resultado.
En el caso
antes citado las consecuencias serán:
perder la paz
y atraer cada vez más, sufrimiento.
Con el agravante de que, una
vez ese patrón mental queda establecido,
será más fácil
... reciclar desdichas,
que cambiar las
actitudes ya establecidas.
La crítica y el chisme son un paso más
adelante
en este
proceso de crear conflictos.
Cuando la
palabra hablada se une al pensamiento negativo,
quiere decir
que la energía de creación,
que hemos
emitido, llevará más fuerza.
Tarde, o
temprano el boomerang que hemos lanzado
retornará a
... su dueño
trayendo
consigo, una carga negativa,
que
invariablemente producirá roces,
disgustos y
molestias.
Te preguntas entonces:
¿por qué nadie
me quiere?
¿Por qué mis
relaciones están llenas de asperezas
y solo recojo
incomprensión
y agresividad
de quienes me rodean?
¡Observa tus pensamientos, y tus palabras!
En tu mente
tienes la energía para crear tu realidad.
Si escoges
pensar lo peor del otro,
atraerás lo
peor que él,
o ella, tiene
para dar !!!
Si reconoces
sus valores y te enfocas en ellos,
ocurrirán dos
cosas, ambas favorables:
1) Te sentirás bien contigo mismo
y
2) Esa
persona estará abierta para compartir contigo
sus tesoros
internos.
No olvides que hasta el criminal más
empedernido,
hasta el ser
más abominable,
posee una
chispa de luz en su corazón.
Concéntrate en
reconocer esa chispa
y
experimentarás en tu mundo
la milagrosa
transformación
que solo el
poder del amor
sabe
brindar.