Dejemos atrás todo lo que nos cause melancolía.
Si necesitas hurgar en el ayer, busca solamente los momentos bellos, la felicidad, los detalles que te hicieron sonreír y amar… No dejemos que el pasado nos ahogue, no dejemos que el ayer nos envuelva de nuevo en la tristeza, mejor convirtamos esos malos momentos en nuevos anhelos.

Mírate en el espejo y sonríe, contempla la maravillosa sonrisa que tienes, la mirada cálida que enamora y el corazón palpitante en espera de nuevos sueños y sentimientos que pueden hacer renovar tu vida y convertirla en éxito e ilusiones.

Pero sobre todo, ama…

Ama tanto que te duela el corazón de tanto amar, que tus nuevas ilusiones sean prósperas, bellas, para que con ello tu vida tome nuevo sentido y sea para bien…

Renuévate por dentro, que tus propósitos de año nuevo sean para bien… que tu sonrisa sea perdurable aún en las adversidades y no te rindas jamás. Nunca te rindas, que eso sólo te hará débil… alza los brazos al cielo y emprende el vuelo hacia el éxito y el futuro prometedor que te hará ser diferente… No te rindas.

© Autor: Shoshan.