Dios le dijo entonces
Sé que eres un profesor con una gran trayectoria,
así que te resultará fácil
decirme cuáles son las tres primeras personas en la gramática.
El profesor se sorprendió de aquella pregunta y respondió:
Pues eso es muy fácil para una persona
con mis conocimientos son: YO, TU y ÉL.
Dios le dijo: Ves, ese es el problema,
aún con tus conocimientos lo has dicho al revés
y esa es la causa de tu infelicidad.
El orden correcto es:
ÉL, refiriéndote a mí para que yo sea el primero en tu vida.
TU, para que el prójimo, después de mí, sea lo mas importante en tu vida.
Y finalmente viene el YO.
“Cuando YO sea el centro de tu vida y seas de bendición a tu prójimo,
entonces, sin que ocurra nada especial,
un día te darás cuenta de que ya eres feliz”