En física hay un principio indiscutible: el de la acción y reacción. Toda acción es seguida de una reacción, o lo que es muy parecido, toda causa tiene a continuación un efecto.
Cada uno de nosotros somos acciones y causas y dependiendo de las acciones y causas que pongamos en movimiento recibiremos reacciones y consecuencias.
Si ataco, ofendo o maltrato a alguien, es posible que reciba a cambio una reacción o una consecuencia desagradables.
Pero si mis acciones son buenas y generosas, seguro que generaré una cadena de acontecimientos en la que me llegará una recompensa segura.
Presta atención a todos tus actos, igual que un físico pone atención a sus experimentos en el laboratorio para generar reacciones y consecuencias buenas y evitar los malos resultados.
Sentirás una gran satisfacción y todos te apreciarán