Las galletas son uno de los alimentos que los niños se comen más a gusto desde que son bien pequeños, y además sabéis que algunas (como las galletas crujientes de plátano que os explicamos hace unos días) son muy fáciles de cocinar, incluso las podéis elaborar con vuestro hijos y pasar un rato muy entretenido y divertido.

Hoy os vamos a contar cómo hacer unas galletas un poquito más elaboradas, con relleno incluido, y a las que podemos darle la forma de una calabaza por aquello de que nos aproximamos a la fiesta de Halloween que, cada vez, estamos incorporando más a nuestra cultura.

Ingredientes:

Para las galletas: 140 gramos de mantequilla, 175 gramos de harina, 50 gramos de azúcar glasé y la ralladura de la piel de una naranja. Para el glaseado además necesitaremos: 50 gramos más de azúcar glasé y 1 cucharada de zumo de naranja natural. Y, finalmente para el relleno de las galletas: 100 gramos de queso mascarpone, 1 cucharada de azúcar glasé y 25 gramos de chocolate negro fundido.

Modo de hacerlo:

Para hacer las galletas batimos bien la mantequilla a la que añadimos la harina, el azúcar y la ralladura de naranja y removemos hasta que está todo bien mezclado y se va cuajando una masa. Ésta debemos amasarla y formar una bola que envolvemos y la metemos en la nevera durante una hora más o menos.

Mientras tanto, podemos ir mezclando todos los ingredientes con los que vamos a rellenar estas deliciosas galletas. Es decir, el azúcar, el chocolate y el queso mascarpone. Es preciso batirlo bien para que el queso se compacte con el chocolate. También podemos ir precalentando el horno a unos 180 grados.

Trascurrida la hora disponemos la masa y la amasamos de nuevo hasta conseguir una lámina fina de tres milímetros aproximadamente. De ella sacaremos, con un molde redondo, tantos círculos como la mitad de galletas vayamos a hacer. Por tanto, si son diez galletas, haremos veinte círculos.

A la mitad les daremos la forma de una calabaza (para aquellos que tengan un molde de calabaza lo tienen más fácil) mientras que la otra mitad no requiere más trabajo. Una vez dibujadas, con la masa sobrante se pueden hacer unos rabitos para las calabazas y las metemos en el horno durante unos 15 minutos y dejar enfriar.

Finalmente, ponemos la crema del relleno en las galletas lisas (bien colmadas) y las vamos tapando con las que tienen forma de calabaza. Como toque definitivo, barnizamos las galletas con el zumo de naranja azucarado.

Ya tenemos preparadas nuestras galletas de Halloween para hacer una merienda diferente, dulce y muy nutritiva. ¡Qué las disfrutéis!