Rosa de sangre que oprimes el corazón,
la crueldad de este mundo reflejas,
y nublas el alma hasta dejarla vacía...

Tus espinas pueden herir
pero que bella es la oscuridad que dejas.
Pues el dolor te hace vivir...

Recuerdos falsos,
momentos ilusos y sangrantes.
Eso es lo que se me viene a la mente.

Pétalos llenos de tristeza
que tocan una melodía de puro letargo.
Quisiera aún así tomarte con sutileza...

Seduces con tus sentidos,
dulce néctar cargado de rudeza
hasta dejar con tus labios sólo frío...

Tus espinas aprovechan ansiosas,
víctima de tus encantos maliciosos
que desangren y opaquen la vida al tocarte...

Muerto pareces pero estás viva.
Sin esa chispa que te hace sentir
y sufrir, vivir y todo lo demás...

Pero la muerte es sólo el comienzo
de la naturaleza en otra vida muerta
que reencarna convertida en rosa...