Me quedo aquí...
donde acaricio tu alma silenciosa,
donde un suspiro dice más que tantos versos...
Al fuego del latido de tu pecho,
al ruego de acercarme más y más...
Me quedo en las auroras de tus besos,
temblando como hoja soñadora,
jugando con el viento de tus manos
riéndo en la caricia de tu piel...
Me quedo aquí...
Rendida a los encantos de la noche
haciendo melodías en tu cuello
robándole pasiones a tu ser...
Es mágico el abrazo que embelesa
queriendo elevarse a las estrellas
naciendo en cada cauce sin querer...
Me quedo aquí...
Elijo ser la tinta con que escribas
las páginas doradas de la vida
amándote y cuidándote a la vez