Me gustaría cantarle al viento, para que cuando una brisa pase por éstas tontas melodías el viento las lleve hacia la dirección donde tu corazón se encuentra, y sepas de este absurdo sentimiento que aunque parezca mentira el viento me acompaña en mis penas. Cuando el viento roza mi corazón, es como si tus manos acariciaran mi piel. Y cierro mis ojos para así poder verte, poder sentirte, pero no pretendo fingir que estás aquí, pretendo que suceda un milagro y te des cuenta que sin ti no puedo vivir, que sientas que aún me haces falta, que corras en mi auxilio y me digas que tú también me necesitas.

Que necesitas de mis besos y mi presencia para que así puedas hallarle un lindo sabor a los segundos que vives día con día. Para que esta niña que se encuentra escribiendo estás líneas sienta que aun la quieres, que lo que escribo no es más que lo que siento, y que con mis ojos inundados de lágrimas y mi corazón lleno de llanto ruega a Dios que todo lo escrito suceda, que se haga realidad, y si él me dice que si créeme sería feliz pues moriría justo ahí.

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